6 / 3 / 2000

DOCUMENTO 229

 

Transcripción

 

 

{f. 00a}

 

{en tejuelo:229}

 

Mexicain

Manuscrit

Un cahier in folio

74 pages

“Historia de la venida de Santo

Tomas compuesta por el P[adre] Simon de Vasconzelos.

1788.

No 229.

Volume de 74 pages.

plus la page a préliminaire

5 août 1898.

 

{f. 00b}

{een blanco}

 

{f. 00c}

Historia de la venida de Santo Tomas, compues[t]a por el P[adre] Simon de Vazconcelos. Mexico y agosto 6 de 1788 {portada barroca con cenefa en los cuatro márgenes y adornos interiores}.

 

{f. 00d}

 

{verso de la anterior}

 

{f. 1}                                                                                                        /1/ 

Invent[ario] 8 n[úmero] 54

 

El Padre Simon de Vasconzelos, religioso de la compañia de Jesus, en la cronica q[u]e el año 1663 compuso de la provincia de el Bracil, a fojas 51, num. 82, lib[ro] 7, de las cosas curiosas de el Bracil, escribe asi: quanto a la religion combenian todos los yndios de todas las naciones, asi de una, como de otra parte de la America; q[u]e habia antiquisima de padres, a hijos, q[u]e muchos siglos despues de el dilubio, andubieron en sus tierras unos hombres blancos barbudos, q[u]e hablaban cosas de un dios, y de otra vida: uno de ellos se llamaba Sume, q[u]e quiere decir Thome; y q[u]e estos no fueron admitidos por sus antepasados, y se acogieron a otras partes de el mundo, enseñandoles primero con todo a plantar, y coger el fruto de el principal mantenimiento de q[u]e husaron, llamado, manduca.

Y a fojas 777, libro 2, num[ero] 78 en adelante, dice asi= habiendo d[ic]ho en general, q[u]e quanto a la fee de Dios, quanto a la fee de Christo, en particular, es cosa digna de saberse, la q[u]e los yndios anotaron en respuesta, acerca de la venida de el Apostol Santo Thome a esta su tierra, a donde decian, tenian por tradicion, les enseño cosas de otra vida; pero q[u]e no fue resibido por sus antepasados; sobre esta duda curiosa, para mayor claridad, dire lo q[u]e vi, y alcance de personas fidedignas. Yace en aquella parte de playa, q[u]e viene corriendo a el norte, de el puerto de la Villa de San Vicente, no muy lexos de el, un pedazo de arrecife o laja q[u]e cubre, y barra{e} el mar, con la variedad de sus ordinarias mareas, en medio de esta ven todos los q[u]e en aquella parte llegan (ademas de otras principales) dos huellas (pegadas llama el portugues) de pie derecho, e izquierdo de un hombre descalzo, en proporcion de quien camina asi a la mar; la parte posterior, para la tierra, y la anterior, para la mar; y de tal modo permanentes, q[u]e no pudieron los siglos pasados borrarlos, ni parece podran los futuros: porque supuesto q[u]e no entran de impresion en la piedra, son como de pintura

{f. 2}                                                                                                        2

tan natural, y viva, q[u]e el mejor pintor de el mundo, parece no podra imitar obra tan perfecta.  De esta huellas {sic}; pues, fueron siempre de los portugueses, desde su primera entrada en el Bracil, tenidas por cosa milagrosa, y respectada por cosa santa, h[as]ta el tiempo en q[u]e este escribio, tomando informacion de los primeros q[u]e poblaron esta capitania, y despues de ellos algunos padres de nuestra religion, hallaron por tradicion antigua, de padres, a hijos de los naturales de la tierra, q[u]e heran huellas de un hombre blanco barbudo, y bestido, q[u]e en tiempos antiquisimos anduvo en aquellas partes llamado Sume en su lengua, q[u]e es lo mismo q[u]e en la nuestra Thome; y enseñava cosas de la otra vida,y en el fundamento de esta tradicion; y de la misma cosa, q[u]e de suyo, parece milagrosa, fue siempre ha sido, y tenido por lugar santo, y venerado por tal; y con razon, porque a que a propocito se pone naturaleza a pintar {sic} imagenes tan proprias de los pies de un hombre? Y despues a que proposito las conserva por tan larga distancia de tiempo?

Sobre la verdad de esta tradicion de los yndios, confieso q[u]e tuve yo en tiempos pasados alguna duda; pero de esta me fue librando el mismo tiempo, y la experiencia, de manera q[u]e vengo hoy a tenerla por cosa sierta, convenseme los argumentos de las grandes señales q[u]e se hallaron, y hallan de presente en esta corte de el Brasil y fuera de ella por toda la America: en esta Bahia de todos Santos, afuera de la barra en otra playa semejante, distante como dos leguas de la ciudad a donde llaman Itapoa[1] vide con mis ojos, y ven cada dia nuestros padres y todo el pueblo, en otro pedazo y arrecife o laja, una huella de hombre perfectisima, metida de impresion en la substancia de la piedra la parte superior o posterior hacia la tierra, la anterior asi a el mar. A esta viniendo yo de un pueblo de yndios, vide q[u]e concurrian

{f. 3}                                                                                                          3

todos los q[u]e traiamos en nuestra compañia aun los q[u]e venian cargados: pregunte la causa a uno de ellos (q[u]e yo hera nuevo en el camino)  respondieronme todos: pay Lume pipuera angaba eta: q[u]e esta alli la huella de santo Tome; entonces les pedi me llevasen a ella, q[u]e dije de un pie descalzo izquierdo, asi a la manera q[u]e si fuera impreso en blando barro, tienen los yndios en gran veneracion, y no pasa ninguno q[u]e no la visite (si puede) y se persuaden, a q[u]e poniendo alli el pie les queda mejorado todo el cuerpo.  No es esta parte tan mejorada o frequentada como la otra de San Vicente de los Portugueses, por que esta la mayor parte de el tiempo cubierta de la mar; y solamente aparece, y descubre en las menguantes mayores.

Dentro de la barra de la misma bahia de Todos Santos, como a tres leguas de distancia, en el paraje q[u]e llaman Santo Tome o Toque: en otra playa, y en otro pedazo de laja semejante,  dejo el mismo santo otras dos huellas en la misma forma q[u]e la de la laja de Tropoa, y en distancia la una de la otra, lo q[u]e requiere la proporcion de los pasos ordinarios de un hombre q[u]e camina, fueron siempre en todo el Bracil havidas, tenidas, y veneradas por huellas de el santo apostol, milagrosas entre portugueses: y la tradicion antequisima de los yndios, deribada de padres, a hijos es en la misma forma, q[u]e arriva hemos d[ic]ho q[u]e son huellas de un hombre blanco, barbudo, y vestido, q[u]e en aquellas partes anduvo, y les hablaba de otro modo de vivir muy diferente, el qual se llamaba Tome, a quien afirmaban estos, particularmente q[u]e sierto dia, exasperados sus ahuelos de la novedad de su doctrina, o enducidos de sus hechiceros, o de el comun enemigo de el genero humano arremetieron a el para prenderlo, el se fue derecho a la playa, retirandose, y abriendo camino por un monte abajo, el

{f. 4}                                                                                                          4

qual hera tan levantado, y enriscado, q[u]e hera imposible seguillo por alli, y q[u]e mientras por otra parte rodearan con algun cercuito, lo buscaban, tuvo lugar de huir, y lo vieron caminar sobre las aguas de el mar, dejando burlados sus sus {sic} intentos; y en memoria de su repugnancia aquellas huellas impresas en la piedra referida. Esa tradicion es constante: haberiguaronla los padres de la compañia de Jesus q[u]e en el mismo lugar residian antiguamente los quales nuestros padres reconocieron siempre, y veneraron aquellas señales como de el santo y como cosa sobrenatural. En la cumbre de el monte por donde bajo, fundo la devocion de el pueblo una iglesia en honra de el santo y en memoria de la d[ic]ha tradicion, la qual iglesia siempre fue venerada, y visitada de los fieles, y en el tiempo presente lo es con mas continuacion, y concurso, por los efectos extraordinarios, havidos por milagrosos, q[u]e halli experimentan la fee comun de los necesitados, y enfermos.

Aqui, para confirmacion de lo sobredicho, obro la divina omnipotencia una circunstancia, q[u]e parece trae mucho de natural: es esta una fuente peremne y dulce q[u]e brota de otro peñazsco, junto a el de las huellas, a pocos pasos andados, a la falda de el propio monte, por donde es tradicion q[u]e bajo el santo a esta fuente llama el bulgo: fuente de el Santo Tome milagrosa, por nacer milagrosamente de la peña viva, qual alla la de Moyses en el desierto: otros, porque milagrosamente nacio a el toque, y pisada de un pie de el santo, cuya huella ahi se vio qual la de el pie de el cordero de San Clemente de subcuios pedes fons vivus emanat: de aqui quieren se deribe el nombre, Toque, Toque: otros, por q[u]e milagrosamente se concibe en un mismo tenor sus aguas, asi en invierno como en verano; sin q[u]e jamas redunden aunque sea en mes en que mas llueva, sin que deje de estar llena, por mas calma, y sequedad q[u]e haya en la tierra: otros finalmente, porque cura milagrosamente con sus aguas todo genero de enfermedades.

{f. 5}                                                                                                          5

Eso es lo q[u]e dicen: yo dire lo q[u]e vide con mis ojos, y es lo q[u]e parece mas verosimil, por informacion q[u]e tuve de personas ancianas, vecinos de el mismo lugar, yendo a el solamente para efecto de averiguar la verdad: vide q[u]e es cierto q[u]e nace aquella fuente de la piedra sobredicha,[2] no de aquel mismo lugar, donde su agua se junta, como en pila de agua bendita; sino un poco mas arriba de uno como ojo pequeño de donde mana; y sale en tan poca cantidad, q[u]e apenas se ve, si es de quien hicere refleja; porque sale como lamiendo la laja, y como apenas la moja no mas; pero llenando siempre la pila, y lo q[u]e trasborda, o revosa, es tambien imperseptible, porque de el mismo modo va lamiendo la piedra, o laja, subtilmente y como es poca, y cae en arena, ni se empoza, ni se puede percibir: con razon de quanto vide, dudo, si se ha de desir q[u]e nace esta agua de la misma piedra viva; o bien que por aquel ojo q[u]e dije viene atrahida de el monte? Y la razon de la duda es porque hace fuerza la experiencia, q[u]e demuestra q[u]e ni mengua, ni redunda jamas el agua de la fuente, sino q[u]e siempre se esta en un mismo ser: porque sabemos q[u]e lo natural de las fuentes q[u]e tienen su nacimiento de la tierra, es q[u]e redundan en las invernadas, y faltan en las grandes secas; y la q[u]e nace de piedra viva, no sigue estas variedades, porque esta no depende de la tierra, q[u]e se empapa con grandes invernadas, o se seque con grandes calmas: cada qual jusgara en esta duda lo q[u]e le pareciere; q[u]e yo solo digo lo q[u]e vi, y experimente.

A serca de lo q[u]e dicen q[u]e broto al toque de el pie de el santo supuesto q[u]e no halle en esta piedra señal de la huella del santo ni a quien la viere, forme con todo un argumento favorable: porque supuesta la tradicion referida, q[u]e bajo huyendo el santo por aquel monte abajo, observe (poniendome en el lugar de las huellas de la laja, termino en q[u]e fue a parar; y mirando derecho a la cumbre de el mismo a donde dicen q[u]e estuvo el pueblo, y de donde dicen q[u]e salio) q[u]e la fuente esta en el camino y q[u]e de fuerza viniendo derecho habia de pasar por el peñasco en q[u]e nace; y de aqui se hace verosimil

{f. 6}                                                                                                        6

q[u]e yendo pasando pisaria con los pies la piedra, a cuyo toque brotarian las aguas: quanto a el efecto de las aguas de esta fuente, bien se puede por ellas con verdad llamar milagrosas: es cosa muy sabida, y publica, q[u]e en nombre de el santo y con modo habido por milagroso, dan salud aquellas aguas a los enfermos q[u]e llegan a lavarse en ellas; o las hacen traher para eso. Todo lo colegi de la gran frequencia de las romerias q[u]e hacen a ellas, y de los votos q[u]e vi, colgando de las paredes de la iglesia y de los varios, y diversos sucesos milagrosos q[u]e oi contar en este genero de hombres fidedignos.

Las huellas de el santo q[u]e dije a el principio, no las vide, ni se columbran: vide empero la laja y en ella me mostraron los antiguos de el lugar la parte onde escribieron, y en donde vieron con sus ojos en q[u]e no puede haver duda alguna, por lo q[u]e convence la fama, y lo testifican instrumentos antiquisimos de datas, y mercedes de tierras de aquellos primeros tiempos, en los quales q[u]e asignan por linderos la[s] huellas del Santo Thome; tanto para tal parte, y tanto para la otra estancia; y estos instrumentos vide, y tenemos uno en nuestro archibo de este colegio de la bahia de Todos Santos pero el tiempo q[u]e todo lo gasta, vino passados siglos, no menos q[u]e de mil y quinientos años a segar estas santas señales: unos dicen q[u]e por la continuacion de los devotos q[u]e gustaban de llevar reliquias raspando la pared de ellas; otros q[u]e ayudo para ello la disposicion de el sitio q[u]e es playa de arena muy movediza, y pudo arrazar, o llenar los vacios conglutinandoce con la misma piedra.

Parando yo por Nuestra Señora (Santisima) de la Asumcion en Cabo frio,[3] distante Rio de Janeiro diez y ocho leguas, en altura de 23 grados y un sexto al sur de la lignia, el capitan q[u]e alli governaba, me fue a mostrar un paraje, q[u]e llaman, Itaj[f]ura (nombre de los yndios), entre la ciudad, y una fuente extraordinaria, de agua colorada medicinal, en

{f. 7}                                                                                                          7

especial contra mal de piedra. Aqui me mostro un peñazco grande amoldado, y señalado con varias bordonadas o golpes (de 7 a 8) tan impresas en la piedra, como si con el mismo bordo golpearan en la piedra, como en blanda cera; y porque todas las muestras son iguales: y la tradicion de los yndios, es q[u]e son de el bordon de Santo Tome, en ocasion q[u]e los yndios resistian a la doctrina q[u]e halli les predicaba, y les quiso mostrar con este ejemplo, q[u]e quando las peñas se dejaban penetrar de la palabra de Dios, sus corazones mas duros resistian mas obstinados q[u]e las duras peñas.

Es tambien digna de notar aqui la historia de Mayrape, lugar distante como diez leguas en lo interior de la ensenada de esta ciudad:[4] es un camino formado de arena solida, y pura, de media legua de largo la mar adentro: y la tradicion aserca de el es, q[u]e las hizo milagrosamente Santo Tome, quando anduvo en esta bahia de Todos Santos predicando a los yndios de aquel paraje: ellos se amotinaron para el santo de lo q[u]e huyendo la furia de los arcos, y flechas, fue levantando el mar aquel camino, por el qual caminase a pie enjuto a vista de ellos, cubriendose luego el principio de el en agua, porque no le pudiesen seguir los gentiles, q[u]e en la playa quedaron admirados de cosas tan extraordinarias, y de alli en adelante llamaron a aquel camino milagroso Mayrape, q[u]e es lo mismo en lengua brasilica, q[u]e camino de hombre blanco; asi llamaban a Santo Tome, porque h[as]ta  entonces a ningun hombre blanco habian visto.

La altura de la ciudad de Parayba,[5] en 7 grados a la parte de el sur, en el monte de un lugar, hoy desierto, y solitario, se ve otro peñasco con dos huellas de un hombre mayor, y otras de otro mas pequeño, y siertas letras esculpidas en la piedra: este lugar es hallado a cada paso, siempre q[u]e los yndios salen de sus pueblos a cazar a el monte, y tienen entendidos q[u]e aquellas huellas son de el  Santo Tome; y segun lo q[u]e afirma S[a]n Chrisostomo, y Santo Tomas, q[u]e acompañaba a Santo Tome uno de los discipulos de Christo, y las segundas huellas me-

{f. 8}                                                                                                          8

nores deben de ser de este: aquellas letras, pretendieron los yndios remedar a nuestros padres en aquellos pueblos; pero nunca fueron entendidas h[as]ta  [h]oy, ni su significacion tampoco.

No solo en le Brasil, sino en toda la Nueva España[6] hay noticias admirables; dire las de mayor cuenta: Fray Juachin Brulio en la historia de el Peru de su religion de San Augustin lib[ro]. 7 cap[ítulo]. 5 refiere, q[u]e en la mar del sur, en un pueblo, llamado Guatulco, tenian aquellos yndios sus naturales, no solo por tradicion antiquisima de sus antepasados, sino aun por escrito, en ciertas pinturas de q[u]e husaban en lugar de letras, q[u]e  una cruz q[u]e halli adoraban con suma veneracion, les havia sido dada por Santo Tome, cuya imagen, y propio nombre, tenian esculpida en peña viva, en una roca, para memoria perpetua de cosa tan santa, lo mismo refiere el Padre Fray Garcia Libro 5 cap[ítulo] 5 en donde añade, q[u]e  esta cruz es la misma q[u]e  pretendio quemar aquel insigne hereje Francisco Draque quando paso el estrecho Magallanes; pero sin efecto, y con ejemplo de un portentoso, y maravilloso milagro, porque la cruz echada en las llamas no se quemo; hantes por tres veces frustro la perfidia intencion de el hereje, q[u]e otras tantas intento consumirla con fuego, cubriendola con pez, y alquitran: y finalmente esta milagrosa cruz, traslado, pasados años para la ciudad de Oaxaca un prelado zelosos D[o]n Juan de Cervantes; y halli es venerada con gran multitud de milagros.

Fray Bartolome de Casas,[7] varon fidedigno, Obispo de Chapa, despues de hecha grave informacion de el caso, afirma en una apologia suya, q[u]e consta por antiquisima tradicion de los yndios de aquellas partes, q[u]e en tiempos antiguos fueron anunciados a sus ahuelos los misterios de la Santisima Trinidad, parto de la Virgen y de la pasion de Christo por unos hombres

{f. 9}                                                                                                          9

blancos, barbudos, vestidos h[as]ta los artejos; combiene con lo q[u]e arriva diximos, q[u]e andaba con el Santo Apostol Tome otro discipulo de Christo.

Aquellos primeros castellanos Fernan Cortez y sus compañeros, quando al principio entraron en la isla de Cosumel en Nueva España, hallaron una cosa q[u]e los causo admiracion, porque vieron un hermoso muro de piedra cuadrado, y en medio de el arbolada una cruz de 10 palmos en alto venerada de todo el gentio, por dios de la llubia;[8] y lo q[u]e es mas, q[u]e por su medio la alcanzaban en las secas, y haciendo para el efecto procesiones, y preces a su modo gentilico; q[u]e por milagro de Santo Tome q[u]e alli la planto (segun noto el autor de la historia de el Peru arriba citada), o por traza de el enemigo ynfernal, para hacer q[u]e esta gente idolatrase en el exceso de la veneracion, teniendo aquella cruz por verdadero dios; hera este lugar tenido por comun sagrario de todas las islas circunvecinas, y no havia pueblo alguno q[u]e en el no tuviese su cruz de piedra marmol, o de otra materia: y asi lo afirmaba bien Gamarra 2a parte, cap[ítulo]  75 y justo .. en el libro 3 en q[u]e trata de la cruz.

Finalmente pruevace el asunto de q[u]e anduvo por estas partes el Apostol Santo Tome, por testimonios infinitos de todos los reinos de la America, y de todas las gentes y naciones naturales de el Brasil, de el Paraguay, de el Peru, especialmente de Cuzco, Quito, y Mex[i]co como largamente trata, y confirma el Padre Maestro Fray Antonio de la Calancha[9] en el libro 2 de su Historia peruana, cap[ítulo] 2. Lo q[u]e es todo supuesto: quien habra q[u]e niegue hoy el haverse de tenerse por cierta tradicion tan constante por tantas vias, por tantos reinos, por tantas naciones, y casos tan extraordinarios? de otra manera negarse a la fee comun de la tradicion humana,[10] en todas las demas cosas, tanto contra el estilo de el mundo, y el contento de la sagrada escritura, q[u]e dice, exodo 32 interroga a patrem tum, et ancetiali tibi: malores tus et dicent tibi sino, pregunto yo: asi como en el papel las letras, porque no se imprimiran tambien en las memorias las especies

{f. 10}                                                                                                      10

de las cosas memorables? Neguemos, pues las azañas de los cesares, pompeyos y de nuestros viriatos sertorios, y otras historias semejantes.

Contare un caso gracioso,[11] y juntamente muy a el caso en prueba de el intento, refierelo el Padre Alonso de el Valle de la compañia de Jesus, en el libro q[u]e compuso de la Historia del reino de el Chile, para paragrafo ultimo, cap[ítulo] 7 libro ocho q[u]e oyo contar muchas veces a el Padre Diego de Torres en la misma compañia compañia, {sic} provincial, y fundador de aquellas provincias, varon digno de todo credito: q[u]e yendo el mismo provincial caminando por una calle de Quito, vio un dia de fiesta un indio anciano, q[u]e tocando un tambor estaba a el son de el cantando cierta historia en su lengua, la qual estaban oyendo con atencion, y cuidado otros mancebos: paro el padre y en acabando de cantar al indio le pregunto: que ceremonia hera aquella? respondio el uno de aquellos oyentes, q[u]e aquel indio q[u]e cantaba, hera el archivista de el lugar, el qual hera obligado a salir los dias festivos a aquel lugar, y repetir cantando, las tradiciones, y cosas memorables de sus antepasados, en presencia de aquellos oyentes, q[u]e por su muerte estaban destinados a quedar en su lugar: por q[u]e como los yndios no tienen libros, no tenian de esta diligencia para conservar en las memorias las historias antiguas. Paso mas a preguntar: q[u]e hera lo q[u]e cantaba de presente? Respondio: q[u]e cantaba primeramente la historia de un diluvio q[u]e hubo en el mundo q[u]e antiguamente inundo toda la tierra, y q[u]e pasado despues de aquel diluvio muchos siglos, habiendose vuelto a poblar de nuevo el mundo, vino a el Peru un hombre blanco llamado Tome a predicar una ley nueva, nunca oida en aquellas regiones. Ejemplo es este q[u]e muestra con evidencia la fee q[u]e debemos dar a las tradiciones de las gentes, aunque barbaras: que mas importa q[u]e el escribano escriba en papel las historias; o q[u]e aquel de el tamborilillo las asiente en

{f.11}                                                                                                       11

la memoria de los q[u]e le estavan oyendo para efecto de q[u]e sean conservadas en perpetua memoria? y por que haremos mas aprecio y estima de lo q[u]e se escribe en un papel q[u]e lo q[u]e se imprime en la memoria de los hombres? de q[u]e por el d[ic]ho discurso saco por cosa cierta, q[u]e se debe dar credito â la tradicion q[u]e afirma haver andado en estas partes el Apostol Santo Tome.

Y para q[u]e de una vez apretemos este asunto,[12] tengo de hacer de ello demostracion, con argumentos de mas perfeccion: y digo asi. Alguno de los aagrados apostoles, por obligacion de precepto divino, paso â èsta parte de la America a promulgar el ebangelio de la ley de gracia, en q[u]e los hombres se havian de salvar: èste apostol no fue S[an] Pedro ni S[an] Pablo, ni S[an] Juan, ni S[an] Andres, ni S[an] Felipe, ni Santiago, ni S[an] Mateo, ni S[an] Tadeo, ni S[an] Simon, ni S[an] Matias, ni S[an] Bartolome, ni el otro Santiago: resta luego q[u]e fue Santo Tome. Sola la primera de estas proposiciones tienen necesidad de prueva, q[u]e alguno de apostoles sagrados, por obligacion de precepto divino, paso a esta America a promulgar el ebangelio de la ley de gracia, en q[u]e los hombres se havian de salvar: â esto parece q[u]e convencen las palabras de Christo por S[an] Marcos en cap[ítulo] 76[13] en donde antes de subir a los cielos, lanzo la obligacion q[u]e tenia sobre sus apostoles, y les dixo asi: id por el mundo universo, y predicad el ebangelio a cada criatura: el q[u]e creyere, y fuere baptizado salbarse ha; y el q[u]e no creyere condenarse ha: quien dice por el mundo universo, no excluye la America, q[u]e es quasi la mitad de el mundo, quien dice a toda criatura, no deja y aparta las de America, q[u]e son quasi la mitad de las gentes, y q[u]e este precepto se haya de esplicar en la generalidad q[u]e suena de mundo, y criaturas: entienden los s[an]tos padres (a el margen citados) y doctores sagrados[14] (muestralo con razon eficaz) por q[u]e Christo hera redentor universal, asi de la America, como de las otras partes de el mundo: luego, la misma obligacion le corria de mandar predicar el ebangelio a la parte de America como a las demas partes de el mundo

{f.12}                                                                                                       12

asi lo pondero Hugo Cardenal,[15] sacando la misma consequencia: hera Christo (dice el) redentor unibersal de el mundo: luego a todos debia comunicar el beneficio de la ley ebangelica (declaro mas el argum[en]to) porq[u]e esta ley de gracia, tiene el ser gracia, y tiene el ser ley: en quanto gracia es don universal de todos, por q[u]e es ganada por la muerte, y sangre de Christo, como redentor universal de todas las gentes, sin e[x]cepcion de personas; cuanto, y mas de el medio mundo de la America: en quanto ley debe este ebangelio de Christo ser promulgado, segun el d[e]r[ech]o de las gentes, humano, y divino en todo el distrito de el legislador; y este es todo el mundo: y si no, como podran ser havidos por transgresores de la ley d[ic]ha aquellos a quien no fue denunciado? o con que razon podria el indio de la America ser condenado, apareciendo en la otra vida sin baptismo, si este no le fue predicado?

