A

DOCUMENTO 171

 

Transcripción paloegráfica:

Brígida von Mentz

 

{f. 00a}

 

Manuscrit Cahier  de 39 pages

In folio

Notice sur le Texas

 

No. 171

 

Volume de 19 Feuillets

Plus le Feuillet A preliminaire

4 Aout 1898

 

{f. 00r}                                                                                                     A

 

         Resumen arreglado a lo que consta de los Autos

[Al centro sello Bibliotheque Nationale R. F. Manuscrits]

que se han formado en este Superior Gobierno de las noticias que

desde el año de 1688, hasta el presente /.../ mes y año se han tenido

de la Nacion Asinay o Texas, sus propiedades y costumbres, y pro

videncias que se han tomado para su reduccion: descripcion de la

Bahia del Espiritu Santo, San Luiz o San Bernardo, y conveni-

encias que resultan de que se pueble por los españoles para evi-

tar que vuelvan a ocuparla los franceses, distancia que hay

de los Texas á la Mobila y peligro que amenaza a esta Nue-

va España, si no se evita que las conquistas de los franceses se

extiendan á las cercanias del Rio grande del Norte por la

parte de Coahuila, y Nuevo Reyno de Leon: y providencias que

parecen mas convenientes para lograr el fruto de la combersion

de dichos yndios, y seguridad de este Reyno, y su comercio.

 

Formado /.../

 

De orden del Ex[celentí]mo S[eñ]or Marques de /la Laguna balero/ Valero Virrey,

de N[ueva] E[spaña] el Asesor General del Virreynato. 

 

Año de 1756

Formado

         [sello  Collection E. Eug. Goupel a París. Anciense Collection J. M. A. Aubin no. 171]

 

En vista de los Autos originales de la materia de Orden

Del Exc[elentísi]mo S[eño]r Marqués de Valero, Virrey de N[ueva] E[spaña] por el A-

sesor General del Virreynato

Año de 1746.

 

{f. 00v}

 

         El siguiente resumen se ha copiado fielmente de los Autos originales

que existen en el oficio de este Superior Gobierno perteneciente al P. Conde

del Valle. Faltan á dichos Autos treinta fojas del principio, y corren desde la

foja treinta y una en la qual comienza el Diario del viaje que de orden

del Exc[elentísi]mo S[eño]r Virey (sic) Duque de Linares emprendió desde la villa de Saltillo

á la Provincia de Texas el capitan Domingo Ramon en 17 de febre

ro de 1746.

         Los demás materiales que componen los referidos Autos hasta la foja

ciento cincuenta y uno en que terminan, son el Diario de la misma

expedicion hecha por los pps. Misioneros de la S[an]ta Cruz de Querétaro y de N[uestr]a S[eñor]a de Guadalupe de Zacatecas formado por el Pr. P. ... Ysidro Felix

Espinosa; varias cartas de los mismos misioneros, y de los capitanes Do

mingo Ramon y Diego Ramon, y las providencias tomadas para otro

viaje en que se nombró de capitan a D[o]n Martín de Alarcon.

         Se halla tambien una copia de este resumen en el tomo veintisie

/te/ la Colección de Memorias p[ar]a la historia de N[uev]a Esp[añ]a pero allí se le

da el título de Dictamen Fiscal, no siendo en realidad sino un resu

men formado de orden del Virrey Marques de Valero, por su asesor

el Doctor Velasco, según consta del Decreto de su Exc[elenci]a que comienza en

la foja ciento once de los mismos Autos.

         Seria extraño buscar en esta obra el por menor de todos los acon-

tecimientos ocurridos en la Provincia de Texas tanto para su descubri-

miento como para su conquista; los procedimientos de los capitanes

debates y discursos de los misioneros, abandono de la misma provincia por

algunos años, ... pues aunque estas particularidades interesan a la integridad

de la historia, estarian demas en un resumen que debe arreglarse á las cons-

tancias que ministran los documentos públicos, y cuyo principal objeto fue

reunir en un solo escrito todas las providencias distadas sobre un asunto has-

ta su tiempo.