Consta de lo d[ic]ho q[u]e mando Christo â los santos apostoles q[u]e promulgaran la ley de gracia por todo el universo mundo, sin ecepcion de parte alguna, por q[u]e de todas hera redentor, a todas tenia obligacion igual, y esta misma obligacion q[u]e tenia (yendose â el cielo) dexara a los apostoles, como succesores suyos en el oficio; pero no queda bastantem[en]te, probado, q[u]e con efecto corrieren los apostoles el universo mundo, a todas las quatro partes de el, q[u]e es lo mismo; esto pruevo ahora con los argumentos siguientes: porque la doctrina comun de los s[an]tos padres, y doctores sagrados, [16] es, q[u]e la ley ebangelica fue promulgada por todo el universo mundo, por los mismos apostoles, dentro de el espacio de cuarenta años despues de la muerte, y pasion de Christo; asi lo afirman expresam[en]te S[an]to Tomas, San Juan Chriostomo, San Gregorio Papa, Eutimio, Teofilato en los lugares citados â el margen, con gran numero de expocitores modernos; en particular San Eutimio sitado, siente q[u]e dentro de el espacio de veinte, h[as]ta  treinta años predicaron los Apostoles la ley de Christo por todo el mundo: San Marcos quando compuso su ebangelio,[17] decia ya entonces q[u]e estaba dibulgada 

{f. 13}                                                                                                      13

la ley de Christo, por los apostoles, en todas las partes de el mundo: predicaverumt ubique et ta. Siendo asi q[u]e el s[an]to ebangelista escribio su ebangelio doce años solam[en]te despues de la muerte de Christo, segun lo dice Cesar Baromo; S[an] Pablo hablando de su tiempo, dice: q[u]e ya entonces estava predicado el ebangelio a toda criatura q[u]e havita debajo de el cielo: predicatum est ebangelium in omni criatura, q[u]e sub celo est. Y quien negara q[u]e esta n[ues]tra America debajo del cielo? sino aquellos q[u]e la niegan el mismo cielo, como despues veremos.

Siguese despues de todos estos argumentos, q[u]e, q[u]e {sic}: alguno de los sagrados apostoles, paso â esta quarta parte de el mundo q[u]e llamamos America, â promulgar la ley de gracia: consta tambien q[u]e este apostol no fue S[an] Pedro, ni S[an] Pablo, ni alguno de los q[u]e referimos arriva; como se vee en la relacion de sus vidas; y por q[u]e no hay autor q[u]e lo diga; resta, pues, q[u]e este fue el Apostol S[an]to Tome: parece q[u]e asi lo quieren significar S[an] Crisostomo y S[an]to Tomas en su catena in Joannem, cap[ítulo].  11. a donde dicen Homilia 16[18]  Tomas in firmicon erat et infidelium alisi;  postese omnibus fortiur  …et est, et irreprehensibiles, qui solus terrarum orbenm percurri, et und mmedis plebsibus volberatur volentibus est interficere. No hace contra esta doctrina la exposicion de algunos doctores, q[u]e dicen q[u]e los s[an]tos apostoles ni heran obligados a correr, ni con efecto discurrieron por si mismos el universo mundo, q[u]e eso parecia imposible, siendo tan pocos y en tan breve tiempo: q[u]e por esta exposicion se entiende (segun los mismos doctores; bien estudiados) q[u]e corrieron los s[an]tos apostoles el universo mundo quanto a lugares particulares, e individuos (lo q[u]e es verdad) y despues se hizo, y va haciendo por sus succesores; pero q[u]e corrieron todo el mundo,[19] quanto a los lugares principales: ni lo niegan, ni lo pueden negar; pues sabemos q[u]e handubieron los apostoles en las tres partes de el mundo principales asi a Europa, y Africa; y solo de la America procedia nuestra question, cuya parte afirmativa ahora diremos. Ni yo vide autor alguno q[u]e lo

{f. 14}                                                                                                      14

niegue absolutam[en]te solam[en]te no lo afirman, porque no les heran notorias, y presentes los argumentos q[u]e hoy nos son manifiestos: halle (ayer?) solamente el doctisimo Cornelio Alapide, sobre el cap[ítulo]  16 de San Marcos q[u]e dice asi: q[u]e no parece verosimil, q[u]e tan pocos apostoles por si corriesen el mundo todo principalm[en]te porque en la America no se hayan vestigios de la fee; si supiera este doctisimo expositor los vestigios de fee prodigiosos q[u]e habemos referido: que dijera? sin duda alguna, no dudaria, si supiera aquella tradicion tan constante, y averiguada por el Obispo de Chiapa arriba referida, de como los yndios antiguos de aquellas partes, fueron instruidos en los misterios de las S[anti]s[i]ma Trinidad, parte de la Virgen, y pasion de Christo, por unos hombres barbudos bancos, vestidos h[as]ta el tobillo. De los muchos q[u]e el Colon descubridor primero de las tierras de Nueva España, y sus compañeros hallaron en las primeras islas de ella, q[u]e sus moradores reconocian un solo dios infinito, y omnipotente, y q[u]e este dios tuvo madre; q[u]e vienen a ser los dos primeros articulos de fee: q[u]e en ¿Cumaria? tierra no muy distante de la sobredicha entre sus idolos adoraban aquellos naturales una cruz  con gran devocion, ella se bendecian asi, y a sus hijos recien nacidos, para librarse, y librarlos a ellos de males, segun refiere Gormarra, parte 3 cap[ítulo] 83. Si todos estos vestigios de la magnificencia de sus templos, de la diversidad de sus ceremonias, de sus ayunos, y abstinencias rigorosas de carne, y otras semejantes q[u]e dejo ahora por la brevedad, y se pueden ver en parte en el P[adre] Fray Antonio de la Calancha, religioso fidedigno agustino en el libro 2 cap[ítulo]  2 numero 1 de la historia de el Peru, y esto supiera el doctisimo Cornelio Alapide, no dudara de q[u]e habia en la America vestigios de la fee, y de q[u]e paso a estas partes alguno de los apostoles sagrados, y por consigui[en]te q[u]e fue Santo Tome.

De todo lo arriva referido se saca bastantem[en]te la certeza del paso a esta America del Apostol Tome, q[u]e anduvo en ella, y por lugares maritimos q[u]e llevamos apuntados, y son los principales de estas partes, y sobre esta resolucion son dignas de ponderar. Otras dos resoluciones morales, una de parte de la justicia, y misericordia infinita de nuestro gran dios, y señor, permitio dilatar h[as]ta  el descubrim[ien]to de este nuevo mundo(que fue el espacio de 2500 años) la gracia de la ley ebangelica; sino q[u]e luego la comunico a todas sus gentes igualm[en]te con las otras partes de el mundo: la otra de parte de los naturales

{f. 15}                                                                                                      15

de la tierra, que contra estos q[u]e no admitieron aquel santo legado evangelico estaran gritando h[as]ta  el ultimo de el dia del juicio aquellas señales de sus huellas, de su bordon. y de su doctrina les dejo su pertinacia, q[u]e con la vista de ellos no podran alegar ignorancia alguna.

Ademas de los autores arriba referidos, lleva que vino a estas partes el santo apostol el P[adre] Francisco de la compañia de Jesus en su veridario Pobl[ación] 44, y el P[adre] Riva de Neyra de la misma compañia en su flor santorum, en la vida de el mismo Santo Tome, y Andres Lucas en la vida de San Ign[aci]o folio 245 a donde trae una notable profecia de el mismo santo q[u]e prognosticando a los yndios, dijo: q[u]e despues de muchos siglos vendrian a sus tierras unos sacerdotes suyos a predicar el mismo evangelio q[u]e el les predicaba, y traerian por divisas cruces en las manos, y q[u]e estos los congregarian en poblaciones para q[u]e viviesen en orden, y policia christiana, y q[u]e entonces pis is, ygaramomis (q[u]e comprehenden todas las naciones) vivieran en paz: lo qual se cumplio, en la entrada de la compañia de Jesus en aquellas partes, quando vivieron los yndios los sacerdotes de ellas, q[u]e llegaron a aquellas regiones con cruces en las manos en lugar de bordones, y q[u]e eran los primeros q[u]e despues de el santo apostol, predicandoles a Christo lo vivian en varias poblaciones. Profecia q[u]e siendo hallada en la misma uniformidad hallada entre todos los yndios de aquellas partes de tan varias naciones, lenguas, y territorios, y en distancia de 200 y 400 leguas; y aun mas, sin haber comunicado entre si parecio tener solido fundam[en]to y como tal (despues de hechas bastantes diligencias) la engirieron? los padres de la compañia de Jesus en los anales de aquella provincia.

Los autores de el libro intitulado Imago Seculis, folio 63, a el fin refieren la misma profecia y resuelven q[u]e no se puede dudar de q[u]e andubiera en estas artes el santo apostol,[20] por estas substanciales palabras: Inne moticimis ilis araguaires, proun, eis tantam ubicue inter barbaras memoriam, vestigia q[u]e santo Tome Apostoli munere coey, ut dubitare non posit apostolum istie blinfuiese.[21]  

{f.16}                                                                                                       16

Hace tambien mencion de esta profecia Fr[a]y Joachin Brulio, yà citado, 1. lib[ro]  cap[ítulo] 5 n[umer]o 7 y Fray Juan Torquemada part[e] 3 de su Monarquia Yndiana, Lib[ro] 15 cap[ítulo] 40 y el P[adre] Alonzo de Uballe, de la compañia de Jesus, ya citado, a donde dice tambien q[u]e en muchas partes de el Peru, y Paraguay es comun tradicion haber estado en ellas el Apostol Santo Tome, y q[u]e de ello hay grandes señales; y trahe otros argumentos forzosos: el prim[er]o los suntuosos, y magnificos templos en los dos poderosos imperios de el Peru, y Mex[i]co: mucho antes q[u]e fuese gente española, de los quales hallaron, aun en su entrada, muchos muy ricos, y muy adornados, como largam[en]te consta en los historiadores, lo segundo el conocim[ien]to q[u]e tubiero[n] de el verdadero dios, criador de el mundo, remunerador de los buenos, y castigador de los malos: de Christo de la inmortal vida de el alma redentor; como la tubieron los yndios, yngas, amautas; y de la resurreccion de los cuerpos como la tubieron otros; q[u]e de todo hay autores en el cap[ítulo] citado: y por tercer argum[en]to trahe una hermosa cruz, de que escribe Garcilazo Ynga, q[u]e tenian los reyes yngas en Cuzco en un cerro de sus palacios reales en cierto apartam[en]to llamado Griaca, lugar sagrado (para ellos) y venerado. Lo qual todo hace a nuestro intento, demostrando q[u]e de fuerza habia q[u]e haber persona q[u]e les comunicase las noticias de las cosas d[ic]has, antes q[u]e entrasen en aquellas partes, y regiones los castellanos; y no parece podia ser otro q[u]e el Apostol Santo Tome: con q[u]e havemos demostrado la verdad la tradicion de haver venido a las partes de la America este s[an]to apostol; sobre todo, consta de la iglesia siriaca, en donde en las locuciones de este s[an]to se lee q[u]e estuvo en la America, y predico a aquellos pueblos; y parece no se puede [h]oy negar. Concuerda con el original de quien lo saco en Mex[i]co  a 26 de ceptiembre de 1673 el hermano= Alonzo Dias.

Jesus.

Rastros y señales de la primera predicacion en el mundo nuevo

{f.17}                                                                                                       17

Tras luengos años verna

un siglo nuevo, y dichoso,

q[u]e al oceano anchuroso

sus limites pasara.

Descubriran grandes tierras

veran otro nuevo mundo,

navegando el gran profundo

que ahora el paso nos sierra.

La tule tan afamada,

como de el mundo postrera,

q[u]e adora en esta carrera

sera mas aprovechada.

Que nada sea nuevo fundo

en decirlo Salomon;

Mas sin embargo, Colon,

dio al viejo otro nuevo mundo,

Lib[ro]1 cap[ítulo] 6 fol[io] 22 col[umna] 2 politica.

Solorzano. Politica Indiana lib[ro] 7, cap[ítulo] 5, folio 25 col[umna] 1 dice q[u]e Tule es Yrlanda. {Al margen: Batuecas}

Para apoyo de lo q[u]e tengo q[u]e escribir acerca de los rastros q[u]e en la America se hallaron de la primera predicacion de la ley de gracia, antes q[u]e a ella llegaran los castellanos: no sera fuera de camino lo q[u]e sucedio en el viejo mundo a unos christianos, a el cavo de ochocientos años, cuya historia la trahe tambien Solorzano, a mi intento, Politica yndiana, lib[ro] 7, cap[ítulo] 5, fol[io] 78 col[umna] 2, de esta manera: y en menos distancia de tiempo lo experimentamos en los q[u]e procedieron de aquello antiguos españoles q[u]e huyendo la invasion de los moros, se escondieron en valle q[u]e llaman de las Batuecas q[u]e esta sercado de altas sierras y montes de la Peña de Francia, donde estubieron escondidos serca de 800s años, en continuas generaciones, saber los ultimos, como vinieron alli los primeros, ni q[u]e hubiere mas mundo, ni tener sino una vislumbres pequeñas de christianos, h[as]ta  q[u]e acaso fueron en n[ues]tros siglos y trahidos

{f. 18}                                                                                                      18

a mejor vida por el Duque de Alba, andando por aquellos montes a caza, como lo refiere el insigne y nunca dignamente laureado, y premiado poeta Lope de Vega Carpio, unico fenix de España, admiracion, y portento de el orbe, por las muchas comedias, y otras obras q[u]e compuso, en una q[u]e hizo de este descubrim[ien]to aplicandole a el intento de q[u]e tratamos, el no menos digno de alabanza, docto P[adre] M[aes]tro Fray Bacilio Ponze de Leon 1 parti. par. disp. questi. desatar abreviaturas 6 y Fray Gregorio Garcia Dominico. Libro 7 cap[ítulo] 4 fol[io] 20 en el Tratado sobre la predicacion de el Nuevo Mundo: Herrera en la Historia general de las yndias occidente decada uno, lib[ro] 7 fol[io] 4 col[umna]1, cap[ítulo] 2, dice: por muchas maneras daba dios causas a D[o]n Christobal Colon, para emprender tan gran azaña, y demas de las razones q[u]e se han referido, q[u]e le movieron: tuvo experiencias muy probables, por q[u]e hablando con hombres q[u]e navegaron los mares de oc[c]idente, especialm[en]te a las islas de los Azores, le afirmo Martin Vicente,[22] q[u]e hallandose una vez 450 leguas a el poniente de el cabo de San Vicente, tomo un pedazo de madero, labrado por artificio, y a lo que se juzgaba, no con hierro, de lo qual, y por haver ventado muchos dias ponientes imaginaban q[u]e aquel palo venia de alguna isla.  Pedro Correa,[23] casado con una hermana de la muger de Colon, le certificò, q[u]e en la isla de Puerto Santo havia visto otro madero, venido con los mismos vientos, {al margen un asterisco} y labrado de la misma forma, y q[u]e tambien vio cañas muy gruesas, q[u]e en cada canuto podian caver 3 azumbres, {dentro de asterisco poner: nota: de aquellas hay en la costa de Veracruz, en la costa de Onduras, Brazil, en la de Acapulco, y en todas las Filipinas} y D[o]n Cristobal Colon dixo haber afirmado esto al Rey de Portugal, hablando en èstas materias, y q[u]e tenia estas cañas, y q[u]e se las mando mostrar, las quales juzgo haver sido trahidas con impetu de el viento de la mar, pues en toda la Europa no se sabia q[u]e las huviese semejantes; y ayudaba a esto q[u]e Tolomeo en el lib[ro] 1 de su Cosmografia, dice q[u]e {al margen: noticias, y señales que se vieron de el nuevo mundo en el viejo antes de su descubrim[ien]to por Colon} se hallava en la Yndia aquellas cañas; asimismo la sertificaron vezinos de los de las Azores, q[u]e ventando ponientes recios ¿rueslse? traya la mar algunos pinos y los hechava en la costa de la Graciosa, y de el Fayal, no

{f. 19}                                                                                                      19

los haviendo en ninguna parte de aquellas yslas: en la isla de Flores, echo la mar dos cuerpos de hombres muertos,[24] q[u]e mostravan tener las caras muy anchas, y de otro gesto q[u]e tiene el de los christianos: otra ocacion se vieron dos canoas, o almadias con casa movedisa, q[u]e pasando de una ysla a otra les debio de arrebatar la fuerza de el viento: Antonio Leme[25] casado en la ysla de la Madera, sertifico, q[u]e habiendo corrido con su carabela buen trecho, a el poniente le havia paresido de veer tres yslas serca de donde andava; y en las de la Gomera de el Hierro y de los Azores, muchos afirmavan q[u]e debian cada año algunas yslas hacia la parte de el poniente. Un vecino de la ysla de la Madera,[26] el año de 1484 pidio a el Rey de Portugal licencia, para ir a descubrir cierta tierra q[u]e juraba q[u]e via cada año, y siempre de una manera, concordando con los de las yslas de las Azores,[27] y de aqui sucedio q[u]e en las cartas de marear antiguas se presentaban algunas yslas por aquellos mares, especialmente la q[u]e decian astrilla, y la ponian poco mas de 200 leguas a el poniente de Canarias, y de los Azores, la qual estimaban los portugueses q[u]e hera la ysla de las Siete Ciudades: fue poblada de ellos,[28] quando perdio España, reynando Don Rodrigo, por q[u]e huyendo de aquella prosecucion, se embarcaron siete obispos, y mucha gente, y aportaron en aquellas islas, a donde cada uno fundo su pueblo, y por q[u]e la gente no se bolviese, quemaron los navios; y q[u]e en tiempo de el infante Don Enrique de Portugal, con tormenta corrio un navio q[u]e havia salido de Portugal, y no paro h[as]ta dar en ella,[29] y los de la yslacion, la gente de el navio, a la iglesia, por ver si heran christianos, y hacian las ceremonias romanas fueron, y visto q[u]e lo heran, les rogaron q[u]e estubiesen alli h[as]ta q[u]e viniere su s[eñ]or; para q[u]e los marineros, temiendo q[u]e no les quemacen el navio, y los destruyesen se bvolvieron a Portugal muy alegres, confiando resebir mercedes del ynfante; el qual los maltrato, por haverse venido sin razon, y los mando bolver (pero q[u]e el maestre, los marineros no lograron hacer) salidos de el reyno, nunca mas bolvieron: dicen mas, que los grumetes, de el nabio portugueses, cogieron cierta tierra, o arena, para su fogon, y hallaron que mucha parte de ella hera oro; y algunos salieron de Portugal a buscar esta providencia, o provincia (digo), entre los quales fue uno Diego Fierre cuyo piloto,[30] d[ic]ho Diego Velazquez, vezino de Palos, afirmo a Colon en

{f. 20}                                                                                                      20

el monasterio de Santa Maria de la Rabida q[u]e perdieron de la ysla de el Fayal, y q[u]e anduviero{n} 150 leguas por el sudueste, y q[u]e a la buelta descubrieron la ysla de Flores, guardandose por muchas aves q[u]e veian bolar asi alla, las quales conocieron q[u]e no heran marinas: despues dixo q[u]e fueron por el norueste tanto camino q[u]e se les quedava al cabo de el Ara, q[u]e es en Yrlanda, asi a el leste, a donde hallaron q[u]e ventavan muy recios los ponientes, y la mar era muy llana, lo qual creian q[u]e procedia de tierra q[u]e debia de haber por alli, q[u]e los abrigava de la parte de occidente, y q[u]e no prosiguieron en descubrirlas, por q[u]e siendo ya por agosto temieron el invierno; esto fue 40 años antes q[u]e Colon descubriese las Yndias: en el puerto de S[an]ta Maria dixo otro marinero q[u]e navegando a Yrlanda vio aquella tierra, q[u]e los otros imaginavan, q[u]e era Tartaria,[31] q[u]e dava buelta por occidente, la qual despues aparecio ser los Bocallaos, y q[u]e no pudieron llegar a ella, por terribles vientos. Pedro de Velazco,[32] gallego, dixo q[u]e navegando a Yrlanda, se metio tanto al norte, q[u]e vio tierra hasia el poniente de aquella ysla. Vicente Dias, piloto portuguez, vecino de Tavira, viniendo de Guinea, en el pasaje de la ysla de la Madera, dixo q[u]e le parecio ver una ysla, la q[u]e mostrada ser verdadera tierra, y q[u]e descubrio el secreto a un mercader genoves su amigo, a quien persuadio q[u]e armase para el descubrim[ien]to y q[u]e habida la licencia de el rey de Portugal, le embio recado a Fran[cis]co Coxana, hermano de el mercader, para q[u]e armase una nao en Sevilla, y la entregase a Vicente Dias; pero burlandose de el negocio, no quiso, y bolviendo el piloto a la tierra, armò un navio, con Lucas de Cazana, y salio mas de dos o tres veces mas ciento y tantas leguas, y jamas hallo nada; a esto se añadia la diligencia de Gaspar, y Miguel de Cortes real, hijos de el capitan q[u]e descubrio la tercera, q[u]e se perdieron en demanda de esta tierra: h[as]ta  aqui nuestro referido ya autor.[33]

{f. 21}                                                                                                      21

Herr[era] dec[ada] 1 lib[ro] 1 cap[ítulo] 5 col[umna] 2 fox[a] 33 dice asi (hablando de Colon, quando el año de 1492 andava descubriendo en la costa de Santo Domingo) vio una fusta de doce bancos en tierra debaxo de una enramada, y en unas casas serca hallaron un pan de cera, y una caveza de hombre colgada en una acestilla, en un poste: esto dice nuestro autor; y tambien q[u]e antes havia allado un codaste de un navio; q[u]e seria de aquellos q[u]e salieron a descubrir, y no parecieron: tambien escribe, q[u]e allò Colon en poder de los yndios alli azagayas, armas de hierro husadas en Guinea: y preguntando a los yndios, quien las havia llevado alli?[34] dixeron q[u]e gente senegra; y señalaron a el sueste, q[u]e es asia Guinea,[35] donde tambien husaban aquel genero de fusta, y  la cera no podia ser, sino de donde hera la embarcacion; por q[u]e aunque hay mucha en Yucatan, pero los yndios no husavan de ella, y parece q[u]e los yndios la havian muerto poco havia, pues duraba la cera y la fusta; y aunq[u]e no sea de el caso, para q[u]e se vea como por varios acontesim[ien]tos y casos, las gentes de unas partes han pasado a otras; pero no sabemos quien havia trahido unos negros cafres atezazados, muy paresidos a los jalofos, los quales havitan ysla de negros,[36] por ellos asi llamada q[u]e esta en medio de Philipinas.

Solorzano, Politica yndiana, lib[ro] 1 cap[ítulo] 5 fox[a] 19 col[umna] 1 dice (entre los cuales no quiero pasar en silencio el q[u]e traen Gomara, part[e] 7 Hist[oria] yndia[na] cap[ítulo] 3 y otros; aunq[u]e no sè con quanta certeza) q[u]e huyendo los españoles de la guerra, y servidumbre de los moros en tiempo de el Rey D[o]n Rodrigo, se embarcaron en el oceano, y aportaron a Cozumel, e Yucatan,[37] y viviendo, y muriendo en aquellas provincias, pusieron sobre sus sepulturas, y otras partes muchas cruzes, y se las enseñaron a reverenciar a los yndios, las quales se hallaron por castellanos alli, quando descubrieron èstas provincias, año de 1517, con Diego Herrera de Cordova.

Herr[era] doc[umento] 5 lib[ro] 9 cap[ítulo] 16 fox[a] 314. Este Gonzalo Fernandez de Oviedo escribio este año de 1536 a el rey,[38] q[u]e tenia probado en cinco autores q[u]e la ysla española, y las demas de Barlobento, 1568 a[ñ]os antes de la venida de Cristo de q[u]e fueron poseidas de el rey doceno de España contando desde Tuba: esto dice este autor; y otros escriben, q[u]e tambien fueron señores de las yslas de Cabo Verde, q[u]e estàn en la costa de Africa, y q[u]e se llaman, Esperides, por este rey Hespero doceno de España.[39]

En las historias mexicanas se escribe q[u]e en los primeros q[u]e la havitaron heran gigantes,[40] de q[u]e hay bastantes testimonios, como tambien de q[u]e los hubo en Yucatan, como lo escribe Herr[era] dec[ada] 4 lib[ro] 10

 

{f. 22}                                                                                                   22          

cap[ítulo] 4 fo[x]a 268, col[umna] 7 por estas palabras en Yucatan en Mani en una sepultura de piedra se hallaron huesos de hombre, tan grandes q[u]e de la caveza sacaron una muela q[u]e pesaba poco menos de libra y media; y hay opinion q[u]e antiguam[en]te hubo hombres de grandisima estatura.[41]

8.Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 7 fox[a] 24 col[umna] 2, dice: a esta punta de S[an]ta Elena (q[u]e es en el mar de el sur en la costa de el Peru) cuentan los naturales q[u]e llegaron en los tiempos antiguos en balzas hombres tan grandes, q[u]e los ordinarios no les llegavan a la rodilla, y q[u]e no llevavan mugeres, ni hivan vestidos, sino algunos con pieles de animales, y por q[u]e no hallaron agua hicieron pozos q[u]e hoy dia se veen con muy buena agua, y fresca cavados en peña viva (obra misteriosa) y q[u]e comia cada uno mas q[u]e cincuenta hombres; y por q[u]e la vianda no les faltaba pescanan en el mar con redes, las mugeres de la tierra no los podian sufrir, y los naturales hacian sus juntas, para hecharles, por q[u]e heran aborresibles y husaban mucho el pecado nefando, sin vergüenza de las gentes, ni temor de Dios; y q[u]e los castigo Dios con fuego de el cielo estando todos juntos husando su pecado, sin q[u]e {que}dasen sino algunos huesos q[u]e oy dia se veen de increible grandeza; un castellano afirmo haver allado una muela q[u]e pesaba media libra; y otras señales afirman otros haver visto con sus propios ojos, de donde se infiere q[u]e esta historia no es vana, y q[u]e estos hombres fueron alli de la parte de el estrecho de Magallanes, como oy dia lo afirman los yndios, y refieren.

 

9.Herrera dec[adas] 4 lib[ro] 70 cap[ítulo] 2 fox[a] 258 col[umna] 2 hablando de Yucatan dice muchos yndios de discrepcion decian haver oydo a sus antepasados, q[u]e aquella tierra havian poblado siertas gentes, venidas por la parte de el oriente, a las quales havia Dios librado de otros, abriendoles camino por la mar.[42]

 

10. Herr[era] dec[ada] 4 lib[ro] 3 cap[ítulo] 7 fox[a] 235 col[umna] 2 hablando de la provincia de Coazaqualco, e Ylusa dice: tienen muchos ritos de judios, husan circuncidarce,[43] y tambien en la provincia de Coezatla, y decian q[u]e asi lo tenian por constumbre: h[as]ta  aqui este autor. Viene bien esto con lo q[u]e alli se escribe, q[u]e en Yucatan, q[u]e es serca de aqui, aportaron los hijos de Ysrael: quando pasaron alla de lacandon en espacio de quarenta años; y tambien escribe el muy R[everendo] P[adre] Fr[a]y Juan de Torquemada en la Monarquia Yndiana

{f. 23}                                                                                                      23

en la segunda parte, q[u]e es el calendario q[u]e en la provincia de Mechoacan, q[u]e es en la Nueva España, husaban los yndios de circuncicion.

 

11. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 2 cap[ítulo] 11 fox[a] 79 col[umna] 1 dice: despues de la fundacion de Mex[i]co y de toda la tierra, fueron nuevas gentes asia el norte, y aportaron a Panuco (nota: Panuco no esta en Mex[i]co a el norte, sino al nordeste, en la ensenada de Veracruz, y es puerto de mar) llevaban ropas largas, aviertas por delante, sin capillas, con los coellos escotados, cortas las mangas,[44] q[u]e h[as]ta  estos tiempos los husan por gracejo en sus bailes, remedando a aquella nacion, q[u]e sin contradicion paso h[as]ta Tula,[45] y por estar muy poblada pasaron a Cholula, a donde se arraigaron, y desde ahi poblaron a Oaxaca, a la misteca alta, y baja, y a zap[o]tecas: enseñaron mucha policia en toda la tierra; y por eso, en siendo algun hombre de prudencia, e industria le llaman tolteca).[46] Y a fox[a] 279 col[umna] 7 lib[ro] 7 dec[ada] 2 escribe Herrera, q[u]e el caudillo de estas gentes vestia de negro h[as]ta los pies, por la onestidad, con una manta blanca ensima sembrada de cruzes coloradas; y a nadie q[u]e fue virgen quien instruyo el ayuno, y penitencia: h[as]ta  aqui este autor, Torquemada, Monarchia Yndiana, fox[a] 278, col 7 lib3 cap 7 añade q[u]e heran estas gentes altos de cuerpo, q[u]e ya estava poblada la provincia de Tula, y q[u]e no se sabe donde ayan podido venir: quieren decir algunos, q[u]e fueron romanos, o cartagineses, q[u]e con temporales vinieron a dar a alguna costa de las q[u]e caen debaxo de el norte, y q[u]e como tuvieron en q[u]e volverse, se abenturaron a entrar la tierra dentro: otros quieren decir q[u]e debieron de ser algunos yrlandeses,[47] y en quanto a esto, por no desvariar solo se puede dexarlo a dios; la razon q[u]e dan, por donde se coligen ser yrlandeses, es porque se rayavan las caras como estos, y q[u]e comian carne humana, y por estar tan serca de los Bacallaos, y un estrecho q[u]e hay asi mismo por donde pudieron venir y pasar; y se cuenta en este paso un cuento: y es q[u]e haviendo llegado a Tula estas gentes traian consigo una persona muy principal por caudillo q[u]e los gobernava, a el qual le llamavan Kuetzalcohuatl (que despues los

 

 

{f. 24}                                                                                                      24

cholultecas adoraron por dios) esto se tiene averiguado q[u]e era de buena disposicion, blanco, rubio, barbudo y bien condicionado, de Tula se vino a Cholula,[48] donde havitò muchos años con sus gentes, de las quales embio a poblar a la provincia de Oaxaca, misteca, y zapotecas y èstas gentes dicen q[u]e hicieron aquellos grandes, y sumptuosos edificios de romanos de Mitlan (q[u]e quiere decir ynfierno en lengua mexicana) q[u]e siertam[en]te es edificio muy de veer, por q[u]e se arguye de los q[u]e lo obraron, y edificaron ser hombres de grande entendim[ien]to y para mucho, y muy grandes fuerzas, y asì estas gentes dieron industria de muchas cosas para la vida humana: de Cholula se salio Ketzalcohuatl con gran parte de sus gentes siguiendo a los q[u]e havia embiado a poblar las tierras de Honohualco, q[u]e ahora llaman Yucatan, Tavasco, y Campeche: h[as]ta aqui d[ic]ho autor, el qual a fox[as] 267. col[umna] 2 dice: q[u]e Tula se fundo a los 700 año{s} de la encarnacion de el hijo de dios:[49] y a fox[a] 40 lib[ro] 1 Col[umna] 2 cap[ítulo] 74 dice: q[u]e los tultecas fueron fundados de la tierra despues de los gigantes; estos tultecas ocupavan estas provincias como señores propietarios de ella{s}, tuvieron noticia de la recreacion del mundo q[u]e huvo del dilubio,[50] y otras muchas cosa q[u]e tenian en pintura o chist[ian]a  q[u]e otra vez se havia de acavar el mundo por fuego.[51] Tulteca hombre artifice (por q[u]e los de esta nacion fueron grandes artifices; como se vee en toda la Nueva España, y en las ruinas de el pueblo de S[an] Juan Teotehuacan, en el de Tula, y Cholula) q[u]e taxeron mugeres, mais, y algodon, y q[u]e vinieron desterrados de su patria Huehuetlapan, o Tulapan, q[u]e quiere decir Tula la vieja: tardaron desde q[u]e salieron de su tierra, h[as]ta Tula ciento y quatro años, y q[u]e vinieron de la parte de el poniente y pasaron poblando el a las partes de Huatemala.

 

Hasta aqui este autor, el qual en la segunda parte, q[u]e es kalendario, y fiestas de los mexicanos hace larga mencion de Kezalcohuatl; aquì èste autor, el qual escribe q[u]e quando se fuè a las partes de Campeche, dixo a sus discipulos, q[u]e el embiaria sus gentes despues de Cholula; y q[u]e por eso los mexicanos, quando en el año de 1518 tubieron noticia q[u]e andavan

 

{f. 25}                                                                                                      25

castellanos en la costa creyeron q[u]e heran de Kuetzalcohuatl; no serà parece fuera de el intento, por q[u]e tiene mucha comvinacion con lo q[u]e se ha escripto; y lo tiene Torquemada, cap[ítulo] 47 lib[ro] 4 fox[a] 497, q[u]e dixo Moctesuma Rey de Mex[i]co a Cortes,[52] quando le visitò la primera vez en Mex[i]co  y ès asì: porque mi padre dijo, q[u]e oyo a el suyo, q[u]e n[ues]tros pasados y reyes, de quien yo desiendo no fueron naturales de esta tierra, sino advenidos, los quales viniendo con un gran señor, q[u]e desde a poco se volvio a su naturaleza, y como mas poderosa señorearon esta tierra, q[u]e hera de el otomie, y chichimecas, y a el cavo de muchos años, este señor tornò por ellos; pero no quisieron volver, por haverse casado aquì, tener hijos, y mando: volviose aquel señor muy desconsolado, y descontento de ellos, y les dixo a las partidas, q[u]e embiaria sus hijos, para q[u]e los governace en paz, y en las leyes, y religion de sus padres; y que si esto no aceptaran de su voluntad, por fuerza serian a ello compelidos: por esto hemos siempre creeido q[u]e algun dia vendrian los de aquellas partes a nos sujetar, y mandar; y asi creo yo q[u]e sois vosotros segun de donde venis, y la noticia q[u]e el gran rey q[u]e os embia tiene de nosotros. Por tanto s[eñ]or capitan sed sierto q[u]e os obedeseremos, y si yà no trais algun engaño, partiremos con voz lo q[u]e tuvieremos: h[as]ta  aqui dicho autor.

 

12.- Quiero escribir aquì dos viajes antiguos,[53] y muy dignos de notar, y le trae Solorzano, Politica Yndiana lib[ro] 1 cap[ítulo] 1, fox[a] 3 col[umna] 1 q[u]e Hanon Cartagines estuvo en la india oriental, y estando Cartago dentro de las columnas de Hercules, (esto ès dentro de el estrecho de Gibraltar) necesariam[en]te havia de navegar por el oceano, y pudo acaso tomar tierra en la America; como tambien acaecio el año de 1500 navegando a la Yndia la armada de Pedro Alvares Cabral, apartandoce demasiado de el cabo de Boa Esperanza, dieron vista a la tierra de el Brazil, q[u]e por ser dia de la s[an]ta cruz de mayo llamaron asì prim[e]ro.

13.  Diego de Canto en la decada ceptima de la Historia de la yndia oriental a fox[a] 79 dice asi: escribe Pesidionio, q[u]e en tiempo de el Rey Everguentes de Egipto, partio Eudofo por mar a descubrir la yndia.[54] y que volviendo

{f. 26}                                                                                                      26

de ella cargado de ricas mercaderias fuè derrotado a tomar la costa de Etiopia (q[u]e seria por Melinde) por q[u]e eso sucede originario a los q[u]e salen de Calecia, para el estrecho de el mar roxo, q[u]e hera el viaje q[u]e este hacia, y q[u]e en el tiempo q[u]e allì se detuvo travò amistad con los naturales, y aprendia algo de su lengua: y despues haviendo llegado a Egipto sobre cuentas q[u]e tuvo con aquel rey, en q[u]e el le alcanzava, el se huyo a Africa, desde donde se pasò a Cadiz, alli armò dos embarcaciones, para ir rodeando la costa de Africa, y buscar aquellas gentes de de {sic} la costa de la Etiopia de quien havia quedado aficionado, y con esperanza de grande interes: en el comercio a donde llegò, pasando el cabo de Bôa Esperanza, y q[u]e volviendo de allà, hallò una famosa ysla en el camino despoblada, q[u]e le parecio muy fertil de buenas aguas y frutas, y q[u]e por haverle paresido buena y fresca, despues de haver vuelto a España volvio allà con una gran nao cargada de arados{,} semillas, y algunos compañeros para poblarla, y cultivarla, y q[u]e se perdio en la costa de Etiopia junto al cavo de Bôa Esperanza, y q[u]e de los pedasos de la nao armò una embarcacion en q[u]e se salvò; y q[u]e considerando este viage, tenemos por sierto ser aquella ysla q[u]e hallaron tan grande, y fertil la ysla de S[an] Lorenso, por q[u]e desde Melinde al cavo de Bôa Esperanza no hay otra tan grande ni tan fertil.[55] h[as]ta aqui d[ic]ho autor. Año de ¿3?¿1? 823 de la creacion de el mundo, en la sesta edad, Tolomeo Everguentes reino en Egipto 29 años, esto fuè 144 años antes de Christo; por q[u]e su s[an]to nacim[ien]to fuè año de 3967, y año de 3721 (en tiempo de Felipo Masedon) de la creacion de el mundo, huvo otro rey llamado Tolomeo Everguentes en Egipto q[u]e reynò 26 años. Tambien es notable el viage de la nao Victoria de la armada de Magales,[56] q[u]e saliendo año de 1519 de el puerto de S[an] Lucar, volvio a el cavo de tres años, haviendo dado vuelta a el mundo.

 

14. Asi como tratamos de estos viajes, y de el q[u]e traxeron las gentes, q[u]e de mar en fuera entraron en este nuevo mundo, parece muy propio de de {sic} este lugar, como los yndios pasaron de unas partes a otras en este nuevo mundo, asì por mar, como por tierra; y asi mismo q[u]e entendieron el arte de conosgrafia para caminar.[57]

 

15. Herr[era] dec[ada] 1, lib[ro] 9, cap[ítulo] 4 fox[a] 296 col[umna] 2 hablando de las cosas de la ysla de Cuba, dice asì: a serca de las leyes, y constumbres, pues se hallaron poblados,[58] y con señores y se 

{f. 27}                                                                                                      27

debian de regir al advedrio de el s[eñ]or y vivian en justicia, afirmando, como afirman muchos, q[u]e la gente de la Española Cuba S[an] Juan poblaron, y a Jamaica, q[u]e pasò de la Florida: h[as]ta aquì d[ic]ho autor: el qual escribe q[u]e quando Colon llegò {a} Xamaica hallò allì gente de Yucatan q[u]e con tormenta havian aportado alli,[59] y el mismo autor escribe tambien, q[u]e andando Colon por la costa de Honduras topò con una canoa q[u]e benia de el poniente,[60] q[u]e es asia Nueva España, vestidas mas de treinta personas q[u]e alli hivan a Mex[i]co y llevaban entre las demas mercadurias aquellas espadas de pedernal q[u]e trocavan por cacao, oro, y plumas: escribe Torquemada, q[u]e el año de 1517, llegò Diego Fernandez de Cordova a descubrir por la parte de Yucatan, y llegando a la ysla de Cosumel, dia de la s[an]ta cruz de mayo, llevando por memoria la señal de la s[an]ta cruz de madera, (que llamò al lugar S[an]ta Cruz) y mandò decir misa, quando se huio, y vino a los castellanos una yndia de Jamaica q[u]e tenian para sacrificar,[61] como havian hecho a sus compañeros, los quales con tormenta, q[u]e sin duda por virtud de la s[an]ta cruz cobraria la vida de el alma, como cobrò la de el cuerpo.

 

16. Los dos autores escriben: q[u]e llegando D[o]n Fernando Cortez, quando año de 1519 venia a la conquista de Nueva España, peleando en la costa de la mar con los yndios de Tavasco, despues de haverlos vensido, ellos en señal de paz, y amistad le presentaron veinte yndias entre las quales vino una q[u]e hera natural de Xalisco, en Nueva España adelante de Huadalaxara, q[u]e havrà 300 legua de distancia de una, a otra parte, q[u]e prueva lo mucho q[u]e los yndios traginaban por tierra: esta se llamò Marina,[62] en el baptismo, y los yndios, Malinchi, q[u]e fuè interprete de Cortez en la conquista; no porque ella sabia español; sino por q[u]e sabia la campechana q[u]e hablava Geronimo de Aguilar (a quien Cortez allò, y sacò de Campeche) de modo q[u]e lo que ella oya de la lengua mexicana, lo decia en la campechana a Aguilar, y este en castellano a Cortez; y asì se entendian.

17. Herr[era] dec[adas] 3 lib[ro] 5 cap[ítulo] 11 fox[as] 215 col[umna] 1

{f. 28}                                                                                                      28

hablan de la provincia de Biruen en la mar de el sur, serca de Panamà,[63] escribe lo siguiente: q[u]e de mercaderes, por los interpretes,se tuvo noticia de toda la costa y de todo lo q[u]e despues se descubrio, h[as]ta el Cusco (que era cabezera, ciudad o donde havitaban los yngas) q[u]e es una larguisima distancia; y de aqui dicen tambien, q[u]e tomò el nombre de el Peru, como dijo; que tambien se entendio asi quando llegò a esta tierra el año de 1745 el capitan de Morales, y con èl Francisco Pizarro; y primero q[u]e los dos, Velazco Nuñez de Balboa.

 

18.  Antonio de Herr[era], dec[adas] 3 Lib[ro] 6 cap[ítulo] 12 col[umna] 2 escribe lo siguiente: Fernando Cortez (quando fue desde Mex[i]co, año de 1724 {sic} por tierra a Honduras, contra Cristobal de Olid, q[u]e se le havia rebelado) havia embiado a decir a los señores de Tavasco y Xierlanes, que para la jornada le embiasen algunos hombres practicos de la costa, y de la tierra, dieronle mercaderes, q[u]e entendido el intento de Cortez, le mostraron lienzo texido de algodon pintado el camino h[as]ta vaco, y vito (baco y vito) en Honduras,[64] h[as]ta Nicaragua, poniendo la governacion de Panama con todos los rios, y poblaciones q[u]e havian de pasar, y las bentas donde ellos hacian de sus pararadas, o jornadas quando ivan a sus ferias: agradecioselo Cortez quedando, maravillado de la noticia de tierras q[u]e tenian tan apartadas.

 

19.  Herr[era] dec[adas] 3 Lib[ro] 3 cap[ítulo] 11, fox[a] 163, col[umna] 1 hablando de los yndios de Cumana dice: doravan muchos ydolos, y entre ellos tenian una aspa como la de S[an] Andres en un quadro como signo de escribano quadrado, y atravesado en cruz de esquina a esquina, y muchos religiosos dixeron que era cruz, y que se defendian de noche con ella de las fantasmas, y la ponian a los niños en acavando de nacer.[65]

 

20. El M[aes]tro Gil Gonzalez de Avila en el teatro de las yglesias de las yndias en el de la yglesia de Yucatan en Campeche a fox[as] 203 escribe asi:[66] pocos años antes q[u]e llegasen a la provincia los castellanos un yndio principal, sacerdote de sus ydolos llamado Chilan Cambal, venerado de los suyos por verdadero profeta, les dixo:

{f. 29}                                                                                                      29

q[u]e estuviesen muy siertos, q[u]e dentro de pocos años vendrian de la parte de donde nace el {sic}gente barbada, y blanca, y q[u]e entrarian en la provincia con la ynsignia de la cruz enarbolada en alto;[67] y les mostro su forma, en cuya presencia, dijo: n[ues]tros ydolos no podran nada (conociendo q[u]e su victoria es mayor q[u]e su potencia; y q[u]e esta gente havia de ser señora de la tierra) q[u]e no harian mal a los q[u]e creyesen en la señal de la s[an]ta cruz q[u]e gozarian de paz, y cesaria la adoracion de sus ydolos, y adorarian a un solo dios verdadero; a quien estas gentes adoravan: mando texer una manta de algodon, y les dixo, q[u]e de aquella manera havia de ser el tributo q[u]e havian de pagar; y con autoridad de profeta mando al s[eñ]or de la tierra q[u]e ofreciese aquella manta a los dioses para q[u]e estubiera guardada, y formo de piedra la señale de la cruz, y la colocò en los patios de los templos,[68] y oratorios de sus ydolos, diciendo q[u]e aquel hera el verdadero arbol de el mundo; y por cosa maravillosa lo ivan à ver muchos yndios, y sucedio como el profeta lo propuso a el pueblo, de q[u]e dieron entero credito a ello: y viendo a D[o]n Fran[cis]co Montejo, y a los suyos (que fueron los primeros conquistadores) hacer con tanta humildad reverencia, y adoracion a la s[an]ta cruz, entendieron q[u]e havia llegado la ora q[u]e el profeta les dixo: hallaron allì una manera de los n[ues]tros y no en otra parte de las yndias, [69] a este le dieron nombre de segundo nacim[ien]to y tenian a esta manera de baptismo tanta reverencia, q[u]e todos lo resibian, y afirmaban que recibian en el una pura disposicion para ser buenos, y conseguir la gloria que esperavan, y quien no le resibia, no se casava, y quando lo recibia ayunaban los padres tres dias, y se de el huso de sus mugeres. [70] Tambien vieron q[u]e usavan de confesion, y q[u]e sus sacerdotes les davan penitencias: conocian q[u]e los travajos q[u]e les benian heran originados de las culpas,[71] como tambien en sus enfermedades, y en la hora de su muerte: creian la inmortalidad de el alma, y que despues de esta vida, havia otra mas exelente y alegre q[u]e la gozaba el alma en saliendo de esta vida:[72] decian mas, q[u]e la vida futura se dividia en buena y mala, esta para los malos

{f. 30}                                                                                                      30

y la buena para los buenos donde se vivia sin pena, y en la mala con grandes necesidades. Qual de los apostoles llegase a estas regiones, o discipulo suyo,[73] no es facil de aberiguar: Santo Tome llegò a h[as]ta la Yndia Oriental: S[an] Bartolome, S[an] Simon, y S[an] Judas a otras distantes de aquestos climas; lo sierto es, q[u]e la promulgacion de el s[an]to ebangelio duro 30 años: este secreto se savrà en el ultimo dia de el mundo; o quando dios lo manifestare a algun siervo suyo: h[as]ta aquì èste autor, el qual es de pareser q[u]e algun apostol, o discipulo suyo predicò a estos yndios.

27. Yà gracias à Dios se sabe quien predicò en la America, q[u]e fuè el Apostol S[an]to Tome: si tu, lector, lo quieres veer, lee a fox[as] 111, n[umer]o 18 lib[ro] 2 de las cosas curiosas de el Brazil q[u]e escribio el Padre Vasconzelos,[74] en la cronica de la provincia de Bracil de la compañia de Jesus, y en la conquista espiritual del Paraguay q[u]e escribio el P[adr]e Ant[oni]o Ruiz de Montoya, desde fol[io] 29 a f[olio] 35 y en la Historia latina novisima de la d[ic]ha provincia del P[adre] F[rancis]co, y en la Historia de S[an] Augustin de el Perù, de Fr[a]y Ant[oni]o de la Calancha, alli leeras como anduvo predicando en la America el s[an]to apostol; pero para q[u]e veas como estuvo en Nueva España, lee la aparicion de N[uestr]a S[eñor]a de Guadalupe, impresa en Mex[i]co  año de 1675 a fox[as] 26 verbo didimo, y veras como estuvo en Tula; como bien escribe alli el B[achille]r Bezerra, catedratico de lengua mexicana, q[u]e en las historias de los yndios, leyendo las obras marabillosas, y doctrina q[u]e encerro aquel Ketzalcohualtl el q[u]e traia la capa sembrada de cruzes coloradas, advirtiò, q[u]e hera didimo,[75] esto es coate gemelo; y por si no bastare, lee la Monarquia indiana, ya sitada verbo Ketzalcoatl, (q[u]e es lo q[u]e en Nueva España, corte; aunq[u]e los yndios escriben, coatl, q[u]e es culebra, aludiendo a q[u]e las culebras paren los hijos de dos en dos, q[u]e en España llaman, mellizo, o gemelo, por el huevo q[u]e tiene dos llemas; cambal llaman en Filipinas a dos criaturas q[u]e nacen juntas) lib[ro] 2 col[umna] 2 cap[ítulo] 7 f[oja] 277, parte 2 libro 5 cap[ítulo] 13 parte 1 desde f[oja] 417 a 431 lib[ro] 14 parte 1 lib[ro] 2 cap[ítulo] 90 f[ojas] 255 parte 1 part[e] 2, f[oli]o 40 col[umna] 2.

 

22. El año de 1518 salio con armada de la ysla

{f. 31}                                                                                                      31

de Cuva el Capitan Juan de Grijalba a descubrir a Nueva España el qual pasò adelante de Veracruz, y como tocase de camino: en la Yucatan viendo los compañeros tantas casas de cal y canto, torres, y cruzes, dixeron admirados; q[u]e es esto q[u]e hallamos?[76] Y Grijalva les respondio: una Nueva España; y asi le llamaron de alli adelante; y despues la confirmò el rey: asi lo dice Herr[era] dec[ada] 2 lib[ro] 3 cap[ítulo] 1 fox[a] 75 col[umna] 1.

23.  La primera misa q[u]e se dixo en las Yndias occidentales año de 1492.[77] La dixo Fr[a]y Juan Perez de Marchena, q[u]e fuè con Colon, dicelo Juan Dias de la Calle, Oficial Mayor de el consejo de yndias, en el memorial impreso q[u]e le dio de las noticias sacras, y reales de la yndias occidentales a f[oja] 2 y en la Historia general de la merced de Fran[cis]co Alonso Ramon, tom[o] 2 cap[ítulo] 6, lib[ro] 12 f[oja] 89 col[umna] 2, escribe q[u]e hera portugues de nacion, guardian de el conv[en]to de la Rabida de el orden de S[an] Fran[cis]co q[u]e sabia algo de cosmografia.