         Sin embargo aun en aquella parte no carecerá el lector de alguna satis-

faccion, pero por lo respectivo á los procedimientos y determinaciones del Gobier-

no nada seguramente podra encontrarse mas solemne , más auténtico y

puntual que el presente papel, el no sólo recopila todas las ordenes dadas

por el Gobierno de N[uev]a España para asegurar la Provincia de Texas,

y alexar de su territorio á los franceses, sino que recuerda tambien

Las consultas hechas á su Magestad en el asunto, la Reales cedulas

 

{f. 01r}                                                                                                     1

 

Resumen historico de la Provincia de Te-

xas.

 

Por diferentes noticias y declaraciones, tuvo por

conveniente el Ex[celentísi]mo S[eñ]or Conde de Moncloa Virrey de esta N[ueva] E[spaña].

q[u]e se discurriese en Junta General la providencia mas pronta

a fin de descubrir una población de franceses que se decia (y

aseguraba ser cierto) hallarse cercana al Rio Grande del Norte

á no dilatada distancia de Coahuila; formose la Junta Gene

ral el dia 23, de Julio de 1688. (1) y en ella se determinó que el

Capitan Alonzo de Leon con la gente que conciderara necesaria

y fuera de su satisfacción pasase al descubrimiento de dicha po-

blacion; á este fin se dieron las providencias necesarias, y salió

de Coahuila con los soldados d[ic]ho capitan el dia 23, de Marzo de

689. y el dia 22 de Abril de d[ic]ho año llegó la gente al paraje don-

de estuvo formada la población haviendo caminado para esto desde

Coahuila 133 leguas á diversos rumbos: se certificó el General Alon

zo de Leon, asi por relacion que le hicieron los yndios como por las

declaraciones de dos franceses que hallo haver tenido dicha pobla-

cion con bastante numero de franceses en la cercania de la Ba-

hía del Espiritu Santo en el parage que desmostrava sus fracmen-

tos (sic); y que habiendo tenido amistad con diversas naciones de yndi-

os estos fingiendo juntarse á comerciar los frutos que les daban

sus tierras, lograron que con las confianzas en que vivian los fran

(1)  Antes de este año ya se sabía en Mexico el designio de los franceses de establecerse

en la Costa del Seno Mexicano, y para evitarlo el Ex[celentísi]mo S[eñ]or Marques de la Laguna

virrey de esta N[ueva] E[spaña] despachó á costa de la R[ea]l Hazienda en 1686 al mando del Capi-

tan y Piloto Juan Henriques Barreto, una Fragata p[ar]a reconocer la Bahia de S[a]n Ber-

nardo, y expelir de ella a los Franceses: cuya providencia fue aprobada p[o]r el Rey en su

Concejo Supremo de las Yndias, mandando se repitiesen las diligencias p[ar]a lo mismo a

si lo refiere en su memorial instructivo sobre la demarcacion de la Bahia de Pansacola

el Sabio Americano D[o]n Carlos de Sigüenza y Gongora q[u]e vivia p[o]r el mismo tiempo. De manera

 

{f. 01v}

 

estos se hallasen sin armas, y cogiendolos los yndios los mataron á todos,

robaron y quemaron la poblacion como lo manifestaba estar todas

las casas quemadas, gran multitud de libros arrojados por el campo, mu

chas caxas de arcabuses y algunos cañones de ellos y caxas en que

se conocia haver tenido la ropa, y q[u]e en las rancherias de diferen

tes yndios encontro dicho general bestidos, y otras alajas que se co-

nocia ser de gente de la Europa, y dichos dos franceses que habian

vivido con los Texas y fueron a veer a sus paisanos á dicha pobla

cion, y habiendola hallado destruida se volvieron con dichos Texas

por lo qual costó dificultad el hallarlos como se dirá.