 

24. En la armada de Pedro Alvarez Cabral (que tocamos arriba) q[u]e año 1500 pasò a la Yndia de Portugal, y acaso topò en el Bracil hiban 13 religiosos de S[an] Fran[cis]co (de las quales hera comisario Fr[a]y Enrique) todos saltaron en tierra y en la playa dia de la s[an]ta, se dixeron misas,[78] y un muy solemne sermon, por que estubieron alli un mes, de manera q[u]e estas fueron las primeras; y antes nadie la habia d[ic]ho.

 

25. Herr[era] escribe escribe {sic}, q[u]e la primera misa la cantò en la ysla de S[an]to Domingo el lido Bartolomè de las Casas, sevillano,[79] q[u]e despues fuè Obispo de Chapa, y padecio mucho por los yndios, y a el le deben la libertad q[u]e tienen; de mucho q[u]e a èste s[an]to varon contò la primera misa q[u]e alli se dixo.

 

26.  Herrera. dec[ada] 3 lib[ro] 2 cap[ítulo] 15 fox[as] 85, col[umna] 2 dice lo siguiente: y con todo eso confesavan los mexicanos a un supremo dios, señor, y hacedor de todo; y este èra el principal q[u]e adoravan, y veneraban; mirando a el cielo, llamandole criador de cielo, y tierra, admirable; y otros nombres de gran excelencia: h[as]ta  aqui este autor. Teotl llaman a dios;[80] y aquel edificio q[u]e diximos arriba q[u]e hay en San Juan Teotehuacan, quiere decir: casa de todos los dioses: de este lugar, y de este nombre teos q[u]e es como llamavan

{f. 32}                                                                                                      32

a dios los latinos y el deus de los latinos, se saca q[u]e los yndios tubieron verdadero conoci[mien]to de dios; sino q[u]e aquella fee, aquella doctrina de el cielo q[u]e les fue enseñada, con el tiempo, como la cfaltaron los verdaderos m[aes]tros q[u]e se la predicaron, no vinieron otros de aquella parte donde vinieron los primeros. Los discipulos de aquella la fueron mudando, y corrompiendo con el tiempo; y quedò en tales sombras, y figuras, q[u]e quando llegaron los castellanos, no alcansaron, ni entendieron tales principios: por q[u]e en aquellos principios, no se tratava mas q[u]e de buscar plata; y despues de muchos años, quando algun curioso preguntava algo de religion, como ya heran muertos los sacerdotes, no havia quien diese clara noticia; y si algo decian, como muchas cosas heran metaforicas, y alegorias; ni se explicavan; ni heran entendidos.

Herr[era] dec[ada] 5 lib[ro] 4 cap[ítulo] 4 fox[as] 114 col[umna] 1 dice (hablando de el Perù) comunm[en]te confesaron a un supremo señor, y hacedor de todo, q[u]e hera el Viracocha, y le llamaban criador de cielo, y tierra, admirable, y otros semejantes nombres, y le veneravan mirando a el cielo:[81] dice este autor:  Aqui estava el ydolo de el sol finisimo, y grandes ollas en el qual heria el sol en saliendo, e hiriendo en el revolvian los rayos, como si fuera otro sol: a èste adoraban en segundo lugar, y alli tenian la hermosi[si]ma plancha de el sol de òro, q[u]e en los despojos cayo en suerte, aun siendo castellano, y en una noche la perdio a el juego; y despues de el sol veneravan, y adoraban a el trueno fingido q[u]e hera hombre q[u]e estava en el cielo; añade luego a estos tres viracochas, sol, y trueno, adoraban en diversas formas de todos los demas: h[as]ta aqui el autor. Nota: hemos visto como adoraban en el Perù a Tanga; a quien llamaba Herrera; ydolo, que significava uno en tres, y tres en uno, q[u]e  es lo mismo de la S[antisi]ma Trinidad:[82] tambien hemos visto como adoraban en las tres estatuas de el sol, padre, hijo, y hermano: ahora acavamos de ver como explicavan a la S[antisi]ma Trinidad en diversos significados, y vemos como aquí le llama Viracocha a el padre, sol a el hijo, y trueno a el espiritu santo; q[u]e es en la forma q[u]e vino sobre los discipulos. Alli el autor en la col[umna] 2 escribe q[u]e el ynga Viracocha, que fuè el q[u]e puso en primer lugar al ficci Viracocha, a quien atribuian el poder, y mando de todo: en un concilio de sus orejones {sic} dixo: q[u]e el sol no podia ser dios, por que

{f. 33}                                                                                                      33

dios hera señor q[u]e obrava con señorio, y quietud; y q[u]e cosa tan inquieta no podia ser dios: h[as]ta  aqui el autor. Y a èste lugar se prueva, q[u]e no adoraban a el sol; y aunque lo tenian en los templos, ya se ha visto q[u]e este …reto no hera para adorarle como a sol material; sino como a sol de justicia, no como a cosa criada como lo es el cielo; sino metaforicam[en]te como a el sol divino, y luz inmensa.[83]

 

27. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 3 fox[a] 119 col[umna] 1 hablando de los yndios de Mechoacan,[84] en la Nueva España, dice lo siguiente en quanto a la religion heran muy conformes con los mexicanos, y crueles en derramar sangre humana en sus sacrificios; y el mismo dominio tenia el demonio sobre ellos: su principal dios era Tucapacha, teniendolo por hacedor de todas las cosas, q[u]e dava la vida y la muerte: llamabanle en sus tributaciones mirando a el cielo, entendiendo q[u]e alli estava: en fin, confesavan un dia; y el juicio final, cielo e ynfierno,[85] y el fin de el mundo: q[u]e hizo dios un hombre, y una muger de barro, q[u]e por irse… a bañar se des[h]isieron en el agua, y los volvio a a {sic} formar de ceniza, y de ciertos metales; y q[u]e volviendo a bañarce des[c]endio el mundo de ellos; q[u]e huvo dilubio, y un yndio llamado Tespi, que hera sacerdote se metio con su muger, e hijos en un madero como arca,  y q[u]e todos escaparon, y q[u]e en menguando el agua, embio el ave, q[u]e llaman aura, y se quedò comiendo de los cuerpos muertos, y embio otros pajaros, y q[u]e el pajaro pequeño, de ellos muy estimado, por la pluma de diversos colores volvio con un ramo: tenian sacerdote q[u]e predicava en los templos,[86] con terrible espanto, y q[u]e movian los oyentes con gran temor, y con esto los inducian a hacer lo q[u]e les predicavan; aunq[u]e contra su voluntad: los sacerdotes traian los cavellos largos, y coronas abiertas en la caveza, como los de la yglesia catolica, y guirnaldas de flores coronadas.

 

28. Pues Hemos visto como sin ofrenda (digo) sin sombras, ni rodeos adoravan a dios verdadero, veamo{s} ahora el rastro q[u]e ha quedado de las vestiduras sagradas.[87] Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 13 f[oja] 125, hablando de la mistica metian (dice) los muchachos de 7 años en religion, y alli les enseñavan buenas constumbres, subian de grado en grado en las dignidades: heran los oficios por quatro años; y el rey hacia los nombramientos y proveya los cargos.

 

29. El vestido monacal hera una manta blanca basta, y los

{f. 34}                                                                                                      34

…panetos de papel de la tierra: el vestido pontifical para selebrar fiestas,[88] heran mantas de diversos colores, pintadas de historias de los dioses: poniance unas como camisetas sin mangas, q[u]e llegavan a la rodilla: en las piernas unas como antiparras: en el brazo i[z]quierdo un pedazo de manta con borla como manipulo,[89] y ensima capa como las nuestras con borla colgada a las espaldas, una gran mitra en la cavesa de plumas verdes de lusido artificio, pintados lo{s} principales dioses en ellas: quando bailaban los sacerdotes en los patios de los monasterios vestian ropa blanca pintada, y ropetas como camisetas de galeotes: no comian sino yervas y legumbres;[90] sino quando havia alguna ofrenda, ciertas mugeres continentes les guisavan la comida.[91] y se mudavan de quatro en quatro años: ayunaban las vigilias de las fiestas,[92] comiendo solo pan, agua y miel de maguey: heran muy pobres,[93] y no tenian cosa propia, y su oracion era pedir salud para los reyes, y la republica.

 

30.   Herr[era] dec[ada] 4 lib[ro] 8 cap[ítulo] 10 f[oja] 209 col[umna] 1 hablando de los chontales en Guatemala,[94] dice: tres leguas de esta laguna està en lugar de Manila q[u]e hera de gran devocion para los yndios, pipiles q[u]e alli iban a sus ofrendas, y sacrificios: tenian ademas de el s[eñ]or un gran sacerdote q[u]e vestia una ropa larga azul, con una diadema en la caveza, y a vezes mitra labrada de colores, y en los cavos de ella un manojo de plumas de colores, llevaba un baculo como obispo; todos le obedecian en lo espiritual: tenia el segundo lugar, q[u]e hera gran doctor con sus libros, y hechicerias; y declarava sus ahueros. Tenian otros quatro sacerdotes, que vestian diversos colores, y estos heran de el consejo de las cosas de sus ritos: havia un sachristan q[u]e guardava las cosas de la yglesia, y el q[u]e sacava los corazones sacrificados a los hombres sacrificados; y hacia las ceremonias; y habian otros q[u]e tenian trompetas, y los ynstrumentos para llamar la gente: tenian dos ydolos, uno en figura de hombre, y el otro de muger, y a estos heran todos los sacrificios: tenian calendarios,[95] y predicaban a el pueblo: confesabance las mugeres quando estavan de parto: ponian los sacerdotes nombres a los niños: no casavan dentro de el quarto grado; y vivian estos yndios en buenas costumbres.

 

31. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 2 cap[ítulo] 18, f[oja] 26, col[umna] 1 dice: en Yucatan, y Honduras,[96] habia unos libros de hojas encuadernados en q[u]e tenian los yndios

{f. 35}                                                                                                      35

la distribucion de sus tiempos, y conocim[ien]to de las plantas, animales y otras cosas naturales.

 

32. El padre Vasconzelos, en al citada historia, prueva haver estado el Apostol S[an]to Tome, con la tradicion q[u]e se conservo entre los yndios por tanto tiempo,[97] y por haver dexado el s[an]to estampadas las plantas de sus pies en en {sic} las piedras en varias partes de aquella region; en la Nueva España se hallan varios testimonios semejantes, como lo refiere Torquemada en la segunda parte, q[u]e es el kalendario, y fiestas q[u]e tenian los mexicanos en la vida de Ketzalcohoatl, aquel hombre virgen q[u]e traia la capa sembrada de cruzes coloradas: de este, pues, q[u]e caminando de Tula, para Cholula, llamò Huehuetoca a un pueblo q[u]e [h]oy conserva este nombre,[98] junto a el desague, y q[u]e adelante, viniendo hacia Mex[i]co  (aunque entonces aun no estava fundado) en otro pueblo muy grande, tiro unas piedras muy grandes a unos arboles, las quales quedaron alli clavadas, y a el lugar llamaron Quautitlan;[99] q[u]e dura h[as]ta [h]oy: y caminando serca de el pueblo de Talnepantla, antes como un quarto de legua en un portezuelo desviado de el camino estampò una mano en una piedra q[u]e todos la veen, y en memoria de este caso se fundò alli un pueblesillo q[u]e se llama, Tlemaco,[100] q[u]e en mexicano quiere decir, la piedra de la mano; no dice Torquemada, por q[u]e hizo aquello Ketzalcohoatl, yo dirè lo q[u]e se me ofrece. Se escribe q[u]e en Campeche, a donde el estuvo husavan los hombres espejos.[101] Yo digo q[u]e esto enseñaria el s[an]to a los sacerdotes, como lo husamos oy en las sachristias. En la Nueva España los husavan de piedra bruñida, a q[u]e llamaban tetzcal; supongo como se dice, q[u]e el, y los suyos heran ingeniosos; q[u]e el santo haviendo acavado alguno en aquel lugar lo daria a alguno, para q[u]e lo probace, y se mirace en el, y haciendo lo daria el s[an]to por q[u]e quizà hera viejo Huehuetoca,[102] q[u]e dice en mexicano, viejo estas; y como aquellas gentes selebravan las maravillas q[u]e obrava, y oyan su doctrina, en memoria de el beneficio de el espejo, darian este nombre a aquel lugar: lo cierto es, q[u]e el s[an]to venia huyendo de la persecucion q[u]e contra el levantaron los tulas, por contrarios a lo q[u]e el predicava, q[u]e por la cuenta serian, o gentiles, o judios; y estas maravillas de el espejo, piedras, y señal en la piedra, sin duda las pondria, para prueba, y testimonio de su doctrina. Se escribe en la aparicion de N[uestr]a S[eñor]a de Guadalupe en Mex[i]co

{f. 36}                                                                                                      36

q[u]e en aquel mismo lugar, en q[u]e año de 1531 se aparecio la s[antisi]ma ymagen: havia antiguam[en]te un templo a una diosa llamada en lengua mexicana, madre de dios,[103] el qual parece muy verosimil, q[u]e levantaria èste s[an]to varon, quando de Tlemaco proseguia su camino h[as]ta Cholula, a donde escribe, q[u]e estuvo muy espacio, y q[u]e alli le tubieron por s[an]to, y levantaron despues un templo muy diferente en hechura q[u]e los de los dioses, por q[u]e este hera redondo, el qual estava en un alto monte fabricado a mano de adoves; q[u]e aun oy se veen las ruinas levantadas.

 

33. Fr[a]y Juachin Brulio, en la historia de el Perù, de su religion de s[an] Agustin, lib[ro] 7 cap[ítulo] 5 refiere q[u]e en la mar de el sur,[104] en un pueblo llamado Guatulco,[105] tenian los yndios sus naturales, no solo por tradicion antiquisima de sus antepasados; sino aun por escrito en ciertas pinturas, de q[u]e husavan en lugar de letras, q[u]e una cruz q[u]e alli adoravan, con suma veneracion les havia sido dada por S[an]to Tome, cuya ymagen, y propio nombre tenian esculpido en peña viva, en una roca, para memoria de cosa tan s[an]ta. Lo mismo refiere el P[adre] Fr[a]y Gregorio Garcia, lib[ro] 5 cap[ítulo] 5 en donde añade q[u]e esta cruz es la misma q[u]e pretendio quemar aquel insigne hereje Fran[cis]co Adraque, quando pasò el Estrecho de Magallanes,[106] pero sin efecto y con exemplo de un portentoso, y maravilloso caso, digo, milagro; por q[u]e la cruz, hechada en las llamas no se quemò, antes por tres vezes frustrò la perfida intencion de el hereje, q[u]e otras tantas intento consumirla a fuego, cubriendola con pez, y alquitran; y finalm[en]te esta milagrosa cruz trasladò, pasados años a la ciudad de Oajaca un prelado zeloso, llamado D[o]n Juan de Servantes; y allì es venerada con gran multitud de milagros.

 

34. Fr[a]y Bartolome de las Casas, varon fidedigno, Obispo de Chapa,[107] despues de hechar gran informacion de el caso, afirma en una apologia suya, q[u]e consta por antiquisima tradicion de los yndios de aquellas partes, q[u]e en tiempos antiguos fueron arruinados, digo, anunciados de sus ahuelos los misterios de la S[antisi]ma Trinidad, parto de la Virgen, y de la pasion de Christo por unos hombres blancos,

{f. 37}                                                                                                      37

barbudos, vestidos h[as]ta los artejos: esto lo refiere el Padre Vasconzelos en la coronica sitada; y añade, q[u]e tenian los reyes yngas en el Cusco en uno de sus palacios reales, en sierto aposento, llamado Guaca, lugar sagrado para ellos, y venerado.[108]

 

35. En muchos testimonios, y lugares se ha aprobado, como a los yndios les fuè predicada, y anunciada la ley de gracia: ahora veremos como antes q[u]e los castellanos la anunciasen en estos ultimos siglos quando entraron en la America, la predicò un yndio en la ysla de Cuba a 7 de julio de 1499 a Colon,[109] y a sus compañeros: dicelo Herr[era] dec[ada] 1 lib[ro] 2 f[oja] 71 col[umna] 1 por estas palabras, despues de haver asistido a la misa, q[u]e Colon mandò decir en tierra: tù has venido (dice) a estas tierras q[u]e nunca antes viste, con gran poder, y has puesto gran temor: sabe q[u]e segan lo q[u]e acà sentimos, hay dos lugares en la otra vida a donde van las animas, uno malo, y lleno de tinieblas guardado para los q[u]e hacen mal: otro es alegre, y bueno a donde se han de apasentar los q[u]e aman la paz de las gentes; y por tanto, si tù sientes q[u]e has de morir, y q[u]e a cada uno (segun lo q[u]e aca hiciere) allà le ha de corresponder el premio: no haras mal a quien no te lo hiciere: lo q[u]e aqui haveis hecho es bueno; por q[u]e me parece q[u]e es manera de dar gracias a Dios. Dixo q[u]e havia estado en la España, en Jamaica, y la ysla abajo de Cuba, y q[u]e el s[eñ]or de aquella parte handava vestido como sacerdote: allì dixo a Colon un marinero, q[u]e la tierra adentro, entre mucho{s} yndios, vio uno vestido de blanco h[as]ta los artejos.

 

36. Herr[era] dec[ada] 1 cap[ì]tulo 4, 237 col[umna] 1 dice: tenian estos yndios de Cuba conocim[ien]to q[u]e havia sido el cielo, y las otras cosas criadas por tres personas, q[u]e la una vino por tal parte, y las otras de otras: tubieron gran noticia de el dilubio,[110]  y q[u]e se havia perdido el mundo por mucha agua: decian los viejos de mas de 70 años, q[u]e un viejo sabiendo q[u]e havia de venir el dilubio, hizo una gran nao, y se metio en ella con su casa, y muchos animales, y q[u]e embio un cuervo, y no bolvio, por comer de los cuerpos muertos; y despues embio una paloma, la qual

{f. 38}                                                                                                      38

trajo una rama como olibo pero no era obo: el qual salio de de {sic} el navio, e hizo vino de parras monteses, y se embriago, y teniendo hijos, el uno se rio, y dixo a el otro; echemos con el; pero q[u]e el otro le riño, y cubria al padre: el qual despues de dormido el vino, y sabiendo la desberguenza de el hijo, lo maldijo, y q[u]e al otro bendicion, y q[u]e de aquel havian procedido los yndios de estas tierras; y q[u]e por esto no tenian sayos, ni capas; pero q[u]e los castellanos procedian de el otro, por lo qual andavan vestidos.

 

37. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 2 cap[ítulo] 16, 89 col[umna] 1. hablando de Mex[i]co  dice: el monasterio de los hombres q[u]e estava frontero de el de las doncellas, havia en el mancebos de 18 años a 20 a los quales llamavan religiosos,[111] traian en las cavesas coronas como frayles, poco cabello, aunq[u]e cresido h[as]ta media oreja, mas largo por el colodrilo h[as]ta las espaldas,[112]  a manera de trenza donde le atavan, vivian en pobreza, castidad, y obediencia, servian a los sacerdotes en las casas de el culto,[113] barrian los lugares sagrados, traian leña par el bracero, que como lampara de continuo ardia delante de el altar, junto a el ydolo: todos tenian superior: vivian con tanta honestidad que quando salian a donde havia mugeres,[114]  llevavan los ojos al suelo: pedian limosna de 4 en 4 vivian en pobreza, sin tener mas q[u]e la limosna: hacian penitencia sacandose sangre de los mollexos.[115] A § 166 col[umna] 1 dec[ada] 2 lib[ro] 7 escribe, q[u]e en Sempuala havia religiosos, q[u]e vestian a manera de frayles dominicos.[116]

38. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 2 cap[itulo] 16 § 90, col[umna] 2 escribe asi: el nombre de su dignidad (habla de el supremo sacerdote) hera papa, o topilzin,[117] su ropa hera una cortina colorada como dalmatica, con floraduras, por vorla una corona de plumas verdes, y amarillas y sarcillos de oro en las orejas, con piedras verdes, y devajo de el labio, junto al medio de la barba una piedra asul: verase lo mismo. Dec[ada] 2 lib[ro] 7 § 116 col[umna] 1 como en Sempoala tenia tambien este nombre papa en su lengua.

39. Escribe Torquemada (e yo lo saque a la letra en aquel manuscripto q[u]e dejò el B[achille]r Siguenza) en la segunda parte de la Monarquia Yndiana[118], q[u]e dos modos tenian

{f. 39}                                                                                                      39

de sacrificar hombres los mexicanos, los mas heran hombres cautivos, de estos sacrificavan muchos en sus festividades, o en otras necesidades otros, y heran muy pocos, a estos en especial los sacrificavan a los dioses del cielo; y q[u]e a estos q[u]e haviance de de {sic} sacrificar, vestian los atavios de aquel a quien lo sacrificavan; y decian q[u]e èste asi tenia la figura, y significava a el q[u]e estava en el cielo; e hiban muy alegres, y contentos por las calles y plazas bailando h[as]ta el lugar de el sacrificio: esto asentado, dice q[u]e selebravan en Mex[i]co una fiesta q[u]e le llamavan de el gran dios, en la qual sacrificavan a un hombre en una gran cruz de palo, a el qual matavan flechado; y a el segundo dia en otra cruz mas baxa matavan a el otro, no flechado, sino quebradas las piernas con un palo. Aqui claram[en]te se vee como representa este paso el misterio de el calvario en la muerte de Christo, y de el buen ladron, q[u]e son los q[u]e estan en el cielo; por q[u]e se dice q[u]e el sacrificado significava a aquel a quien hera crucificado, pues muriendo estos como Christo, y el buen ladron, derecham[en]te se vee como selebravan los misterios de la pasion; y aqui no parese el mal ladron, por q[u]e este no està en el cielo, no hacia aqui papel; pues ellos no selebravan a los condenados; como no tenian cavallos no moria con lanza el q[u]e significava a Jesuchristo.

 

40.  Dec[ada] 3 lib[ro] 2 p[árrafo]  92 cap[ítulo] 17, col[umna] 1 dice: q[u]e en Mex[i]co  formaban un ydolo de figura de hombre, formado de masa de bledos, y otras semillas, al qual sacavan en procesion h[as]ta Chapultepeque, Tacubaya, y Cuyoacan, h[as]ta volver a Mex[i]co salian (dice) todas las dignidades de el templo, por su antiguedad, con mucho consierto, vestidos segun el oficio de cada uno; con guirnaldas, y sartales de flores, y tras ellos hivan los dioses y diosas q[u]e adoraban con varias figuras, bestidos de la misma librea, ponian alrededor los trozos de maza, y hacian sobre ellos ciertas seremonias de canto y baile, con lo qual quedavan benditos por carne de aquel dios: acabada la fiesta, los sacerdotes tomavan el ydolo, y los trosos como pan bendito, a manera de comunión lo

{f. 40}                                                                                                      40

repartian, y davan a el pueblo chicos, y grandes, hombres, y mugeres q[u]e lo resibian con gran reverencia, temor, y lagrimas, diciendo, comian la carne de dios, y llebavan de ello a los enfermos, y tenian por gran pecado comer, o beber agua, u otra cosa, h[as]ta  pasado medio dia, y escondian el agua a los niños, y havisavan a todos, q[u]e se guardacen de la yra de dios: acavado esto, un viejo de mucha autoridad se subia en alto, y predicava su ley, y seremonias; a esta fiesta llamavan y paina vitzili puztli.[119]

 

41. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 4 cap[ítulo] 15 p[árrafo] 17 col[umna] 1 dice: quando sucedia el rey en el reyno, llebanle a el templo,[120] hiva mucha gente acompañandole con gran silencio, y lo subian de lo{s} brasos, /..../ gradas dos principales, y el ministro mayor le dava, y ponia las ynsignias reales y le saludava con palabras breves, y le cubria con dos mantas de algodon, una negra, y otra azul, pintadas en ellas muchas cabezas, y huesos de muertos, para q[u]e se acordase q[u]e havia de morir como los demas, y luego volvia el ministro a acerle una larga platica, acordanle el servicio de los dioses, la justicia, la clemencia, el cuidado de el reyno, y defensa de sus vasallos: respondia otorgandolo todo, dandoles las gracias por tales consejos, baxavase al patio, a donde resibia obediencia de toda la nobleza, y en señal le presentavan oyas, y mantas ricas, y le acompañavan a un aposento q[u]e estava en el mismo patio, de alli no salia en quatro dias, ayunando estava alli, y dando gracias a los dioses, yendo al templo a horas señaladas: pasado esto le llevaban a su palacio con gran regosijo a donde hera obedesido, y temido; q[u]e apenas havia quien le mirase a la cara; sino quando salia con algunos privados en secreto.

42. Herr[era] dec[ada] 4 lib[ro] 1 cap[ítulo] 11 p[árrafo]  24 col[umna] 1 describiendo las cosas de la provincia de el oro, dice: la noticia q[u]e tenian de dios, hera, q[u]e quando sucedio el dilubio,[121] se escapò un hombre en una canoa con su

{f. 41}                                                                                                      41

muger e hijos, y q[u]e de ellos se havia multiplicado el mundo; y q[u]e en el cielo havia un señor q[u]e hacia llober, y hera causa de los demas movimientos celestiales: q[u]e havia en el cielo tambien una muger muy linda con un niño Jesus; ni de el origen de ellos mismos tenian noticia.

43. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 4 cap[ítulo] 7 p[árrafo]  154 col[umna] 1 dice: (hablando de Nicaragua en la mar de el sur) no se casan los sacerdotes;[122] sino sòn los q[u]e oyen pecados agenos, y dan penitencia segun la culpa; y no rebelavan la culpa, so pena de castigo: y a p[árrafo  246 col[umna] 2 cap[ítulo] 12 hablando de la misma gente, dice: confesaban a el papa las cosas q[u]e tenian por pecado,[123] con q[u]e les parecia q[u]e quedavan libres: y en la decada 3, cap[ítulo] 12, p[árrafo] 122 dice: las mugeres vestian a el huso misteco (q[u]e es en Nueva España) todos traian sarsillos en las orejas, [124] y anillos de oro en los dedos, vezotes de oro y christal en el labio bajo:[125] hasta  aqui el autor (nòtece q[u]e tambien los sacerdotes mexicanos; y campechanos husavan sarsillos) y en la dec[ada] 5 lib[ro] 7 cap[ítulo] 9 p[árrafo] 213, col[umna] 1 hablando de las liberalidades de D[o]n Diego de Almagro, dice: un Juan de Lope pidio a D[o]n Diego un anillo de una carga de ellos q[u]e alli estava,[126] y prontam[en]te q[u]e tomace quantos cupiesen en sus manos; esto dice este autor, y sacamos de esto, q[u]e denota tener comunicacion los peruanos con los de Nueva España; asi por esto, y otros husos; y el mais, y molerlo de la misma manera en Quito: adviertace, q[u]e aquellos anillos heran despojos de la guerra; a el modo de la batalla de canas, q[u]e tubieron los romanos, donde entre los despojos de los vensidos se hallaron muchos anillos, q[u]e los median con medidas.

 

44. Herr[era] dec[ada] 5 lib[ro] 4 cap[ítulo] 5 § 115 col[umna] 2 dice: tenian en el Perù q[u]e todas las cosas adversas, benian por pecados, y el remedio era husar de sacrificios: husavan confesarse bocalm[en]te y havia confesores,[127] y davan sus penitencias; y pecado reservados a el mayor: tambien confesaban mugeres;[128] y en algunas provincias, tenian opinion; q[u]e hera gran pecado callar algun pecado en la confesion, y en este conbenian con los de N[ueva] España de Yucatan, y Honduras.

 

45. Herr[era] dec[ada] 4 lib[ro] 9 cap[ítulo] 7 p[árrafo]  234 col[umna] 1 (hablando de los mexos, junto a la ciudad de Oaxaca en N[ueva] España) dice asi:[129] es la gente

{f. 42}                                                                                                      42

de buena estatura, con barbas largas[130] (cosa rara en las yndias) y su lengua es muy gruesa, a manera de alemanes: cada año ha {sic} hacian aquella memoria a los difuntos, poniendoles comida por ofrenda, y sobre las sepulturas, por el mes de (“9 bre”) noviembre dos dias antes, o despues q[u]e nosotros celebramos la memoria de los difuntos: h[as]ta  aqui el autor. Nota: aqueste rito y commemoracion es muy paresida al q[u]e husamos en Campeche (q[u]e es por esta cordillera) los catolicos; como tambien el baptismo, confesion, y demas, en q[u]e denota q[u]e llegò a estas partes quien les predicò la ley de gracia; totalm[en]te olvidada de ellos al cavo de tantos años quando llegaron los castellanos.

 

46.   Herr[era] dec[ada] 4 lib[ro] 10 cap[ítulo] 2 p[árrafo] 261, col[umna] 1 dice: Yucatan es un asiento diez leguas de Isamal,[131] adonde los antiguos dicen q[u]e q[u]e {sic} huvo tres señores hermanos,[132]  los quales llegaron allì de la parte de el poniente, edificaron grandes templos, y muy galanos, y rigieron algunos años en paz, y justicia, afirman q[u]e vivian sin mugeres honestam[en]te y con el tiempo faltò el uno; [133] y con su ausencia hizo tanta falta, q[u]e los discipulos comenzaron a ser desonestos, y parciales; y de tal manera los aborrecieron, q[u]e los mataron,[134] y se despoblaron y dejaron los edificios (especialm[en]te el mas onroso) diez leguas de el mar. Los q[u]e poblaron a Chicheniza, se llamaron los izaes: con estos, hai opinion q[u]e reynò un gran s[eñ]or d[ic]ho Culculcan, y todos conforman q[u]e entrò por la parte de el poniente,[135]  y la diferencia es si entrò antes, ô despues de los izaes, ò con ellos(finalmente) el nombre de Chichiniza, y el suceso en las cosas de la tierra despues de la muerte de los dos q[u]e diximos: muestra haver Cuculcan regido etas tierras juntam[en]te con ellos: fuè hombre de buena disposicion, no le conosieron muger, ni hijos, fuè gran republica; y por eso es tenido por dios: eligieron asiento ocho leguas mas adentro, donde ahora està la ciudad de Merida, y quince de la mar, alli hicieron un serco de medio quarto quarto {sic} de legua, de una pared en piedra seca: con dos puertas hicieron sus templos, y a el mayor llamaron, Cuculcan, y alli serca edificaron las casas de los señores, entre los quales reparte Cuculcan las tierra, a la ciudad llamò Mayapan; q[u]e suena la bandera de la Mapan, porque maya dice lengua: con esto se sosegò la tierra, y vivieron en mucha paz algunos años; h[as]ta q[u]e disponiendo Cuculcan su

{f. 43}                                                                                                      43

partida encomendandoles el buen gobierno al q[u]e los dexaba,[136] se bolvio a Mex[i]co por el camino por donde havia hido alli y algun tiempo se estuvo en Champoton, a donde por memoria fundò un templo dentro de la mar, q[u]e oy se vee: considerando los señores de Yucatan, despues de hido su maestro, q[u]e no se podria governar si no gobernava uno, dieron el govierno a uno de el linaje de los de comes {sic} tenia 22 pueblos, y por q[u]e no cabian en aquel sercado, poblaron fuera: recibian los tributos, y los davan a los señores, y heran mais, sal, miel, y pescado, con lo qual sustentaban los siegos, mancos, y cojos, q[u]e para esto juntavan: tenian para el culto sacerdotes, y uno hera el superior a quien suceedian los hijos, estavan en el las llaves de su religion,[137] aconsejava a los señores, respondia a sus preguntas, proveia de sacerdotes a todos los pueblos q[u]e se ocupavan en enseñar sus creencias, y  escribir libros de ellas: viviendo los cocomes en este consierto, de la parte de el medio dia a las faldas de la sierra de Lacandon, entraron grandes compañias de gente, q[u]e tiene por cierto Hran de Chapa, y andubieron quarenta años por los despoblados de Yucatan,[138] y al poco aportaron a las cierras q[u]e caen algo enfrente de la ciudad de Mayapan, diez leguas de alli poblaron, y edificaron buenos edificios: al cavo de algunos años, los de Mayapan, los convidaron para q[u]e hicieran morada a los señores en el asiento de la sierra: los totoxias (q[u]e asi se llamavan los estranjeros) por esto se pasaron a la ciudad y edificaron[139], y multiplicaron, y vivieron sujetos a las leyes, y constumbres de Mayapan.

 

47. Viviendo (dice alli) en paz, entrò la codicia en el governador a la pasifica ciudad de el linage de los cocomes,[140] y comunicandose con el governador, q[u]e los reyes de Mex[i]co tenian en Tabasco,  y Xicalanco, metio en Mayapan gente de guerra tiranizò la tierra, y dio en haser esclavos; pero el señor de los totoxiues no lo consintio entre los suios, con q[u]e se ganò el amor de la tierra, y con la comunicacion de los mexicanos, entrò mas gente en Mayapan, y no lo consintiendo, se juntaron con el señor de totoxuis, y subiendo a la casa de el señor cocomes lo mataron, y descompararon la ciudad, deseando cada señor vivir en libertad, al cavo de 500 años

{f. 44}                                                                                                      44

q[u]e se fundò, y havia q[u]e se despoblo, (segun la cuenta de los yndios) h[as]ta q[u]e llegaron a Yucatan (setenta años) los castellanos, cada señor procurò llevar los mas libros de sus ciencias a donde hicieron templos; y esta es la principal causa de los q[u]e hay en Yucatan. Prosigue diciendo de aqui, a Ahxius, señor de los totoxius poblaron en Mani, q[u]e quiere desir, yà pasò; como si dixesemos, ya pasò, hagamos libro nuevo, y oy se llama esta tierra, Tutuxiu.

 

48. El cocon (alli mismo) q[u]e se hallava en la tierra de Ulua (Mex[i]co) sabida la muerte de el padre fuè allà, y juntando los parientes, fundo un buen pueblo, con templos a sus dioses, y les llamo Tibulcon, q[u]e quiere desir, jugados hemos sido, tiempos quedan para desquitarnos; cundieron mucho, y procrearon muchas familias, q[u]e se llamaron cocomes.[141]

 

49. Prosigue: otro yerno de un sabio, y estimado sacerdote poblò en en Terrohò: pobladas estas gentes comenzaron a tener diversas opiniones en materia de religion;[142] y D[o]n Juan Cocom cristiano ya, y des[c]endi[en]te de los cocomes, mostro un libro q[u]e le dexò su ahuelo, a donde estaba pintado con un benado, refiriendo, q[u]e dexò d[ic]ho, q[u]e quando en aquella tierra entrasen de aquellos benados grandes (q[u]e heran las bacas) se mudaria el culto de sus dioses; lo qual havia visto en la entrada de los castellanos cumplido.[143]

 

50. Herr[era] dec[ada] 4 lib[ro] 10 p[árrafo] 267 escribe: las mugeres ahora davan las ternillas de las narises, alli por gala se ponian una piedra de ambar: ponianse sarsillos en las orejas, labravanse el cuerpo arriva; tambien husavan de el kalendario para la cuenta de los años; h[as]ta  aqui este autor. En Besallan, en Filipinas se labraron tambien los yndios el cuerpo con ahujas, alli ponian tinta, y por eso se llamo pintados; y el ponerse aquella piedra en la naris, es lo mismo q[u]e en Vengala, y otras partes de la Yndia. Husan las mugeres moras de los lascares(q[u]e tambien son moros) anillos en las narises: me he alargado mucho en las cosas de Yucatan, por ser a donde mas rastros se han allado; q[u]e no se pueden, ni hera justo el dexarlas.

 

51. Por q[u]e algunos han escrito; q[u]e en la America

{f. 45}                                                                                                      45

no se hallo hierro;[144] y todos lo niegan a boca llena: con q[u]e sin duda, q[u]e aquellas grandes piedras, templos &c que significa este simbolo e[tcétera] lo debieron de labrar los antiguos con las uñas? pues sepase q[u]e Herr[era] dec[ada] 4 lib[ro] 9 cap[ítulo] 5 p[árrafo] aragrafo 230 escribe: q[u]e en las minas de Tasco havia venas de hierro, y en Tajimaroa, Mechoacan, y Mestitlan, y estas se beneficiavan en el Brasil escribe el padre Vazconcelos q[u]e las hai; tambien se hallaron serca de Quito.

 

52. Herrera generalm[en]te de las yndias dec[ada] 4 lib[ro] 8 cap[ítulo] 4 p[árrafo] 197, col[umna] 1 hablando de las cosas de Honduras,[145] a donde esta la ciudad de Gracias a Dios, escribe asi: no se ha podido hallar mayor antigüedad en esta provincia de Serquin, sino q[u]e decian los viejos q[u]e havia 200 años q[u]e havia llegado a ella una s[an]ta q[u]e llaman, Comisahual, q[u]e suena tigure q[u]e buela, por q[u]e hera muy sabia, y estos yndios tienen en grande estima a el tigre, y asi la aplicaron este nombre, decian q[u]e hera blanca como castellana, y sabia el arte mexicano, y q[u]e hizo su asiento en Coalcoquin, la tierra mas mas {sic} fertil de la provincia, a donde estavan las piedras, y caras de leones a donde idolatravan, y la piedra grande de tres puntas q[u]e en cada una hay tres rostros disformes;[146] y dicen algunos q[u]e aquella señora las llevo alli por el aire, y en virtud de la piedra vencia las batallas: y estendio su Ymperio, y huvo tres hijos sin ser casada (aunq[u]e otros dicen q[u]e heran sus hermanos; y q[u]e no conocio varon) q[u]e viendose vieja les repartio las tierras, [147] y dio buenos consejos para el buen tratam[ien]to de sus vasallos, y q[u]e mandò sacar su cama de casa, y vino un relampago con truenos, y vieron un lusidisimo pajaro volando, q[u]e por q[u]e nunca mas parecio la señora, creyeron q[u]e hera el pajaro, y se hiva a el cielo;[148] y desde entonces, h[as]ta  q[u]e llegaron los españoles solemnisavan aquel dia con gran fiesta.[149] Luego repartieron estos tres hermanos la tierra de Corquin, y governaron esta  provincia en policia, y buenas constumbres, y fue la gente valiente, y guerrera, y como la comisahual era magica, hacia muchos encantos, y asi dio a entender a la gente lo q[u]e queria de religion, y super[s]ticiones: entre los demas ydolos q[u]e adoravan, havia uno q[u]e llamavan el gran padre, y otro a quien decian la gran madre,[150] y a estos pedian 

{f. 46}                                                                                                      46

salud: otros dioses havia, a unos pedian hacienda, remedio en sus pobresas, y q[u]e los sacase de necesidad, diesen de comer y crias sus hijos, sus sementeras y los ayudasen en sus grangerias; y muchos años en los viejos duraron estas super[s]ticiones: h[as]ta  aqui este autor.

 

53. Nota: para cuya inteligencia es de saber, q[u]e èsta provincia no dista mucho de Yucatan, por la parte q[u]e confina en Honduras, en la parte q[u]e mira a la mar de el norte: salen a la mar dos rios Ulua, Lempa, y Tualvo, tambien se supone, como se ha d[ic]ho en las cosas de Yucatan, q[u]e quando de la parte de Mex[i]co fueron alla antiguam[en]te aquellos tres m[aes]tros q[u]e enseñaron las cosas de religion, levantaron templos, y cauzes, q[u]e se escribe a n[umer]o 45 falto uno de ellos, el qual sin duda pasò a esta provincia, predicando la ley de gracia; pues aqui en Honduras, Nicaragua, Guatemala, y Oaxaca hay rastros, y señales de ello muy siertas y notorias; q[u]e la una de ellas es la s[an]ta cruz de Guatulco: y asi, para mayor inteligencia, y comprovacion de lo q[u]e luego diria, es de saver lo q[u]e dice este autor en la

 

54. Dec[ada] 5 lib[ro] 4 cap[ítulo] 5 p[árrafo]  116 col[umna] 1 hablando de la religion de los yndios de el Perù, dice asi: y es de notar, q[u]e las tres estatuas de el sol,[151] se llamavan, Apoin Ti, Chusijn Ti, Yntiquas Ti, q[u]e quiere decir padre y s[eñ]or el sol, el hijo sol; y el hermano sol; y en Chuquisaca husavan adorar a Tanga Tanga, un ydolo q[u]e decian q[u]e uno heran tres, y tres en uno.

 

55. No es para omitir, y dexar en silencio, lo q[u]e de los peruanos cuenta Herr[era] dec[ada] 5 lib[ro] 3 cap[ítulo] 6 p[árrafo] 77 col[umna] 1 tambien los yndios, segun lo tienen por tradicion de sus antepasados, y parece por sus cantares, q[u]e en su antigüedad estubieron mucho tiempo sin veer el sol, y q[u]e por los grande votos, y plegarias q[u]e hacian a sus dioses, salio el sol de la laguna Titicaca, y de la ysla q[u]e està en ella, q[u]e es en el Collas: y q[u]e aparecio luego por la parte de el medio dia un hombre blanco barbudo de gran cuerpo, y venerada presencia, q[u]e hera tan poderoso q[u]e bajava las sierras, crecia los valles, y sacava

{f. 47}                                                                                                      47

fuentes de la piedras al qual por su gran poder llamavan principio de todas las cosas criadas,[152] y padre de el sol, por q[u]e dio ser a los animales, y a los hombres, y q[u]e por su mano les vino notable beneficio, y q[u]e obrando estas maravillas fue de largo asia el norte, y de camino iba dando orden de vivir a las gentes, hablando con mucho amor, amonestando q[u]e fuesen buenos, y se amasen unos a otros, al qual h[as]ta los ultimos tiempos de los yngas llamaron Tice Viracocha, y en el Coyas Ticapa,[153] y en otras partes arnaba, y q[u]e le hicieron muchos templos, y bueltos en ellos a su su {sic} semejanza a los quales sacrificavan.[154] Dicen mas q[u]e pasados algunos tiempos (segun dijeron sus mayores) q[u]e aparecio otro hombre semejante a el referido,[155] q[u]e sanava a los enfermos, dava vista a los siegos, y q[u]e en la provincia de las Cañas, queriendo locam[en]te apedrearle, le vieron incado de rodillas, alsadas las manos al cielo, imvocando el divino favor, y q[u]e aparecio un fuego de el cielo,[156] q[u]e los espantò tanto, q[u]e con grandes gritos y clamores le pedian q[u]e los librase de aquel peligro, pues les venia aquel castigo por lo q[u]e havian cometido, y q[u]e luego sesò el fuego, quedando abrasadas la piedras, q[u]e oy en dia se veen, y tan libianas, q[u]e aunq[u]e grandes se levantaban como corcho, y dicen, q[u]e desde allì se fuè a la mar,[157] y entrando en ella sobre su manto tendido, nunca mas parecio; por lo q[u]e le llamaron Viracochea; y quiere decir, espuma de la mar; nombre q[u]e despues mudò significacion y q[u]e luego le hicieron un templo en el pueblo de Catha, y algunos castellanos; por solo su discurso, han d[ic]ho q[u]e este debia de ser algun apostol; pero los mas cuerdos lo tienen por vanidad, por q[u]e en todos estos templos se sacrificava a el demonio, y h[as]ta q[u]e los castellanos entraron en el Perù, no fue oydo, ni predicado el s[an]to ebangelio, ni vista la señal de la s[antisi]ma cruz: h[as]ta  aqui n[ues]tro autor, al qual quiero hacer esta pregunta. S[eñ]or Coronista Ant[oni]o de Herrera, coronista insigne, en todo grande, y con gran credito, y fama: digame v[uestra] m[erce]d si este no fuè apostol, o discipulo suyo; quien seria? y digame mas v[uestra] m[erce]d quien seria aquel q[u]e les enseño de aquel dios verdadero (vease a n[umer]o 18[158]) y el mis-

{f. 48}                                                                                                      48

terio de la S[antisi]ma Trinidad q[u]e nos cuenta? claro està q[u]e no dirà q[u]e el demonio; q[u]e eso fuera mayor disparate, q[u]e el q[u]e escribe v[uestra] m[erce]d quando dice q[u]e los mexicanos hacian dioses de hombres (veanse la nota de n[umer]o 39 al margen) claro està q[u]e algun hombre seria; y no el demonio por q[u]e èste no enseña el conosim[ien]to y creencia de dios, ni a darle reverencia; antes lo contrario: luego mas sierto es q[u]e fuè el apostol; y el desir q[u]e en aquellos tiempos se sacrificava, no prueva contra esto; por q[u]e escrive v[uestra] m[erce]d q[u]e al demonio llaman en el Perù, Zapo, y no nos escribe q[u]e haya templo de esta advocacion; y bien se compadece, con q[u]e el q[u]e se dedicò templo de el dios verdadero lo fuese de valdes; pues q[u]e por haver ellos faltado de aquella enseñanza primera no es argum[en]to para negarla totalm[en]te y con todos cuantos sacrificios nos cuenta v[uestra] m[erce]d no nos dice uno q[u]e hicieron a Zapo.

 

56. Quiero describir aqui una historia pintada por figuras, al modo de los yndios,[159] la qual tuvo en Mex[i]co mas de 14 años sin entenderla de el todo, h[as]ta  q[u]e lleguè a leer lo aqui copiado de Cealcoqin, la qual año de 1680 quando me bolvi a Filipinas dexe al B[achille]r D[o]n Carlos de Siguenza y Gongora, catedratico de matematicas juntam[en]te con un quaderno manuscripto con mas de 52 p[árrafo] de noticias de haver predicado en N[ueva] España S[an]to Tome Apostol, estava la historia en manta de algodon doble, en 4 brasadas de larga, y 3 de ancho de muy buena pintura al temple, con muy perfectas pinturas, y descripciones en letra castellana; pero el lenguaje nadie lo entendio en Mex[i]co pondre nmeros para mayor inteligencia.

 

57. N[umer]o 1 tenia a la parte oriental, y tambien la poniente un sol,[160] y letreros, vi estava la tierra arrimada con montes, cerros rios, casas, yglesias, y caminos con arboles de peras, durasnos, y rosales, para demostrar q[u]e es tierra templada; y una semejanza del paraiso terrenal.

 

58. N[umero] 2 en un monte alto muy levantado q[u]e cubre y descuella sobre otros, estava sentado sobre un feros tigre un hombre bien agestado, blanco, barbudo (notese, q[u]e los q[u]e havia

{f. 49}                                                                                                      49

en la pintura lo son, vestido con una ropeta colorada, las mangas h[as]ta medio braso, con flecos, y borlas q[u]e cuelgan por debajo de los brasos, y un mastle q[u]e le tapava las partes, algo largo, y tendido, en la caveza tenia una corona como con lirios, y de ella pendian sobre las orejas unas como borlas coloradas, con gracia, tenia vaste de oro en el labio de abajo; a la manera q[u]e se escribe, le traian en mexicanos, el papa, y las ropas, en la mano derecha tenia cetro real, en la i[z]quierda una rodela, de el lado, y costado d[e]r[ech]o muy arrimada a el; sentada tambien sobre el tigre estava tambien una muger muy blanca, y hermosa, cogido el cabello, señida la caveza, con un trenzado redondo de sintas de colores, al modo de las gitanas, tenia faldellin azul, y corpiño, las mangas h[as]ta medio brazo, y con la mano d[e]r[ech]a señalava con el dedo al cielo.

 

59. N[umer]o 3 abajo en lo llano havia una yglecia grande con campanas, y cruz ensima, y un rotulo q[u]e decia Tuati cuidad, y algo lejos otra yglecia con un letrero q[u]e decia S[an]ta Maria Magdalena Tepecimiatlan, y otra en otra parte con rotulo, S[an]ta Maria Tualvo, otra yglecia mas q[u]e se describia Santiago, y al pie de aquel monte levantado havia otra yglecia con cruz ensima como las demas; pero sin letrero.

 

60. N[umero] 4 al pie de aquel alto cerro venian a parar, como q[u]e bajaban huellas, o plantas, (que en las historias mexicanas he tenido, y he entendido algunas, significa camino) q[u]e rematavan serca de la ciudad.

 

61. N[umero] 5 al principio de las huellas estava un hombre desnudo sobre un tronco de arbol, cuyo tronco estava parado, y arrimado al marco de la pintura, de manera q[u]e atras no havia otra cosa, tenia maztle, o bajaque blanco, en la caveza bonete redondo, y no muy alto, caido atras de color rojo apagado.

 

62. N[umero] 6 delante de èste hombre q[u]e acabamos de describir, caminava un hombre de gran estatura con sandalias, y maztle algo largo, desnudo, capa de asperges, baculo en la mano como obispo,[161] mitra con cruz sobre la frente, blanco, barba larga, ojos grandes, y de agradable presencia.

 

63. N[umero] donde en la ciudad rematavan aquellos pasos que dixe volvian a comenzar h[as]ta la cima de un mediano cerro, en el qual estava una piedra azul quadrada, sobre la q[u]e estava sentado un anciano delante de el, como bajando, y sentados en coclillas estavan otros 5.

 

64. N[umero] 8 luego despues q[u]e los cinco, sobre piedra quadrada, y colorada estava otro anciano, de cabeza grande, sentado, y delante de

{f. 50}                                                                                                      50

este se seguia otro, y una muger, delante de la qual estava el pie un mancevo de gallardo aspecto, largo el cavello, y muy caido por las espaldas, y en lugar de maztle una toalla larga muy blanca, desnudo el cuerpo como Ecce Homo, llagado, y lleno de sangre, en la mano arco, y flecha,[162] y al ombro un carcaz lleno de ellas, por ensima ( y aqui se vee claro como se engaño quien dixo q[u]e Comizahual hera muger; engañado quizà por q[u]e tiene los cavellos largos a lo nazareno) de la caveza estava pintado un tigre, como quando quiere saltar en el aire.

 

65. N[umero] 9 de èste mancevo salian huellas, como q[u]e venian bajando h[as]ta  el pie de un cerrillo, y allì volvia a aparecer como estaba allà este mancevo apuntando con el arco, y flecha a un hombre muy viejo, y cano, q[u]e estava en pie con ropilla, levantada en la mano derecha una arma como punta de lanza; pero tan larga como una espada, y en la yzquierda una rodela, el asì estava luego caido en el suelo clavado con una flecha, demostrando ser vensido de aquel mancevo: decia un rotulo Huani opehua.

 

66. N[umero] 10 hallà en aquella procesion de hombres sentados en concilio (digo) coclillas, q[u]e dice generacion, o desendencia, luego immediato se seguia uno, q[u]e se parecia a aquel q[u]e estava en el cerrillo n[umero] 8 de el qual procedian dos hombres, los quales hera{n} principes, por q[u]e estavan sentados iguales de otros muchos, q[u]e apartandose cada uno por su parte fueron principio, y origen de dos naciones; aunque diferentes en el traje, como veremos.