Desde el sitio en que se hallo dicha poblacion arruinada que esta

ba á la orilla de un arroyo y la fundaron y poblaron los france

ses el año de 1684. caminó el General el día 23,, de dicho mes cin

co leguas al sudueste, y descabezados dos arroyos, caminó hacia

el leste otras tres leguas con lo qual llegó a orilla de la Ba

hia del Espiritu Santo, y caminando por la costa el dia sigui-

ente andubieron el Capitan y treinta hombres ocho leguas to-

do por tierra aguanosa llena de lagunas, y atascaderos, hasta

que encontraton la Boca por donde entran las embarcasiones

á dicha Bahia que según la distancia desde la orilla pa dicha

Boca regularon dos leguas y de ancho otras dos leguas cortas.

Hay en la Boca un mogote de tierra mas arrimado á la cos

ta de la Veracruz, que no á la de Florida, y por la Boca

mas pequeña tienen la entrada con mas seguridad las embar

caciones. Entran en dicha Bahia diversos rios, y entre ellos u

no caudaloso que le nombran el Rio de San Marcos. Está se

gun regularon dicha Bahia, en veinte y nueve grados, y tres

minutos, y encontraron en las orillas de ella un navio hecho –

que la entrada de M. la Salle en la referida Bahia hecha en 1684. fue re

sistida inmediatamente por la España

 

{f. 2r}                                                                                                          2

 

quarteles. Dicha observacion la hizo Alonzo de Leon por las Tablas q[u]e ..

nia las quales estaban hechas antes de la correccion Gregoriana y sigui-

endose por las Ephemerides de Andrea Argoli por lo qual no conviene es

ta observacion con la siguiente.

D[o]n Andrés de Pez y Juan Enriquez Barroto el dia 11 de Junio de 1689.

Declararon en esta Corte, que habiendo ido desde la Veracruz a solicitar el

descubrimiento de dicha población de franceses fue descubierta por Alon

zo de Leon la Bahia llamada del Espiritu Santo la qual nombran

los franceses de San Luiz y comunmente se ha conocido por los españo-

les, con el nombre de San Bernardo, desde el descubrimiento que se hizo

de ella el año de 681. en la Boca de esta Bahía observaron hallarse en

28 grados y tres minutos, y en la parte septentrional de dicha Bahía don-

de observaron hallarse en 29 grados (el qual parage está quatro leguas de

d[ic]ha Boca para el Nordeste) hallaron perdido el navio que refiere Alon-

zo de León, y contestan estos mismos haber dos barras para dicha entrada

las quales tienen en el principio mas de once pies franceses: luego qua

tro ó cinco, y todo lo demas de tan poco agua que solo puede navegarse

con barcos, ó bageles mui pequeños.

Supuesta la descripcion de la Bahia del Espiritu Santo, San Luiz ó

San Bernardo, prosigue el descubrimiento que hizo Alonzo de Leon, y este

fue con la noticia que tubo por algunos yndios de que havia quatro fran

ceses entre la Nacion Texas los quales se retiraron con vista del fatal

suceso de los que havitaban en dicha poblacion; y para conseguir que

los referidos franceses le informasen les escribio viniesen á donde esta-

ba y no contento con esto, pasó con alguna gente en busca de ellos; cami-

nando desde el Rio de San Marcos hacie el Norte 25 leguas en cuyo

parage encontró con el rancho y casa del Capitan de los Texas donde

hallo á dos de los franceses que les tenía asistiendolos con lo necesario

y bestidos de pellejos de civolas: observó el Capitan Alonzo de Leon

 

 

 

{f. 2v}

 

que el Capitan de los Texas tenia un oratorio con algunas ymagenes

y lo de mas que se expresará, y habiendo preguntado á los franceses

en que tiempo se hizo dicha poblacion, quien la gobernó y con que

fin; expresaron que habria cinco años llegó á dicha Bahía M. la Sa-

lle con cinco navios para poblar en aquella costa de orden del Rey-

de Francia, que solo trahian gente y bastimentos y que a la  entrada

se perdio uno de ellos por lo qual dieron fondo duera de la Bahia, si

no es una fragata que entro dentro, la qual tambien se perdio con

un norte: que M de la Salle hizo la poblacion poniendo en ella

250 personas, 11 piezas de artillería y 100 soldados pagados p[o]r el Rey

y la demas gente voluntaria con 300 escopetas, 50 barriles de pol-

vora, y otras muchas armas de fuego, espadas, y alfanges y que M.