 

67. Numero 11 el uno de aquellos dos tenia delante a si 22 personas, y los tres ultimos estavan revestidos a la española, con sombrero, ropillas, calsas a lo antiguo, medias, y zapatos; y letrero q[u]e decia, fia D[o]n Diego de Velazco Governador, Tia. D[o]n D[o]n {sic} Pedro de Velazco Governador, Tia, D[o]n Diego de Velazco Governador: {sic} aquel q[u]e caminava por la parte opuesta, tenia delante de si mas personas, [163]los unos, y los otros, en coclillas, los cinco ultimos a la española con los sombreros algo diferentes, y todos barbado, y blancos.

 

68. N[umero] 12 havia una laguna pequeña de q[u]e salia un rio en ella, dentro dos piedras azules, q[u]e la una se levantava de la otra como si fuera su tapadera, salia una muger mosa muy hermosa con faldellin, y manto azul q[u]e le

{f. 51 }                                                                                                     51

cubria la caveza el todo de ella.

 

69. N[umer]o 13 hallà (aun lejos) sobre piedras coloradas estavan dos figuras sentadas,[164] con las manos levantadas algo, y abiertas, el uno hera varon, y tenia tiara en la caveza, y estava vestido, el otro bulto hera aquella muger q[u]e salia de la peña, sobre la cabeza, a un lado estava pintada una culebra q[u]e tenia dos cavezas.

 

70. N[umer]o 14 delante de aquellas figuras estava el arbol volador con quatro yndios volando,[165] con tamboril, y flauta como lo husavan los mexicanos, estavan estos quatro d[ic]hos colgados, y en la cumbre estava vailando el de el tamboril; y esto prueva la comunicacion q[u]e tenian los unos, y los otros.

 

71. N[umer]o 15 havia una casita baxa almenada, de ella se levantaba un pajaro, y havia letras q[u]e explicavan lo q[u]e hera.

 

72. N[umer]o 16 havia una piedra grande de tres lados, o esquinas, y otras dos redondas, y algo lejos otra con un animal ensima como perro, y letra q[u]e decia bectrechactra.

 

73. N[umer]o 17  a la parte de el poniente havia un rio q[u]e corria al norte, y letra q[u]e decia, Lempa.

 

74. N[umer]o 18 salia de la ciudad unos pasos q[u]e rematavan en tierra negra,[166] en q[u]e havia yglecias sin campana, ni cruz, de la qual se apartavan las huellas por dos sendas h[as]ta  la mar q[u]e estava alli; en cuya orilla estavan dos ancianos en coclillas, desnudos, con maztle, cacles, y bordones como peregrinos.

 

75. N[umer]o 19 allà a un lado, en una horca estava un ahorcado a quien despedazavan dos lebreles, a un lado un español con gorra, y vara levantada, alli tambien un yndio con letrero, y el dedo en la boca, y ensima de la horca un rotulo q[u]e decia 1526, justicia, Castilla, y proseguian las letras.

 

76. N[umer]o 20 por la orilla, o sircunferencia de la pintura, havia pintadas en diviciones, no muy juntas, cavezas, una de hombre, y otra de muger, cada par con letrero, q[u]e cada una comenzaba, Cocio Cocama.

 

77. N[umer]o 21 tenemos ya descripto nuestra pintura, siguese ahora una breve explicacion, segun mi corta capacidad, he inteligencia, dexando al curioso q[u]e discurra con mayor asierto. Se

{f. 52}                                                                                                      52

ha de suponer, q[u]e lo mas de esta pintura tiene su sentido como en cosas espirituales,[167] y de religion en metaforas, y alegorias; como quando se dice sol de justicia, leon de Judà, varon fuerte &c que significa este simbolo e[tcétera].

 

78. N[umer]o 1 el tener al oriente, y poniente el sol,[168] dirà q[u]e aquella tierra està sita de oriente a poniente, y q[u]e camina por ella en paralelo o q[u]e camina por ella en paralelo, o tierra alumbrada con la luz de el sol divino.

 

79. N[umer]o 2 parece, y demuestra la creacion de Adan, y Eva, el estar en monte alto, dirà lo mejor de la tierra q[u]e se aventaja a las cosas el paraiso terrenal el estar sobre tigre el dominio de todos los animales: el cetro, y rodela significa el mando y señorio q[u]e le dio dios de el uniberso anciano,  dira el primero, el mas antiguo de los hombres: el vesote en los labios, la gracia en q[u]e dios le crio, insignia de q[u]e tambien husavan el mayor sacerdote, a quien llamavan papa, q[u]e en esto denotava aquel q[u]e tenia especial gracia para enseñar los ritos: aquella muger es Eva, q[u]e salio de el costado de Adan: el estar señalando al cielo, dirà q[u]e de alli les vino el ser: los arboles frutales aludirà al arbol vedado, y precepto q[u]e dios les puso.[169]

 

80. N[umer]o 3 parece q[u]e son templos, o yglecias, las quales siendo ya christianos, fundaron alli los ministros ebangelicos con la advocacion de aquellos s[an]tos tutelares.

 

81. N[umer]o 4 aquel hombre sobre aquel tronco, puede ser q[u]e signifique a Christo, y estar delante aquel hombre en grande estatura, quedra desir, hablando de el q[u]e hera su discipulo, y q[u]e vino a enseñar doctrina de el cielo, y q[u]e predicò a Christo, la encarnacion, pasion, resurreccion, la creacion de el hombre, y el misterio de la santa trinidad, q[u]e todo esto demuestran las figuras q[u]e aqui se representan,[170] y q[u]e demuestra ser sacerdote, y obispo, como lo fueron los apostoles; y q[u]e tiene mucha semejanza, por lo de grande estatura, con lo q[u]e acavamos de escribir de aquel el hombre q[u]e se aparecio en el Perù, y asimismo con aquel Ketzalcohoa[t]l q[u]e dice Torquemada q[u]e vino a Tula, y traia la capa llena de cruzes coloradas; y tambien se parece

{f. 53}                                                                                                      53

aquel q[u]e de Nueva España fuè a Campeche, y de alli dejando fundadas las religiones, y discipulos se fue a otra parte,[171] q[u]e sin duda es èste m[aes]tro de esta pintura, y el padre Vasconzelos dice, q[u]e la tradicion de el Bracil, es q[u]e hera de grande estatura, y q[u]e hera el Apostol S[an]to Tome, y es el mismo nombre con q[u]e le llamaban los mexicanos, q[u]e es coatl, o coate q[u]e en castellano dice, gemelo, y en latin, didimo,[172] q[u]e asi se llamo el s[an]to como lo llegò a entender de las pinturas, e historias mexicanas el B[achille]r Bezerra,[173] catedratico de lengua mexicana, y lo notò a p[árrafo] 26 de el libro intitulado, Felicidad de Mex[i]co y dice q[u]e les enseñò el calendario con la cuenta de el año, y mese segun lo husa la s[an]ta yglecia, y es muy digno de reparo lo q[u]e trae el padre Luzena en la vida de S[an] Fran[cis]co Xavier en la Estampa, en q[u]e està la cruz de piedra q[u]e se hallò en Malapiar en el sepulcro de s[an]to Tome Apostol, en q[u]e juntam[en]te con las letras de la circunferencia, està sobre la cruz un pavon r[ea]l q[u]e es la misma ave quetzali de pluma ricas, q[u]e es el uno de los nombres con q[u]e le llamaban los mexicanos, con q[u]e se prueva ser el mismo,[174] y en lengua de los yndios de Filipinas llaman Camba a dos criaturas q[u]e nacen juntas; y cambal se llamaba en Campeche el de la profecia: pues asentado, como lo parece, q[u]e èste fuese el apostol, u otro embiado de dios a predicar a estas gentes de el nuevo mundo, como bien lo prueva el Padre Vasconzelos, quando dijo Cristo a sus discipulos: id por todo el mundo, predicad a toda criatura; y siendo la America la mayor porsion de el, es cierto q[u]e se predicò en ella el s[an]to ebangelio. Pues dice S[an] Mateo, q[u]e escribio su ebangelio a los 30 años de la muerte de Cristo q[u]e el ebangelio estaba predicado en todo el mundo: pues siendo como digo este el apostol, u otro el q[u]e predicò, sacase q[u]e lo q[u]e hay en esta pintura son cosas q[u]e declaran los ministros de la fee, y q[u]e al cabo de tantos años, pasando de tiempo en tiempo, y de mano en mano, solo se han allado estos rastros; pues faltando quien llevase adelante aquella predicacion, como en las demas

{f. 54}                                                                                                      54

partes de el mundo, por los discipulos, y sacerdotes, o succesores de los apostoles, y recurro al s[an]to Papa, y la reformacion de ritos por los concilios en q[u]e havia de parar? pues se halla, q[u]e en un concilio toledano se reformo un abuso introducido en Galicia, y hera q[u]e consagravan en leche los clerigos en lugar de agua; lo q[u]e sucedio a los yndios de la America con la predicacion, es lo mismo q[u]e a los españoles de las Batuecas, q[u]e apenas conserbaron unos bislumbres al cabo de 800 años; acà al cabo de 1500, algo se allò.

 

82. N[umero] 5  aquel anonimo de el /co…/, sobre piedras /.../ denota a Adan caido por el pecado,[175] y fuera de el paraizo, la piedra azul la gracia con q[u]e dios lo reparò, y a todos mediante la encarnacion de el hijo en las entrañas de la virgen q[u]e està cubierta con manto azul, cubierta de cielo, llena de gracia; q[u]e segun las historias mexicanas, a la gracia explicaban con simbolo de piedras preciosas verdes, y azules.[176] Aquellos sinco q[u]e se siguen luego sentados en coclillas, q[u]e denota proceder unos de otro seran algunos patriarcas, o profetas q[u]e precedieron a la venida de el mesias, o los acendientes de Cristo segun la carne.

 

83. N[umero] 6 aquella muger parece a la Virgen Maria, pues està como ella allà en la laguna naciendo entre las piedras q[u]e significando ellas la gracia; diria q[u]e Maria nacio, y fuè concebida en gracia:[177] el anciano de la caveza grande, serà David, acendiente de la Virgen; o San Juachin: el mancevo blanco[178], llagado, con arco, y flecha es Cristo, el tigre sobre la caveza es señal de fortaleza, y virtud; los leones aunq[u]e los hay en la America, no son valientes como los tigres, y asi como el tigre simbolisan lo d[ic]ho y cuadra con lo q[u]e la escriptura dice de Christo quando le llama leon de Judà. Con  q[u]e se ha de entender, q[u]e lo q[u]e Herrera entendio por muger tigre q[u]e vuela; es, y se ha de entender de Cristo y su virtud divina; q[u]e estando como està delante de la Virgen, denota q[u]e es su hijo segun la carne. Haviaseme olvidado decir, como aquella piedra colorada significarà sangre

{f. 55}                                                                                                      55

y el pecado original; el qual con la sangre, y pasion de Christo se redimio; y el de la caveza grande serà a quien dios hiso la promesa dello.

 

84. N[umer]o 7  el mancebo gallardo es Cristo q[u]e con su sangre y pasion redimio a el hombre,[179] y vencio a el demonio, serpiente antigua, como quien estava apoderado, y encastillado en este modo, significado en aquel cerro, y la vencio, y quito las armas.

 

85. N[umero] 8 aquellos hombres, principio de las dos procesiones, traen como todos los demas su principio de Adan, y en esto no se apartaron como otros yndios de la verdad: aquellas dos procesiones, o parcialidades, es parte q[u]e parece q[u]e asentò a vista de aquella tierra, y parece q[u]e yà estava alli quando llegò aquel predicador; y el ser blancos, y barbudos como los mixes, dà a entender q[u]e no son yndios.[180]

 

86. N[umer]o 9 aquellos tres vestidos a la española, denota q[u]e en tiempo de el primero de ellos llegò quien los baptizò, y q[u]e su decendencia hera christiana, el llamarse Velasco por sobre nombre,[181] es en memoria de D[o]n Luis de Velasco, Virrey de Nueva España, el qual daria a estos el castigo. Tambien se ha de entender, q[u]e los q[u]e estan al lado contrario tambien recibieron la fee catolica; pero q[u]e teniendo el mismo origen se apartaron los unos de los otros; y èsta serà la de los mixes,[182] pues se escribe de ellos q[u]e son blancos, y barbudos; y como quiera q[u]e seà, parece q[u]e son advenedisos europeos.

 

87. N[umer]o 10 aquella muger vella, y hermosa, es Maria, la mar significa su nombre, la piedra azul la gracia, en q[u]e fuè concebida, el rio q[u]e sale de aquella mar, el bien q[u]e por Maria como rio llena toda la tierra;[183] o a la fuente de gracia Jesus q[u]e trajo en sus entrañas, y como fuente de aguas vivas, riega a toda la yglecia s[an]ta por medio de los sacramentos: el faldellin, y manto azul es como de ordinario la pintan cubierta la caveza, significa ser madre; en Guadalupe se aparecio con manto azul; aunq[u]e tambien con corona.

 

88. N[umero] 11 las dos figuras sentadas en piedra colorada es Dios: y N[ues]tra Señora tener abiertas las manos, significa q[u]e a solo dios se ha de pedir, y a su Madre S[antisi]ma porq[u]e siempre estàn con las manos abiertas, para derramar  misericordias

{f. 56}                                                                                                      56

sobre los vivientes: la piedra colorada, es tributo, y distintibo para conocer la ymagen de Cristo y su pasion, y q[u]e es piedra firme: el tener la señora sobre la caveza a un lado la culebra, esto es escriben Torquemada, Monarq[uía]. Yndia[na] parte 2, p[árrafo] 160 q[u]e a Eva le llamaban los yndios Cihuacohual,[184] muger culebra en lo q[u]e dice, o la muger a quien engaño la culebra: pues ahora, como por aquella Eva nos perdimos, dirà q[u]e èsta es la segunda Eva por quien fuimos ganados, y restaurados: el volador significa aquella fiesta q[u]e escribe Herr[era] q[u]e le hacian cada año al gran padre, y a la gran madre; y con mucha piedad le aplicavan estos nombres pues a nadie como a dios, y a la virgen se debe atribuir estos nombres, y acudir como lo hacian estos yndios en sus necesidades; q[u]e fue lo q[u]e aquel predicador les enseñò con las demas cosas de el cielo.

 

89. N[umero] 12 prueva lo q[u]e ya se ha tocado q[u]e su predicador, a ellos tubieron mucha comunicacion con mexicanos, asi por el volador, como por los sacrificios, y aun la lengua, pues aquel nombre Tepecimatlan en mexicano; y aun se puede decir q[u]e de ellos resibieron los abusos, y corruptela de la primera doctrina, la qual en Tula, Cholula y otras partes fue perseguida por mas de 500 años, como lo apunta Torquemada, diciendo, que Huemac, perseguidor de Ketzalcohuatl, se hizo adorar por dios.

 

90 N[umero] 13 aquella casita pequeña de piedra almenada, y el pajaro q[u]e se levanta volando, y aquel relampago, y truenos, son en confuso unos pedazos de el misterio de la resurreccion, asumpcion, venida de el espiritu s[an]to, y tinieblas al monte calvario; mal explicados por quien los decia; y peor entendidos de quien hizo la relacion q[u]e vido Herrera.

 

91. N[umero] 14 la piedra grande de tres puntas con los tres rostros disformes, significa la S[antisi]ma Trinidad, explicado el misterio por su predicador, y fixada, o exculpida en la piedra esquinada,[185] para memoria eterna de lo q[u]e representavan el desir q[u]e los rostros heran disformes, se ha de entender por lo grande de el misterio, q[u]e

{f. 57}                                                                                                      57

representavan: el decir q[u]e lo trujo alli por el aire, ya se vee q[u]e no habla de piedras naturales, sino q[u]e en sentido espiritual dice, q[u]e la doctrina de Cristo y misterio de la S[antisi]ma Trinidad les fueron anunciados, y para testimonio indubitable quedaron alli esculpidas: quando dice q[u]e no conocio varon habla de la S[antisi]ma Virgen, por el misterio de la encarnacion: quando dice q[u]e tuvo tres hijos sin ser casada esta, y q[u]e otros dicen q[u]e heran sus hermanos, se debe notar q[u]e dos hermanos, y aquel de quien se dice q[u]e lo heran, son tres en q[u]e buelve a repetir el misterio;[186] y en suma, dice, en q[u]e grado esta la persona de el hijo, con el padre, y el espiritu santo: en decir q[u]e hera magica, quiere decirle sabiduria celestial, y maravilla con q[u]e obrava Christo: quando dice q[u]e estendio su ymperio, dira la predicacion ebangelica por todo el mundo: en decir q[u]e como hera magica, dio a entender de religion, quiere decir q[u]e las verdades, y milagros con q[u]e predico Cristo su doctrina comvenia a los ynfieles con tal fuerza, y eficacia q[u]e los obligava a resibirla:[187] las dos piedra q[u]e havia mas, y con letrero, no alcanzo su significado, sino es q[u]e q[u]e {sic} son aquellas en q[u]e estan esculpidas las caras de los leones.

 

92. N[umero] 15 aquel rio Lempa q[u]e sale de la mar de el norte, servirà al curioso q[u]e quisiere saber la situacion de esta tierra, de la qual no dista mucho el rio Ulua.

 

93. N[umero] 16 aquellos pasos q[u]e caminan para tierra negra,[188] quiere desir q[u]e de alli pasaron a Etiopia aquellos dos, y q[u]e alli fundaron yglecia, y q[u]e de alli pasaron por mar a otra parte: esto tiene su apoyo en lo q[u]e escribe Torquemada, quando escribio q[u]e Ketzalcohoatl, q[u]e entendemos por Santo Tome, pasò de Cholula a Tlilapa, q[u]e en tierra negra, lo qual tanbien concerda, con lo q[u]e en vida de San Xavier se dice, q[u]e quando el Santo llego a Zocotorra, hallo cruzes, y christianos desde del tiempo q[u]e predicò alli S[an]to Tome Apostol; aunq[u]e mesclados ya con moros.

 

94. N[umero] 17 la horca, y el ahorcado es un castigo cruel q[u]e hicieron los castellanos a q[u]e escribe Herr[era] q[u]e en los mixes,[189] el Capitan Pacheco echo a los perros a un yndio q[u]e no quiso

{f. 58}                                                                                                      58

descubrir a su señor q[u]e hacia daño a los castellanos.

 

95. N[umero] 18 aquellas cavezas de hombres, y mugeres en la orilla de la pintura son los casamientos de las dos familias referidas.

 

96. N[umero] 19 q[u]e cada uno de aquellos hombres tiene su letrero q[u]e dice, Cociococana, por el comienzo de cada letrero, dirà, caso fulano, con sutana, por q[u]e alli donde estan no havia lugar p[ar]a escribirlo.

 

97. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 2 cap[ítulo] 15 p[árrafo] pragrafo 86 dice hablando de la religion de los mexicanos havia (dice) otro ydolo en Mex[i]co, muy principal,[190] q[u]e hera el dios de la penitencia, y de los jubileos, y perdon de pecados,[191] q[u]e se llamava Tezcatlipoca, cuya figura hera de piedra negra relumbrante como azabache, vestida con atabios galanes, tenia sarcillos de oro, y plata, en el labio bajo con un canutillo cristalino de un geme de largo, y en el una pluma verde, la coleta de los cavellos la señia una sinta de oro bruñido, y en ella por remate una oreja de oro con unos humos pintados en ella, q[u]e significan los ruegos de los afligidos, y pecadores, q[u]e oya quando se encomendavan a el,[192] de entre esta oreja ,y la otra salian unas garcetas, y al cuello tenia un oyel de oro q[u]e le cubria todo el pecho, y brazaletes de oro en los brazos, en el obligo una rica piedra verde, en la mano izquierda un mosqueador de plumas verdes y amarillas, con azules preciadas, q[u]e salian de una chapa de oro reluciente, y muy bruñida q[u]e parecia espejo, q[u]e significava, (nota: este q[u]e hera su nombre) q[u]e en aquel espejo veia todo lo q[u]e se hacia en el mundo, y al espejo llamavan su mirada,[193] en la mano derecha tenia quatro saetas, significando el castigo q[u]e dava a los malos por los pecados: asi le pintavan sentado con mucha autoridad en un escaño,[194] rodeado con una cortina colorada, laureada de cadaveras, y hueso de muertos, en la mano izquierda una rodela con cinco piñas de algodon, en la mano derecha una vara arrojadisa amenazando con ella, de la rodilla salian quatro saetas, el semblante airado, y la caveza llena de plumas de codornices.

98. Nota: los espejos q[u]e usavan los mexicanos (como se ha tocado) son de piedra muy bruñida, llamanle, tetzcatl, q[u]e quiere decir piedra reluciente, o resplandeciente:[195] aho-

{f. 59}                                                                                                      59

ra, pues de un verbo q[u]e significa, Dios, y de otro q[u]e significa reluciente, o resplandeciente, se compone Tetzcatlipoca, quitando de cada verbo alguna silaba, como la husa mucho aquella nacion, y lo declara el siguiente exemplo, Xaltocan, q[u]e en mexicano, Jal, es arena, teotl es dios, y calli q[u]e es casa, y todo junto Xaltocan, casa de dios en el arenal, (y asi se llama un pueblo q[u]e esta delante de Mex[i]co).[196] Pues ahora segun lo q[u]e escribe este autor, dec[ada] 3 lib[ro] 2 cap[ítulo] 15 p[árrafo] 85, columna 1 q[u]e confesavan a un dios todopoderozo, admirable: quien negarà q[u]e un dios q[u]e perdona pecados, inefable, admirable, q[u]e todo lo vee, q[u]e en el se veen todas las cosas, como en el espejo claro es dios omnipotente; y no el demonio, q[u]e a este le llaman, Mictlan, verbo q[u]e significa inferus, y de Teuhtli, verbo q[u]e significa principe, o señor,[197] y a n[ues]tro modo el principio de las tinieblas, al qual entendian palo q[u]e es? y si alguno replicara, q[u]e al demonio llaman, y lo repiten a cada paso Tlacatecolotl, desengañese, q[u]e no dice diablo, sino hombre buoho, de este verbo tlaca, q[u]e es hombre, y de el verbo tecolotl, q[u]e es el buoho, como huela, debajo de cuya figura veian al demonio;[198] y asi, como por el diablo decimos, diañlo, diantre, demonio, Bercebu, patilla, &c que significa esta    e[tcétera].

{en vertical varias palabras} nacio   Netzal   hualco   yotl.   A dos dias   de el mes llamado venado.  Caza.

 

99. Cuna, caveza de perro como manipulo oo~ explicar estos simbolos, venado, calli. En castellano dice nacio: Netzahualcoyotl a dos dias de el mes de venado de el año calli. Puse aqui èste punto, o clausula de historia mexicana, para veer como escribian, o pintavan sus historias: para pintar, o escribir este nombre, Mex[i]co pintavan una penca de maguey, q[u]e es metl, y una abispa, q[u]e es xiote, y una olla, q[u]e es comi,[199] y quitandole algo a cada uno de estos nombres sale Mex[i]co y asi quando se vieren estas tres cosas en pintura no dice otra cosa q[u]e Mex[i]co, y para pintar a Tenochtitlan, q[u]e es el sobre nombre de Mex[i]co pintaban un piedra, q[u]e es tetl, y sobre ella un tunal con tunas, q[u]e en su lengua es nochtli, y todo junto Tenochtitlan, quitand[o] algo al verbo.[200]

100.  Al primer rey de Mex[i]co llamaron, Acamapistli, q[u]e suena, caña mano, pizietla, q[u]e son siertas cañuelas con q[u]e tomavan el tavaco en sus combites; y asi lo vera, y con media mitra en la caveza el curioso en la estampa q[u]e trahe Antonio de Herrera en la primera foja.[201]

{f. 60}                                                                                                      60

de la decada primera de su Historia general de las yndias,[202] y con esta media mitra en la caveza estan pintados todos los reyes en sus historias; y se vera en una muy curiosa q[u]e esta en el colegio de S[an] Pedro y S[an] Pablo de Mex[i]co en la librería. Asentado, como es verdad q[u]e los reyes traian en la caveza media mitra, desian q[u]e la traian por q[u]e (como luego veremos) no heran reyes soberanos, sino tenientes de Ketzalcohoatl, y q[u]e por husarla èl entera, husavan ellos la mitad, en señal de q[u]e lo tenian, y esperavan q[u]e havia de bolver a reynar, y esta media mitra es aquella q[u]e se ponen en la caveza con ricas joyas.[203] En la Nueva España, quando ellos bailavan el tocotin, aludiendo en esto de la mitras, como en el baile, a q[u]e en su antigüedad salian solam[en]te; los reyes a bailar un poco,  como sucedia en la fiesta de el fuego nuevo q[u]e hera de 52 a 52 años, (como largam[en]te escribe Torquemada) y entonces jugavan al palo volador con la rueda q[u]e significava un siglo,[204] y los quatro yndios, q[u]e colgados de ella davan 13 bueltas cada uno, significavan las quatro casas, o señales con q[u]e señalavan los años, de modo, q[u]e quatro de a 13 hacen los 52 años a q[u]e llamavan xiumolpia, esto es, atadura de los años; por q[u]e tenian q[u]e al cavo de 52 años se havia de acavar el mundo, y se disponian para ello con ayunos, oraciones, y sacrificios, y en todo el reyno se apagava el fuego, la noche de el 21 de d[iciem]bre quando el sol acava su mayor declinacion a la parte de el sur,[205] salian en una gran procesion de Mex[i]co muy despacio, de modo que a media noche llegavan a un cerro q[u]e esta serca de Mexicaltzingo, y en la sima de una piedra, el sacerdote abria por los pechos en cruz a un cautivo, y alli con dos palillos sacava fuego, y se ensendian; hera señal q[u]e dios les alargava otro siglo de vida, y comensavan a dar vozes de jubilo, y alegria, y al punto cogian este fuego nuevo, y lo llevaban

{f. 61}                                                                                                      61

aquel dia a partes muy distintas, bueltos a Mexico, en la plaza que /.../ hera muy grande) bailavan veinte mil yndios, todos señores, y  entonces el rey no escusaba de salir a bailar: al ceptimo año de el reynado de Moctesuma, sucedio esta fiesta; y asi quando oy bailan esta gravisima danza sale el q[u]e hace al rey, da de bueltas, y luego se sienta en una silla, y los demas prosiguen bailando.