la Salle hecha la poblacion fue a descubrir el Rio Misisipi, y le ma-

to un artillero yngles: Que el motivo de hacer la poblacion era p[ar]a

comerciar en pieles, y en madera de Brazil: que havia junto la po-

blacion, y contextaron en el suceso referido de la perdicion de d[ic]hos

franceses, y destruccion de su poblacion, y el Capitan Alonzo de

Leon hallo las 11 piezas de artilleria y las dexo enterradas en el

mismo citio donde estaba la poblacion.

El capitan Alonzo de Leon por carta que escribio (al Ex[celentísi]mo S[eñ]or

Virrey de esta N[ueva] E[spaña] q[u]e era el S[eñ]or Conde de Galvez) su fecha 16

de Mayo de 689. informa que el Governador de los Texas le hizo

notables agasajos manifestandole lo mucho que el y los demas yn

dios de Texas deseaban comunicar a los españoles para que los

instruyeses en la fee Catolica que aunque tenian conocimiento

de que hay un solo Dios verdadero, y que la Virgen Santisima es su

Madre, no tienen otra Luz mas, que las que les ha dado una mugér

que en tiempos antiguos los bisitaba y enseñaba; lo qual hay mu-

chos años que no veen; y dice Alonso de Leon que el yndio Go-

 

{f. 3r}                                                                                                       3

 

vernador tenia un oratorio con grande aseo adornado de flores, y un

altar con quatro ymagenes de santos, y una cruz con Santo Cris-

to pintado, y un rosario sobre el altar, y sus ynstrumentos de musica

con que festejaban a los Santos, y una luminaria de dia y de noche

enfrente del oratorio, y que lo saumaban con sebo de benado todas las

mañanas, y que le informó dicho Governador que los Texas tenian

nueve poblaciones donde vivian juntos, y sembraban maiz y frijoles,

calabazas, sandias y melones, y que le pidio el Governador le diese

religiosos para que les enseñase. Que le respondió daria cuenta al

Ex[celentísi]mo S[eñ]or Virrey á quien la dio de haberse ofrecido con grande zelo

El Padre Fray Damian Masanet Religioso de la Cruz de Queretaro, y

que el Governador de los Texas pidio á dicho Alonzo de Leon dejase a

un yndio para que sirviese de guia, á un hermano de dicho governa-

dor, y otros seis yndios de Texas que entrarían á buscarle al Presidio

de Coahuila.

Remitiose este capitulo de carta al S[eñ]or Fiscal quien dixo tenerse

por cierto según varias tradiciones ser la muger que enseñaba, y visi-

taba á d[ic]hos Texas la venerable Sor Maria de Agreda, y que respec

to de que Su. M[ajestad].  Catolica deseaba la conversion de las Almas, y la an-

teponia á todos los Tesoros del Mundo era de pareser pasase á dicha

conversion el Padre Fray Damian Masanet con los compañeros que

eligiese: viose en Junta General en la qual el dia de                 {autor deja espacio  }

se determinó lo mismo, y que fuese con los religiosos el Capitan Alon

zo de Leon llevando soldados que fuesen virtuosos y que no diesen mal

exemplo a los yndios, y que se le previniese a dicho Alonzo, embiase

noticia de los generos que estimasen mas los Texas para remitir

selos.