 

101. El nombre, o la señal con q[u]e los yndios en sus historias pintadas nombran o señalan,[206] (cada uno de los demas reyes por su figura) a Moctesuma es la media mitra q[u]e traian todos en la caveza, y asi se halla pintado.[207]

 

102. Torquemada, Monarq[uia] India[na]. lib[ro] 4 cap[ítulo] 13 p[árrafo] 417 col[umna] 1 parte 4 hablando de quando el año de 1518 llego Juan de Grijalva a la costa de Veracruz, de q[u]e fue havisado Moctezuma,[208] dice asi: señor nuestro, dignos somos de muerte, por haver venido sin vuestra licencia a vuestra real presencia; pero el negocio es tan arduo, y grave q[u]e lo sufre: es el caso, q[u]e todos juntos los q[u]e aqui venimos hemos visto q[u]e han llegado dioses a aquella costa en grandes casas de aqui (q[u]e asi llamavan a los navios) les hemos hablado, y combersado, hemos comido con ellos, y les dimos mantas ricas, y ellos nos dieron en retorno estas piedras preciosas que aqui t[r]aemos.[209] Luego presentaron las cuentas, y abalorios q[u]e t[r]aian, y dixeron: estas piedras nos dieron, y nos dixeron: id a la corte, y dadlas a vuestro s[eñ]or Moctesuma, y decidle, q[u]e nos bolvemos a n[ues]tra tierra, y q[u]e otra vez bolveremos, y le veremos.[210] No respondio el emperador a esto nada (que solo lo estava sintiendo su pecho) pero dixo a los mensageros: cansados vendreis de tan largo, y acelerado camino, id a descansar; y no digais a nadie esta embajada, q[u]e quiero secreto en ella, por q[u]e el pueblo febril, y bullicioso no se altere; y a su tiempo os llamare. Salieronse los mensageros, y dieronles salas donde estubiesen. Moctezuma quedose solo, y pensativo, y bien sospechoso de mucha novedad en sus reynos, por q[u]e hera de muy buen entendim[ien]to y consideraba los prodigios pasados, y traia a la memoria lo q[u]e su adivino le havia d[ic]ho (por lo qual le echo la casa ensima, y lo matò) y acordavase de lo q[u]e su hermana Papan le havia d[ic]ho años antes,[211] y lo q[u]e Nezahualpilli tambien le havia d[ic]ho y pensa –

{f. 62}                                                                                                      62

van que no heran acaso, sino q[u]e venian amenasando algun gran mal, o trueque de govierno; y como los negocios graves quieren comunicacion, y consejo, hizo luego llamar a los q[u]e lo heran de el suyo, q[u]e fueron el Rey Cacama de Tezcuco su sobrino, al qual embio a llamar por la posta, y a Cuitlahuazin su hermano, señor de el pueblo de Itztapalapam, y a Cihuacoatl, Tlilpotonqui, Tlacohcalcatl, Quapiatzin, Ticocicoatl, Quetzalaztatzin Huitznahuacatl, Tlailozlac Yecatenpatiltzin, q[u]e llegado manifesto lo q[u]e pasava, y haviendo dado, y tomado en pareseres, y adivinansas de lo q[u]e podia ser, concluyeron su consejo con persuadirse, y creer q[u]e seria Ketzalcohoatl; a quien en un tiempo adoraron por dios, de quien tambien pensavan q[u]e havia de venir a reynar otra vez estas tierras,[212] por haverlo el mucho antes d[ic]ho quando paso de aqui a las provincias de Apala, y se les havia desaparesido en la costa de la mar e hido asia quellas partes orientales; y como por esta causa le esperavan, entendieron ser el q[u]e havia llegado.

 

103. Con esta persuasion q[u]e tubieron, determinaron q[u]e se nonbrasen personas q[u]e fuesen a resibirle, y en el interin q[u]e hiban se les mandò a los governadores de la corte q[u]e puciesen gran cuidado, y vigilancia, en atalayar, y descubrir lo q[u]e por el mar viniese, en espesial en Nautla, Tutztla, Mictlan, y Quautla, para q[u]e de aquellas partes, por ser de mas còmodas, se viese mejor, y traxesen razon mas de presto de lo q[u]e pasava: con aquestos recados fueron despachados estos governadores, fueron nombrados cinco señores,[213] para q[u]e llevasen un presente q[u]e el emperador embiava a Ketzalcohoatl, los quales fueron Yohuali y Chan (y èste fue por superior) Tepuztecatl, Ticahua, y Huehuetecatl, y el ultimo, y quinto se llamava Hueicamecatleca, y mandoseles q[u]e con la mayor brevedad posible fueran a la mar, y hablasen de parte de su señor Moctesuma, y su senado a Ketzalcohoatl, su señor, y le ofreciesen el reyno; y un gran presente q[u]e les fue dado para q[u]e le llevasen: èste es el q[u]e dice Gomarra, y Herrera, dec[ada] 2 lib[ro] 5 cap[ítulo] 5 confusam[en]te q[u]e t[r]axeron a Hernando Cortes

{f. 63}                                                                                                      63

quando saltò en tierra por parte de los governadores de Motecuhcuma, y lo dicen por estas palabras: el qual presente dijo q[u]e havia mandado a Juan de Grijalva, quando llegò en aquellas partes, sino q[u]e por mucha prisa q[u]e se dieron, hallaron q[u]e hera ido, y fue asi; pero no se como los q[u]e pusieron en estilo aquella relacion de q[u]e se aprovechò Herr[era] se dexaron esto, como en este cap[ítulo] lo deje referido, y otras muchas cosas q[u]e en lo q[u]e se sigue se dirà, por q[u]e aquellas, y otras son carresponsinas, y quien dio razon de lo uno, pudo dar razon de lo otro; aunque pienso q[u]e estuvo el hierro en no hacer estas inquisisiones, o informaciones no mas q[u]e en los españoles, q[u]e entonces vinieron, y no las aberiguaron con los yndios,[214] q[u]e tambien les toca mucha parte a ellos; y aun el todo, pues fueron el blanco a donde todas las cosas de la conquista se asentaron, y son las q[u]e muy bien las supieron, y las pusieron en la historia a los principios, por sus figuras, y caracteres, y espacio q[u]e se supieron escribir; las quales tengo en mi poder, y tengo tanta embidia al lenguaje, y estilo con q[u]e estan escritas, q[u]e me olgara saberlas traducir en castellano con elegancia, y gracia q[u]e en su lengua mexicana se dicen; y por ser historia pura, y verdadera la sigo en todo; y si a los q[u]e la leyeren, paresieren novedades, digo, q[u]e no lo son, sino la pura verdad sucedida; pero no se han escripto h[as]ta ahora, por q[u]e los pocos q[u]e han escrito los sucesos de las yndias, no las supieron, ni huvo quien se las dixese, ni tampoco yo las escribiera, si no las hallara aberiguadas por el P[adre] Fr[a]y Bernardino de Sahagun, religioso s[an]to y grave, q[u]e fue de los segundos q[u]e entraron en la combersion de esta Nueva España, y de los primeros, o el primer imvestigador de las cosas mas secretas de la tierra, y supo todos los secretos de ella; ese ocupò mas de 60 años en escribir lengua mexicana, y todo lo q[u]e pudo alcanzar en toda ella.

 

104. Torquemada, Monarq[uia] Indiana lib[ro] 4 cap[ítulo] 14 p[árrafo] 419 col[umna] 1 hablando de Ketzalcohoatl, dice: fuese huyendo

{f. 64}                                                                                                      64

a la ciudad de Cholula, y allì le sig[u]io, y corrio, y dexando del reyno se fue asi a la mar,[215] fingiendo q[u]e el dios sol le llamava a la otra parte de el mar, por la senda de el oriente; pero prometio de bolver despues con mucha pujanza a vengar sus injurias, y a redimir su pueblo de agravios, y tiranias; por q[u]e decian de el q[u]e hera muy humano, y misericordioso: esta mentira se conservò aquellos tiempos, y se fue reforzando con mucha mayor opinion en todos los q[u]e despues les succedieron; y fue tan creida su buelta de los mexicanos, q[u]e los q[u]e estavan reynando, resebian el reyno con èsta condicion, de q[u]e heran tenientes de su señor Ketzalcohoatl, y q[u]e en viniendo se lo dejarian, y le obedecerian como vasallos.[216]

 

105. Sabida, pues, esta historia, decimos, q[u]e como estas gentes aguardavan a este Ketzalcohoatl, y tenian por muy sierto q[u]e havian de bolver a reynar estos reynos de Nueva España; qualquier demostracion, y amago q[u]e havia de alteracion, y rumor de alguno q[u]e parecia, luego pensavan ser el; y como trujeron las noticias q[u]e dexamos d[ic]ho y mas por la parte por donde vinieron (digo) vieron q[u]e se havia desaparesido, y en navios tan grandes por mar ancho, y peligroso, persuadieronse a q[u]e hera el, y no otro, y por esto pusieron mayor cuidado en la vigilansia de su buelta atalayando el mar, no tres dias en todos los meses de el año, al fin de el qual, como Juan de Grijalva fue a Cuba, y de su hida resultò la venida de Fernando Cortez, por la misma der{r}ota q[u]e el primero, fue fuerza q[u]e los yndios viesen los navios, y con el mandato expreso q[u]e tenian de su rey, fueron por la posta a dar el aviso de ello,[217] llevando pintado el numero de los navios, y la manera de gente q[u]e vieron andar en ellos, lo qual todo mostraron a Moteuhcuma, y con el nuevo aviso q[u]e tubo de esta segunda armada, (que fue por fin de febrero de 1519) hizo junta de los de su consejo, y de otras personas de prendas, y autoridad, y dioles parte de las nuevas q[u]e havian traido los atalayas

{f. 65}                                                                                                      65

de la costa de el oriente, de lo q[u]e de nuevo havia aparesido en la mar q[u]e confirmava las pasadas del año antes, y confiriendo el caso trataron lo q[u]e comvenia hacer; y como quando entraron los magos en Jerusalen, preguntando q[u]e el rey nuevam[en]te nacido, q[u]e se turbò Herodes, y los de su consejo; asì estos yndios de el consejo de el rey turvados con el, y confusos dixeron, q[u]e pues hera verdad q[u]e su dios, y rey Ketzalcohoatl havia hido a los reynos de Tlapala a verse con el dios sol, al qual todos sus antepasados havian esperado q[u]e tambien lo seria, q[u]e hera el q[u]e en los navios havia aparecido, pues no parecia caso humano, q[u]e hombres mortales handuviesen por la mar metidos tan dentro de sus aguas, sin q[u]e huviesen peresido en ellas; y asi creian ser el, pues venia,[218] hera razon q[u]e fuesen personas, y embaxadores principales a darle la obediencia de parte de aquel senado, y a resibirle. De aqui pudieramos inferir q[u]e estos mexicanos tomaron la constumbre de elegir reyes, y no aconstumbrar en su republica q[u]e lo fuesen por herencia: lo qual pudieramos provar, con descir, q[u]e si creian q[u]e tenian rey vivo, y q[u]e en algun tiempo havian de bolver a la pocesion de su reyno, q[u]e no havian de consentir q[u]e otro entrase en su posecion perpetua, sino como los governadores, q[u]e en ausencia de los reyes sirven el oficio como la persona r[ea]l con la limitacion que dice solo el tiempo de la aucencia, estando por estos ya aparejados hacer dexacion de el cada y quando q[u]e venga su natural, y lexitimo heredero.

 

106.Volviendo al proposito, digo: q[u]e determinado Moctesuma de lo q[u]e havia de hacer, ordenaron un gran presente;[219] ahora sea el q[u]e hantes havian llevado a Juan de Grijalva, y q[u]e la huviesen vuelto a hora tal, o mayor q[u]e havia sido el primero; pero lo q[u]e huvo mas fue embiarle con el todas las vestiduras sacerdotales q[u]e decian husava Ketzalcohoatl quando estava en la tierra; q[u]e segun esto hera sacerdote, y rey

{f. 66}                                                                                                      66

como Numa Pompilio e Roma; y aquí se verifica como el sacerdocio, y el reyno ha andado junto en algun tiempo en el mundo:[220] todo esto q[u]e Moctesuma dio de sus tezoros q[u]e llevacen a los q[u]e havian aparesido en la mar, lo embolvieron en mantas ricas, y las pusieron en petacas, y hecho todo esto hablo Moctesuma a los señores que hivan por mensajeros de esta manera; yo compañeros a cumplir esta embaxada a q[u]e os embiamos este grandisimo senado, e yo, no os detengais en ninguna parte, sino q[u]e con toda brevedad posible llegueis a la presencia de N[ues]tro Señor, y Rey Ketzalcohoatl, y decidle: vuestro vasallo Moctesuma q[u]e ahora tiene la tenencia de vuestro reino,[221] nos embia a saludar a Vuestra Mag[esta]d y nos dio este presente q[u]e aquí traemos con las ynsignias sacerdotales q[u]e siempre han tenido en grande estimacion y honra: con este despacho se partieron los embajadores de la presencia de el rey, y significaron su camino, y con la mayor prisa q[u]e pudieron fueron a la costa, a donde ya havia llegado Fernando Cortez con toda su Compañia

 

107.Quando llegaron estos mensajeros a la orilla de la mar entraronce en canoas, y metieron todas sus cargas en ellas, y fueronse a ella, o a los navios de Fernando Cortez, y viendo el estandarte de la capitania fueronse a ella, por pareserles q[u]e alli estaria el señor y rey q[u]e buscavan: los de los otros navios, todos estavan a la mira de lo q[u]e pasava, y como las canoas llegaron a la capitania, hicieron señas los yndios a querer entrar, y los de adentro les preguntaron, q[u]e de donde venian, y quienes heran? y que querian? respondieron q[u]e heran mexicanos,[222] y que venian de Mex[i]co a buscar a su señor y Rey Ketzalcohoatl, q[u]e sabian que estava alli: aunq[u]e los españoles no entendian las palabras, conosieron el intento por las señas, y mara-

{f. 67}                                                                                                      67

villas de su demanda, tratavan entre si el caso, y decian: q[u]e quiere decir esto q[u]e dicen estos, q[u]e aquì esta su rey, y su dios, y q[u]e le quieren veer? esto oyò Fernando Cortez, y el con todos pensaron bien el caso, y despues de haverlo platicado con serteza, q[u]e D[o]n Fernando Cortez se ataviase con los mejores atavios q[u]e tenian y q[u]e le aderesasen un trono en el Alcazar de Popa, donde se sentase representando persona de rey, y q[u]e estando a esa manera entrasen los yndios a verle, y hablarle: hecho esto dixeron a los yndios, q[u]e fuesen muy bien venidos, q[u]e alli estava el q[u]e buscavan,[223] y q[u]e le verian, y hablarian: haviendo oydo esto los yndios juntaron sus canoas a vordo de la capitania, y los de arriba los ayudasen a subir, y metiero{n} dentro las cargas que llebavan, luego q[u]e entraron asentaronse sobre la cubierta, y ataviaronse lo mas galanam[en]te q[u]e pudieron, y desatando sus cargas, pusieron en muy buena orden su presente, hecho esto pidieron licencia pa[ra] ver al q[u]e  buscavan, fueron llevados al Alcazar en donde yà Cortez estava aguardando con la representacion de Mag[esta]d q[u]e diximos, ellos entraron donde con su presente en las manos, y como le vieron en aquel trono, y Mag[esta]d creyendo q[u]e hera su Dios, y Señor Ketzalcohoatl, luego se postraron en tierra, y la besaron, q[u]e hera la adoracion latria con que reverenciavan a sus dioses; y levantandose el q[u]e hiva por superior de todos dixo: Dios N[ues]tro y Señor N[ues]tro seais muy bien venido, q[u]e grandes tiempos ha q[u]e os esperavamos nosotros vuestros siervos, y vasallos:[224] Moctesuma, vuestro vasallo, y teniente de vuestros reynos, nos embia a vuestra presencia, para q[u]e en su nombre os saludemos, y dice q[u]e seais muy bien venido, y os suplica q[u]e resivais este pequeño don, y estos ornamentos presiosos q[u]e husavadeis entre nosotros, en cuanto n[ues]tro rey, y Dios: dicho esto, comenzaron a vestirle con aquellos ornamentos q[u]e le llebavan, pucieronle en la caveza una piesa

 

{f. 68}                                                                                                      68

hecha a manera de almate.., en q[u]e havia mucho oro, y pie[dras] de mucho valor, y un plumero ricam[en]te adaderezado, pucieronle una vestidura q[u]e se llamava xiculli, q[u]e cubre desde la garganta h[as]ta la sienta, y los medios brazos de tela la presiosa, luego le echaron al cuello un collar de piedras preciosas de mucho valor, y hermosura; y de esta manera lo fueron vistiendo de la caveza a los pies,[225] con ornamentos, y vestiduras sacerdotales de gran precio, y estima, añadiendo a los ordinarios del Dios Ketzalcohoatl, los q[u]e heran tambien de el Dios Tetzcaltlipuca, y de el Dios Tlalocatecutli, los quales le pusieron a sus pies; como diciendo en esto q[u]e a ellos reconocian por el mayor de sus dioses; como hacen quando dan algun presente a alguna persona constituida en dignidad: despues q[u]e hicieron esto, dixoles el ynterprete en nombre de Fernando Cortez: pues, no tra[e]is mas de esto para resibirme? a q[u]e respondio el principal de ellos, y dixo: señor, y rey n[ues]tro esto nos dieron q[u]e traxesemos a vuestra mag[esta]d y no mas. Luego Fernando  Cortez mandò a los suyos q[u]e los llevasen al castillo de proa, y los tratasen humanam[en]te y los dexasen reposar, y luego les diesen de comer de las cosas de Castilla con toda venevolencia y cortecia.

 

108. Trataron de espantar e estos mensageros con ponerles grillos,[226] y cadenas, y con disparar la artilleria, desafiandolos para q[u]e luchasen, todo a fin de q[u]e fuesen diciendo cosas espantosas, para q[u]e los q[u]e las oyesen se atemorisasen, y les cobrasen miedo; q[u]e hera el q[u]e los havia de hacer señores de la tierra: durmieron alli aquella noche, y a otro dia de mañana pusieron por obra lo q[u]e el dia antes havian tratado, fueronse a los yndios, y metieronlos en colleras, y echaronles grillos en los pies, y comenzaron a disparar el artilleria: los yndios q[u]e se vieron presos, y combatidos de tanto ruido, y truenos de la artilleria, y olor de la polvora, cayeron sin sentido a tierra

{f. 69}                                                                                                      69

y estubieron por muy gran rato como muertos, y como los vieron asi los soldados, cogieronlos entre los brazos, y sentarondolos les hecharon agua en los rostros, y dieronselas a beber con q[u]e bolvieron de el pasmo, y asombro q[u]e havian tenido: quitaronles las prisiones, y dixoles el capitan Sabidoche q[u]e los mexicanos son muy valientes, y de muchas fuerzas, y muy diestros en el luchar, y q[u]e uno solo basta a vencer, y rendir a diez, y veinte de sus enemigos; por lo qual, para satisfacerme de èsta verdad, y salir de esta duda, quiero q[u]e lucheis con mi gente, para ver su sois mas valientes q[u]e ellos, dio las rodelas, espadas y lanzas; los yndios pobres, y desventurados, q[u]e quando supieron de usar aquellas armas q[u]e les havian dado, estavan con las prisiones y ruido de la artilleria mas muertos, q[u]e vivos; no aceptaron el desafio; pero escusanse de el, diciendo: señor, no es eso a lo q[u]e venemos, ni Moctesuma nos mando q[u]e viniesemos a reñir, ni a provar fuerzas con vuestras gentes, sino q[u]e solo os visitasemos de su parte, y os besasemos las manos, como lo hemos hecho, y si hiciesemos lo q[u]e nos mandais, y nos atreviesemos a tan grande desacato; no solo nos reñiria por ello: sino q[u]e nos quitaria las vidas: a esto replicò el capitan: no teneis q[u]e escusaros con razon ninguna por q[u]e haveis de hacer èsto q[u]e os mando, por q[u]e tenemos noticia de vosotros los mexicanos de q[u]e sois valientes, y haveis de hacer todos vuestros poderios para ofender, y defenderos de los mios: no pudieron acavarlo con ellos; y viendo q[u]e no queran a uno, ni dos a dos, ni de ninguna manera; para esp[e]rimentar sus fuerzas, y destreza en el pelear (para si viniesen con ellos algunas veces a las manos) injuriaronlos de palabras,[227] y los despidieron, diciendo q[u]e heran covardes, y afeminados, y q[u]e fuesen como tales a Mex[i]co q[u]e ellos venian ya a conquistar a los mexicanos y q[u]e a sus manos moririan todos, y q[u]e dixesen a Moctesuma como su presente no les havia agradado, y q[u]e yendo ellos a Mexico

{f. 70}                                                                                                      70

les rovarian quanto tenian, y tomarian para si; si estos supieron lo que se dixeron, o nò, bien se hecha de ver, pues hablaron atiento, no sabiendo lo por venir; ni haviendo hecho cata de la tierra.

 

109.   Con estos temores se entraron los yndios en sus canoas; y tan aprisa, que qualquiera momento de dilacion. Les parecian anuncios, y nuevas tristes de su muerte, y con ella comensaron a remar; no solo los remeros q[u]e para esto llebavan, sino to- {sic} todos, sin diferencia, insitandose, y arrimandose los unos a los otros, tanto pos apartarse, y alejarse de los navios donde tan mal les havia hido; quanto por venir aca a dar cu[en]ta a su rey de lo q[u]e con Ketzalcohoal les havia pasado: con esta prisa llegaron a una ysla llamada Xilanco, donde comieron, y reposaron un poco, y de alli se partieron, y llegaron a un pueblo q[u]e se llama, Tecpantlayacac, q[u]e estava en la rivera, de alli fueron a Cuetlaxta, q[u]e esta a la tierra adentro, aquí durmieron, rogaronles los principales q[u]e descansasen; respondieron: la prisa es tal, por que la embajada q[u]e llevamos a n[ues]tro señor Moctesuma es tal, q[u]e jamas se ha visto semejante en estos reynos; y no es bien q[u]e otro lo sepa primero, y por eso importa no descansar: luego se partieron, turbados, y apresurados, q[u]e en ninguna cosa vebian consuelo, ni en el comer, ni en el dormir, ni les dava contento cosa alguna, hiban suspirando afligidam[en]te y afectuosam[en]te atonitos y angustiados: callavan rodos guardando silencio estraño, y quando se hablavan a solas los otros, decian: havemos visto cosas tan espantosas, y raras, q[u]e son indicio de q[u]e ha de venir sobre nosotros grandes males, y tribulaciones. Pero S[eñ]or Dios quienes seran aquellos y nos han de conquistar a nosotros los mexicanos, que somos los mas temidos, mas poderozos, y antiguos en todos estos reynos? por

{f. 71}                                                                                                      71

q[u]e causa vamos tan angustiados, y atribulados, q[u]e n[ues]tro corazon con golpes q[u]e nos da en el pecho nos dice la pena q[u]e llevamos? yndicio es este de algun gran mal q[u]e se nos aserca. En breve llegaron a esta ciudad de Mex[i]co algo de noche, fueron derechos a palacio, y dixeron a los de la comarca, que diesen haviso a Moctesuma, y q[u]e si dormia lo despertasen, por q[u]e el caso no sufria tardanza, entraron las guardias adentro a decirlo, y quando lo oyò Moctesuma, dixo: decidles que entren acá; sino que se vallan a la sala de la judicatura, y q[u]e allì me aguarden: mando aprestar esclavos, para un sacrificio, se fue a la sala, congregò los de el consejo, y ministros q[u]e hicieron el sacrificio, con cuya sangre rosiaron a los embajadores; esta seremonia husavan cuando venia alguna embajada de mucha importancia en casos graves y nuevam[en]te acaesidos.