Respondio Alonzo de Leon que seria necesario formar en el camino

algunos presidios para la seguridad, y en vista de esto y de haber in-

 

{f. 3v}

 

informado D[o]n Toribio Garcia de Sierra, que hasta los Texas se podian

convertir un millon de yndios de naciones mui dociles; que la tierra

era llana amena y fertil abundante de civolas, pescados, gallinas de

la tierra, liebres, conejos, y perdises como las de España, y que los Texas

y Caodachos eran los mas politicos, y que siembran diversas semillas

y que en la tierra de los Caodachos hay castores, y de otro informe del

Yll[ustrisi]mo S[eñ]or Obispo de Guadalaxara, y de una carta de Fray Miguel

Cuberta, y de la respuesta del S[eñ]or Fiscal que dio con vista de todo en 30,,

de Agosto de 1689. y con vista de la noticia que dio Alonzo de Leon p[o]r

otra carta que remitió con otra declaracion de un yndio que llegó á

los Texas y dixo havian poblado unos franceses en tierras de ellos

á los que ayudaban á la poblacion por el buen trato que experimenta-

ban. Que ya tenian hechas tres casas de madera y que ivan a traher

familias. Que pasaban un brazo de mar en casas de madera por don-

de conducian piezas de artilleria, cabras y otras cosas y que algunos

yndios les habian dado nombramientos de Governadores, y armas, y q[u]e

las poblaciones de los Texas estarian un dia de camino á la ligera de

donde Alonzo de Leon encontró al Governador de los Texas y los france-

ses. Que los franceses han intentado por tres vezes poblar en la costa

y que los han muerto los yndios por lo qual se han hido ahora á po-

blar entre los Texas por ser buena gente y que el Governador le dixo

embiaria con brevedad un hermano suyo con otros yndios á rogar á

los españoles fuesen á llevarles religiosos que los enseñasen, Y con la

respuesta del S[eñ]or Fiscal se determino en Junta G[ene]ral el dia 10,, de

Septiembre de 682 que saliese el capitan Alonzo de Leon con los sol-

dados que le pareciese y religiosos á ir reduciendo los yndios que me-

diaban desde Coahuila á los Texas, y que embiase persona á los

Texas que pudiese informarle si era cierto lo que contenia la De

claracion del yndio.

 

{f. 04r}                                                                                                     4

 

Por carta de 19 de Octubre de d[ic]ho año aviso Alonzo de Leon, como llegaron

los yndios Texas embiados de su Gobernador á pedirle fuese con los

religiosos

y que confirmaron la noticia de los franceses, y pedia 110 soldados para la

entrada, y otras prevenciones: respondio el S[eñ]or Fiscal en 9 de Noviembre, que

debía dar gran cuidado la entrada de los franceses, pues aliandose con los yn

dios podian llegarse á juntar con los que son enemigos de los españoles en la

cordillera del Parral y ocupan aquellas provincias y que parecía necesario

ocurrir al remedio y que en el citio onde hizo la población M. de la Sa-

ye se hiciese alguna fortificación y poblase por los españoles para que

estuviese resguardado este Reyno y se impidiese por aquel parage la en-

trada de los franceses. Remitiose á Junta General y en 18 de Noviembre

de d[ich]o año se determinó que habiendo repetidas cedulas de S[u] M[ajestad] para que

á costa del mayor desvelo y caudales se inquiriese si los franceses pobla-

ban en las fronteras y costas de estos Reynos, y que se les echase de ellos,

y concurriendo con esto el peligro que amenazaba, de que tuviesen comunica-

cion con los Texas y se confederasen asi con estas, como con otras naciones

de yndios por lo que prevenia el S[eñ]or Fiscal, y porque la Provincia de los

Texas solo dista de la de Coahuila 230 leguas, y que asi esta Provincia

como el nuevo Reyno de Leon peligraba con la vecindad de d[ic]hos france-

ses, y p[o]r la conveniencia que tenia á S[u] M[ajestad] la amistad con dichos Texas

y que estos se reduxesen a nuestra S[an]ta Fee no debia repararse en gastos

sino en que fuese Alonzo de Leon con la gente que pedia, y llebase los re

ligiosos, para lo qual se diesen todas las providencias necesarias, previ-

niendo que los motivos principales de dicha entrada eran, el primero des-

truir y azolar todas quantas señas pudieran recelarse de la Nacion

Francesa. Lo segundo poder darse la mano y tener propicios á todos los

yndios que estan desde Coahuila á la Provincia de los Texas.