110. Despues que fue hecha aquella ydolatria y seremonia de rociar los embajadores con la sangre de los que havian muerto, sentose Moctesuma en su trono,[228] y silla, para oy con Mag[esta]d la embajada, por que segun creia tenia tenia {sic} por aberiguado que hera Ketzalcohoatl el que havia venido, yà aguardava la razon sierta de lo que determinava en orden a su venida. Luego los embajadores postrados en tierra la vesaron (que en su lengua llaman Tlacualiztli, que es seremonia de idolatria, y adoracion) y asi postrados hablò el superior de esta manera: Señor, Poderozo, y Rey N[ues]tro luego que llegamos a la orilla de el mar estos criados tuyos, e yo, vimos dentro de el agua unas casa grandisimas, todas de madera, con grandes artificios dentro, y fuera, las quales andan por el agua honda de la mar como las canoas q[u]e aca n[oso]tros husamos por n[ues]tra laguna, y asequias, dixeronos que estas casas se llamavan navios, y ninguno de nosotros sabra decirlo, ni los diversos oficios, y cosas que en si contienen: entramos en la capitania, heran

{f. 72}                                                                                                      72

los navios muchos, y en cada uno mucha gente, y todos nos estuvieron mirando h[as]ta que subimos, luego procuramos veer al señor Ketzalcohoatl para darle el presente, y mostraronnos en una pieza apartada un señor sentado en un trono, muy ricam[en]te vestido, y señalandolo con la mano dixeron: este es el buscais, postramonos a sus pies, besando la tierra, y adorandolo como a dios, luego le diximos lo q[u]e nos mandastes, y le compusimos con los vestidos, y joyas q[u]e nos distes, y presentamosle lo demas q[u]e llebavamos para darle, y puesto todo a sus pies, nos dieron a entender q[u]e hera poco: aquel dia nos trataron bien, y nos dieron de comer, y de beber un licor bueno, q[u]e llaman vino, aquella noche durminos en el navio, a la mañana quisieron provar n[ues]tras fuerzas, y mandannos pelear con ellos, escusamonos con mucha resistencia: aprisionaronnos, dispararon piesas, que con sus truenos, y relampagos nos espantaron mucho, y caimos como muertos: despues que nos recobramos, y dieron de comer, vimos sus armas, y sus cavallos, y sus perros q[u]e les ayudavan en la pelea, de que nos maravillamos; y seria cosa muy larga, y prolija contar todas las cosas en particular: dicen que vienen aca a conquistarnos, y a robarnos. No sabemos mas; si vinieren aca sabremos lo que quieren, y los que pueden; solo decimos que venimos grandem[en]te espantados, y aterrorizados. Mucho se admiro Moctesuma de lo que los embajadores dixeron, y mudaronsele los colores de el rostro, y mostro muy gran tristeza, y desmayo, asentosele en el corazon q[u]e se havian de veer en muy grandes y trabajos, y afrentas, asi el, como los de su ymperio, y reyno todos movidos de este sentim[ien]to comienza a llorar amargam[en]te y con el todos los que alli estavan, y estas lagrimas, y llanto corrio despues por todos los de la ciudad asi chicos, como grandes: luego comenzaron por la plaza a hacer corrillos, y a llorar unos

{f. 73}                                                                                                      73

con otros, incitandose a este llanto con razones tiernas, y sentidas que se decian los grandes males que amenasavan, y la caida, y ruina que havia de tener, como si ya estubieran en ella, adivinandoles el corazon, lo que despues les sucedió. Handavan todos carizbajos, y llorosos, los padres doliendose de sus hijos les decian: hay de mi, y de vosotros hijos mios, q[u]e grandes males haveis de ver; y lo peor es que lo haveis de pasar, y sufrir! lo mismo decian las madres a las hijas; con otras lastimas que el grande amor, y tristeza les enseñavan: con estas muestras de tristeza pasaron la noche, y el dia todo; y Moctesuma, como mas interesado en el onor, y honra que podia perder lo sentia en mas grado.

 

111. El mexicano que venia de parte de Moctesuma, dio a Fernando Cortez la bienvenida, y luego con mucha gravedad mando tender unas esteras muy ricam[en]te labradas (que ellos llamaban petates) y ensima de ellas mantas de algodón, luego pusieron sobre ellas diversidad de camisas de algodon, y telas de lo mismo delicadam[en]te labradas,[229] entretejidas de plumas de entremados, y excelentes visos, y de muy varios y diferentes colores. Rodelas hechas de varas muy blancas, entretegidas con plumas, y con patenas de oro, y plata, y en otras, perlas menudas como aljofar, (y no se puede decir su artificio, lindura y hermosura) un casquete de madera muy subtil, cubierto de granos de oro por fundir: un capacete de planchas de oro, y campanillas colgando; y ensima asentas unas piedras como esmeraldas: penachos de varias plumas grandes, con los cavos de argenteria de oro colgando: mosqueadores de pluma rica, con mil juguetes y linduras de oro, y plata, hechos por muy subtil y maravilloso artificio: braceletes, y otras armaduras de oro, y plata que husaban en sus guerras con sus plumas verdes, y amarillas entrepuestas: cueros de venados muy adobados; q[u]e no se puede explicar su curiosidad: alpargatas, o sandalias de cuero de venado (que llaman cactli) cosido con hilo de oro, y por suelas una piedra blanca, y azul, cosa preciosa, y muy delgada: espejos hechos de margajita, q[u]e es metal resplandeciente como plata, y tan grandes como un paño, redondos como una vola, engastados en oro, que dexado el valor de el engastes, solo la hechura, y hermosura, se pudiera vender en muy caro precio; y q[u]e se le pudieran presentar a cualquiera rey, y señor grande: muchas mantas, y cortinas delgadisimas de algodon para cama; q[u]e paresian ser mas

{f. 74}                                                                                                      74

mas {sic} ricas que si parecieran de seda y de diversos colores: muchas piesas de oro y plata: un collar de oro q[u]e tenia mas de cien esmeraldas, y muchos mas rubies, y le colgaban muchas campanillas de oro; y otro collar con muchas esmeraldas, ciertas perlas riccas, y la hechura admirable: y otras pezecuelas, como ranas, animalejos, ollas, medallas chicas, y grandes; que sola la hechura, y el primor de el artificio de ellas valia mas q[u]e el oro, y plata: granos de oro por fundir sacados de la minas como garbanzos; y lo q[u]e mas engrandecio este presente, fueron dos ruedas, una de el sol con sus rayos, y follage, y ciertos animales señalados, que pesava mas de 100 marcos: la otra de la figura de la luna de plata, labrada a la manera que el sol, con peso de cincuenta y tantos marcos; y tenian de grueso como un real de a quarto (poco mas) macisas, y de el tamaño de una gran rueda de carreta; todos los q[u]e vieron este presente quedaron suspensos y admirados de tan gran riqueza. Este gran presente embio Moctesuma a Cortes luego que saltò en tierra en la Veracruz con Teutilli a quien havia mandado regalase mucho despues que le embio a saludar, y a resibir (con toda la pompa, aparatos, y demas que aqui se lleva d[ic]ho en esta historia portentosa) por Ketzalcohoatl.

  {adorno caligrafico}

 

{sellos q[u]e dicen Bibliotque Nationale Manuscripts

Colection ENG. GOUPIL A Paris

Ancienne Collection J.M.A. Aubin}

 

 



[1] Itàpoà. Nota: en una hacienda nombrada Santa Maria Meje, q[u]e fue de los yndios Villegas, y hoy de sus herederos, en la doctrina de Xocotitlan, de la jurisdiccion {f. 3} de Yntlahaca, en un ojo de agua dulcisima q[u]e sale por entre unas peñas negras, de piedra muy liza, estan dos estampadas de blanco, q[u]e parecen de cal, y tambien otra figura de un medio cuerpo de gato, y el otro medio una cola q[u]e rodea la peña, q[u]e sera de mas de una vara, cuyas pinturas (hacen q[u]e con mis manos labe muchas veces, h[as]ta  con javon) nunca, porque en mojandolas se pierden; y asi q[u]e se secan estan tan patentes como {f. 4} siempre.  Los yndios viejos de esta hacienda dicen q[u]e siempre las han visto y q[u]e muchos españoles han hecho lo mismo q[u]e yo, pero q[u]e nunca han conseguido borrar d[ic]has manos, ni la figura de el gato, q[u]e se ve tan claramente, q[u]e h[as]ta  los ojos parecen dibujados a pincel; solo Dios sabrá para q[u]e se mantiene esto; y por qué, y quien lo pinto{.}  Meje y febrero 25 de 1736 {rúbrica}.

[2] En la Huasteca o Sierra Alta vi yo otro ojo de agua como este q[u]e se dice.

[3] Camino de S[ant]o Thome milagroso.

[4] Camino de S[an]to Tome milagroso.

[5] Huellas del s[an]to apostol en Parayba.

[6] Señales de el s[ant]o apostol en Nueva España.

[7] Fueronles anunciados los divinos misterios.

[8] Veneraban a la s[ant]a cruz como a dios de la lluvia.

[9] Esclusión de dicho.

[10] No se debe negar la tradicion humana.

[11] Ejemplo notable.

[12] Pruebase el asunto con razones de el d[e]r[ech]o.

[13] Marcos 76.

[14] Greg. In homilli super Mar. 76 Teof. Hug. Card. Catere ibid. Barrad. in Mat. 28 et Marc.76.

[15] Hug.Card. in Marc. 76.

[16] Los apostoles predicaron el ebangelio en todo el mundo en espacio de meno{s} de 40 años.

[17] s.tom.ada. Bernardo pap incap 76. marc s. chrisost. humil 76. sup. Mat. Euthimo, lo. lecty S[an] Greg[orio]. et Teof. sup. Mat 24.

[18] Conducese q[u]e el Apostol S[an]to Tome paso a la America.

[19] Maldot . cornel. alcap. Lorimis.

[20] Otros autores a este parecer.

[21] Profecia notable.

[22] Martin Vicente.

[23] Pedro Correa.

[24] Cuerpos muertos caoas y almadies.

[25] Antonio Leme.

[26] Un vezino de la isla de la Madera, quiere salir a descubrir yslas.

[27] Vecinos de los Azores y rastros q[u]e vieron de el nuevo mundo.

[28] Ysla de las Siete Ciudades.

[29] Navio q[u]e fue a la ysla de la Siete Ciudades.

[30] Diego Tierre.

[31] Viose tierra de el nuevo mundo.

[32] Diego de Velazco la vio tambien.

[33] Los Còrtes reales descubridores.

[34] Noticia de las primeras gentes q[u]e se sabe pasaron a el nuevo mundo antes de Colon.

[35] Negros pasaron a el nuevo mu[n]do.

[36] Ysla de negros.

[37] Opinion de q[u]e españoles poblaron el nuevo mundo en Yucatan.

[38] Hespero, Rey de España poseyo las yslas de Barlobento.

[39] Esperides.

[40] Gigantes havia en el nuevo mundo.

[41] A que aportaron gigantes a la punta de S[an]ta Elena.

[42] Judios pasaron a el nuevo mundo, y poblaron a Yucatan.

[43] Circuncicion husan algunos yndios en el nuevo mundo.

[44] Gentes que aportaron a Panuco.

[45] Llegaron a Tula, y pasaron a Cholula, poblaron a Oaxaca, y a las mistecas.

[46] +{una cruz con la palabra} Ketzalcohuatl.

[47] Yrlandeses pasaron a el nuevo mundo.

[48] Esta Tula, y la venida de estas gentes, y el decir q[u]e heran yrlandeses, tiene correccion con lo q[u]e està notado en la profecia con q[u]e empesamos q[u]e dice Solorzano q[u]e Yrlanda Thule.

[49] Fundose Tula año de 700 de Cristo.

[50] Q[u]e huvo dilubio, la creacion.

[51] Nota: notable fue el descuido de èste gravisimo autor, y s[an]to religioso, puesto q[u]e sabia la lengua mexicana, y q[u]e tambien q[u]e Ketzalcohuatl hera estrangero; por q[u]e siendolo hera o tenia el nombre de mexicano q[u]e no preguntaron; y tambien el no dudar, y preguntar, como tardaron diex años en llegar a Mex[i]co y tambien que viniendo de el poniente, pues apenas havra 720 leguas de la mar del poniente a Mexico.

[52] Moctesuma dice a cortes q[u]e es desendiente de España.

[53] Viajes muy antiguos, y peregrinos.

[54] Eudofo descubrido[r] de la india oriental, vino de Cadiz.

[55] Ysla de S[an] Lorenso.

[56] Nao Victoria.

[57] Los yndios pasaron por mar de unas partes, a otras, y supieron la conosgrafia.

[58] Q[u]e de el nuevo mundo pasaron los yndios a las tierras de Barlovento.

[59] Colon hallo en Jamaica gente de Yucatan.

[60] Yndios de Nueva España, por la mar llegavan h[as]ta adelante de Honduras.

[61] Yndia de Jamaica q[u]e hallaron los castellanos en Cosumel.

[62] La Malinchi.

[63] Yndios en tres ocaciones muestran mapas de mas de 600 leguas de tierra.

[64] Como los yndios muestran a Cortez la tierra h[as]ta Panama.

[65] Como los yndios de Cumana adoravan la cruz en esta forma.

[66] Rastros de la religion q[u]e se hallaron en Yucatan.

[67] Profecia de la venida de los castellanos.

[68] † † † que hizo Chilacambal.

[69] Baptismo que tenian los campechanos.

[70] Ayunaban.

[71] Confesaban.

[72] Creian la immortalidad, y que havia gloria.

[73] Gil Gonzalez de Avila es de opinion, q[u]e algun apostol, o discipulo suyo predicò en Yucatan.

[74] Nota: se comprueva con autores, que S[an]to Tome predicò en el nuevo mundo.

[75] Q[u]e ès gemelo.

[76] Muestrase q[u]e por la s[an]ta cruz se le dio el nombre q[u]e obtiene a la Nueva España.

[77] Quien dixo la primera misa en el nuevo mundo, en la ysla de S[an]to Domingo.

[78] Quien dixo la primera misa en el nuevo mundo de la tierra firme en el Bracil.

[79] Quien dixo la primera misa … en el nuevo mundo.

[80] Como los mexicanos adoravan a el verdadero dios.

[81] Muestra q[u]e en el Perù creian en Dios verdadero.

[82] Trinidad 1. viracocha, 2. sol, 3. trueno.

[83] En ynga en otra junta de s[eñ]ores asentò, y decretò, que ninguno tubiese por deidad imbisible al sol.

[84] Los yndios de Mechoacan creian en  dios verdadero.

[85] Creian q[u]e havia cielo, ynfierno, juicio final, la creacion de Adan, y el dilubio.

[86] Los sacerdotes  traian corona.

[87] Rastros q[u]e se hallaron entre los yndios de el saserdote, su vestidura, dignidad, y otras cosas.

[88] Vestidos de las religiones, y vestidos pontificales.

[89] Manipulo, capa, de asperxes, y mitra.

[90] Abstinencia.

[91] Mugeres continentes.

[92] Ayunaban.

[93] Pobresa.

[94] Rastros q[u]e se hallaron en los chontales.

[95] Tenian kalendarios, predicadores y confesores.

[96] En Yucatan, y Honduras tenian libros y kalendarios.

[97] Rastros, y señales q[u]e dio Ketzalkohoatl en Nueva España.

[98] En Huehuetoca.

[99] En Cuautitlan. [y encima tiene una mano dibujada]

[100] En Tlemaco.

[101] Espejos.

[102] Este lugar, y otro q[u]e se escribe de Yucatan, se colige, q[u]e la ley de dios fuè perseguida, y q[u]e su predicador se fue anunciandoles qu[an]do vendrian quien llevace adelante su doctrina; y q[u]e fuè la venida de los castellanos.

[103] Templo de la madre de dios en Mexico.

[104] Señales de el apostol S[an]to Tome en Nueva España.

[105] S[an]ta Cruz de Guatulco.

[106] El adraque q[u]e quiso quemar la s[an]ta cruz.

[107] Testimonio de el Obispo de Chapa, en que dice, como fueron anunciados a los yndios los misterios divinos.

[108] Cruz q[u]e tenian los yngas.

[109] Un yndio en Cuba predicò a los castellanos.

[110] Los yndios de Cuba tuvieron de Noe y de el dilubio, y q[u]e los yndios desendian de Cam.

[111] Religiosos q[u]e havia en Mex[i]co.

[112] Coronas.

[113] Religiosos q[u]e tenian los tres votos.

[114] Mendigaban.

[115] Penitencia.

[116] Religiosos a modo de dominicos.

[117] Papa como vestia.

[118] Muestrase como los mexicanos celebravan los {f.39} misterios de la pasion. Herr[era] dec[ada] 3 lib[ro] 2  cap[ítulo] 15 § 87 col[umna] 2 dice: tambien hacian dioses de hombres vivos, y hantes de sacrificarle a sus ydolos; ponianle el nombre de el mismo ydolo; no dice lo de este sacrificio, por q[u]e el no tuvo la noticia de el calendario, como Torquemada.

[119] Havia sermon.

[120] Lo q[u]e precedia a la coronacion de los reyes.

[121] Los de Castilla de el òro tubieron noticia de el dilubio, de la virgen, y Jesus.

[122] Rastros q[u]e se hallaron en Nicaragua.

[123] Confesion.

[124] Sarsillos a el huso misteco.

[125] Vezote.

[126] Anillos, caso raro.

[127] Los yndios de el Perù tambien husaban la confesion.

[128] Casos reservados.

[129] Commemoracion de los difuntos.

[130] Yndios barbudos.

[131] Rastros q[u]e se hallaron en Yucatan.

[132] Que de Mex[i]co fueron allì tres predicadores.

[133] Uno de ellos (que seria el maestro) se fue a predicar a otras partes.

[134] Matan p[o]r desonestos a los discipulos, derriban los templos, y apostataron.

[135] Confirma el decir q[u]e de Mex[i]co fuè Ketzalcohuatl a Yucatan, muestrase q[u]e Ketzalcohuatl estuvo en Campeche; y el nombre no es diberso.

[136] Ketzalcohoatl despues de haver fundado templos, y predicado en Campeche vuelve a N[ueva] España. Nota: aquestos predicadores son diferente gente de los que a n[umer]o 9 se escribe q[u]e llegaron alli a el oriente. {ás abajo:}vase lego que Ketzalcohuatl se salio de Yucatan, prevaricaron los discipulos, casandose los sacerdotes.

[137] Tenian escuelas en q[u]e enseñavan las cosas de la religion.

[138] Gentes q[u]e entraron en Yucatan, y edificaron templos, las quales anduvieron 40 años por un destierro.

[139] Totoxius es palabra mexicana totoxius.

[140] Nota: cocomes es lengua mexicana, y dice en plural, culebras, asi como en singular, coatl, y el decir, y llamarse cocomes, aludiendo a el coatl de Ketzalcohuatl, es como decir, de domingo, dominicos. Al cavo de 500 años fue destruida en Yucatan aquella religion q[u]e alli fundo Ketzalcohuatl. Este seria año de 1447.

[141] Vuelve de las partes de Nueva España, otro discipulo en la religion de Ketzalcohuatl, y lleva adelante la religion extinguida.

[142] Sisma q[u]e huvo en Yucatan, es la misma q[u]e a n[umer]o 45 dice de aquellos dos discipulos q[u]e comenzaron a ser parciales.

[143] D[o]n Juan Cocom mostro cumplida la profecia.

[144] En la America havia minas de hierro.

[145] Historia de Zealcoquin, o cerquin.

[146] Piedra trienio.

[147] Muger q[u]e sin conoser varon pario: quien serà?

[148] Creian q[u]e la s[eñor]a se fue a el cielo.

[149] Selebravan fiesta a aquella virgen cada año.

[150] Gran padre y gran madre q[u]e dava salud.

[151] {Dibujo un triangulo en cuyo vertice está la palabra:} Trinitas {y en la base tres inscripciones:} “Apoin… Ti Padre sol[,] Chusijn… Ti hijo sol[,]  Yntiquas… Ti herm[an]o sol. {Un renglón abajo} estatuas de el sol q[u]e representaban el misterio de la S[antisi]ma Trinidad. {un renglón abajo} dice herm[an]o sol, haviendo nombrado primero padre, e hijo, y no dice qual de los dioses hermano, con q[u]e igual grado està esta tercera persona con la 1ª y la 2ª con q[u]e esta 3ª  significa al Espiritu Santo, y todas la S[antisi]ma Trinidad; q[u]e como no tenian letras se las explico asi el s[an]to apostol.

[152] Rastros de haver estado S[an]to Tome en el Perù.

[153] Con tres nombres nombraban a el s[an]to en el Perù.

[154] Levantaron templos, y estatuas y h[as]ta los ultimos yngas le veneraron.

[155] Pruevase q[u]e dos veses havian entrado predicadores en el Peru.

[156] Maravilla obrada en el Perù.

[157] Algunos han d[ic]ho q[u]e el apostol predico en el Peru; y Calancha escribe q[u]e martirizaron alli a un compañero de Santo Tome.

[158] Dec[ada] 5 lib[ro] 4 cap[ítulo] 114 col[umna] 1.

[159] Comienza la historia pintada.

[160] Describe la tierra.

[161] Mitra, baculo, y capa.

[162] Engaño con q[u]e entendieron q[u]e el varon hera embra.

[163] En el trage se conocen q[u]e son christianos.

[164] Dos figuras de hombre, y de muger.

[165] Volador.

[166] Tierra negra; notable testimonio es èste.

[167] Explicacion.

[168] El sol q[u]e està alli.

[169] El pecado de Adan.

[170] Los Misterios de fee q[u]e les fueron enseñados.

[171] En el Perù, Bracil, Nueva España, Yucatan, y Cealcoquin concuerdan en q[u]e el s[an]to apostol tenia grande estatura.

[172] Didimo: coatl.

[173] El B[achille]r Bezerra fue quien descubrio en las historias mexicanas el nombre de el s[an]to.

[174] {Dos palabras horizontales que dicen:} Ketzali Cohuatl {y abajo:} Ketzalcohual {palabras verticales que dicen:} pavon, culebra, mellizo.

[175] Adan echado de el paraizo.

[176] Como pintavan la gracia.

[177] Maria nacida en gracia.

[178] Figura de Cristo.

[179] Cristo padecio por el hombre.

[180] Los fundadores de Cealcoquino no son yndios.

[181] D[o]n Diego de Velasco.

[182] Mixes son forasteros.

[183] Como explican los yndios el nombre de Maria.

[184] A Eva llamaron los yndios muger culebra.

[185] La piedra trina hera figura de el misterio de la S[antisi]ma Trinidad.

[186] Alcansaron q[u]e la virgen pario virgen.

[187] Tuvieron q[u]e la ley de Cristo se predicò en todo el mundo.

[188] Tubieron los yndios q[u]e S[an]to Tome estuvo en Etiopia.

[189] Crueldad husada con un yndio.

[190] Tezcatlipuca dios de los mexicanos.

[191] Creian q[u]e dios perdonava los pecados a los arrepentidos q[u]e hacian penitencia.

[192] Que oia los ruegos de los pecadores.

[193] Que veia quanto se hacia en el mundo.

[194] Q[u]e castigava a los malos.

[195] {En línea horizontal:} Tetzcatl {y en línea vertical:} Dios, resplandeciente o espejo resplandeciente.)

[196] Xaltocan. Arena. Dios. Casa.

[197] Mitlan Teuhtli señor del ynfierno. {y verticalmente:} ynferuz. principe o señor.

[198] Tlacatecolotl. Hombre buoho.

[199] Metl maguey, xiote avispa, comi olla.

[200] Tenochtitlan piedra. tunal. lugar como de carpintero. carpintero.

[201] Chimalpopoca en castellano, rodela quemada asi se llamo uno de los reyes de México {en vertical:} rodela humeante.

[202] Acamapichtli {tres palabras verticales:} caña. mano. picietle.

[203] Por que husavan de media mitra los reyes de Mexico.

[204] Significa el volador.

[205] : La fiesta de el fuego nuevo.

[206] Media mitra.

[207] Nombre de Moctesuma.

[208] Moctesuma tiene haviso de los castellanos.

[209] Dioses llaman a los castellanos.

[210] Recado q[u]e mando Grijalva a Moctesuma.

[211] Llama Moctesuma a consejo.

[212] Moctesuma y sus consejeros se persuaden a q[u]e buelve Ketzalcohoatl, como se lo havia profetizado.

[213] Ojo embia Moctesuma un presente a Ketzalcohoatl, y a ofreserle el reyno.

[214] Queja de los q[u]e escribieron en España las cosas de las yndias.

[215] Refiere la profecia de Ketzalcohoatl, y el cumplimiento de ella.

[216] Como los reyes de Mex[i]co se llamavan tenientes de Ketzalcohoatl; y q[u]e parece q[u]e por eso trayan en la cabeza la media mitra.

[217] Tuvo Moctesuma nueva de la venida de Cortez.

[218] Torquemada infiere q[u]e por q[u]e los reyes heran tenientes de Ketzalcohoatl heran por eleccion.

[219] Embian los mexicanos a Ketzalcohoatl las vestiduras con que anduvo quando estuvo con ellos.

[220] Torquemada le parece que Ketzalcohoatl hera sacerdote y rey.

[221] Lo q[u]e mandò decir Moctesuma a Ketzalcohoatl.

[222] Llegaron los mensajeros a la capitania donde estava Cortez.

[223] Finge Cortez ser el q[u]e buscavan.

[224] Palabras q[u]e dixeron los mensageros a Ketzalcohoatl, prueva como havia muchos siglos q[u]e le esperavan.

[225] Vistieron a Cortez las vestiduras de Ketzalcohoatl.

[226] Cortez atemoriza a los mensageros de Moctezuma.

[227] Respuesta adisparatada q[u]e dio Cortez a los mexicanos.

[228] Oye Moctesuma la respuesta q[u]e traxeron sus mensageros.

[229] Notable presente q[u]e embio Moctesuma a Cortez. Torquemada lib[ro] 4, cap[ítulo] 17 § explicar este simbolo 429 col[umna] 1.