         El dia 26 de Marzo de 690 empezaron su viaje el Gene-

ral Alonzo de Leon con su gente; y misioneros desde el presidio de Coa-

 

{f. 04v}

 

huila, y el dia 22 de Mayo llegaron á las poblaciones de los Texas

donde cortejaron a los españoles, y mostraron gran juvilo en q[u]e hubie

sen llevado religiosos que los enseñasen dexó fundada una mision

con el nombre de San Francisco de las Texas, y embio el Governador

de estos naturales a dos sobrinos suyos para que cumplimentasen

al Ex[celentísi]mo S[eñ]or Conde de Galvez Virrey de esta N[ueva] E[spaña] los religiosos em

biaron al P[adr]e Fray Damian Masanet para que solicitase con su

Ex[celentísim]a embiase mayor numero de misioneros á dicha Provincia

de los Texas, y á las circunbesinas.

         Este viage le hizo dicho General caminando á distintos rumbos

del Norte 206 leguas, y de estas las 146 fueron hasta la Bahia

del Espíritu Santo y las 60 restantes desde dicha Bahía á las pobla

ciones de los Texas, informó dicho G[ene]ral ser la Provincia de los Texas

mui fertil y abundante de parras, encinas, castaños y otros arboles

que los Texas vivian con politica en pueblos, que sembraban frijoles,

maiz, zandias, y melones, que eran aplicados al trabajo, y muy aman

tes de los españoles, que eran muchas las naciones de yndios gen

tiles que havia desde Coahuila á los Texas, y que eran de genios do

ciles. Que quatro franceses habian avisado á los Texas querian

ser sus amigos, y poblar en sus provincias, y que ante de llegar los

respondieron no podian admitirles porque esperaban á los espa-

ñoles. Que en las cercanias de la Provincia de los Texas habia

muchas naciones de yndios y que pedian ministros, algunas de

ellas, para que los enseñasen la Doctrina Cristiana. Que habia

encontrado dos franceses de corta edad y una francesa que teni

an cautivos en una Nacion de yndios llamados Caocosi cerca de

la Bahia del Espiritu Santo, y que no habia encontrado otros fran

ces, si no es á los expresados, y á otro que embiaba llamado Pe-

dre Muní el qual declaró lo mismo que los dos franceses raia

 

{f. 05r}                                                                                                     5

 

dos que se cogieron quando se fue al descubrimiento de la Bahia del Espi-

ritu Santo de la qual declaro D[o]n Gregorio de Salinas que á la entrada

de ella vio dos baias que habrá desde la entrada del Rio de San Marcos a

la mar diez ó doce leguas; que por la parte del norte entra en ella el

Rio de San Marcos, por la de el sur, tres arroyos, por la del poniente el

Rio que llaman de los franceses: y por cerca de la entrada del Rio llama

do Guadalupe que está en 29 grados.

         El padre Fray Damian Masanet, comisario, para la solicitud de

misiones informa, en 16 de septiembre de 690 que desde Coahuila á los

Texas son muchas las Naciones que se encuentran, y admirable la

tierra para fundar misiones, y los yndios dociles, las Naciones son

las siguientes: Masapas, Tacagüistes, Parchaques, Mescales, Yoricas, Chomenes, Sanaque, Sanaiau, Apis Paachiquis, Pastables, Paac, Patcal,

Papanacas, Chaguanes, Payauan, Patsau, Patabo, Sampanaley, Paqua-

Chiams, Putaay, Manico, Geier, Atafal, Tilpapay, Cabia, Semoman,

Saracuam, Pulacman, Asau, Toaa, Toho, Emat, Caba, Sampanasiu,

Apaspam, Manam, Chaguantapa, Muruam; estas naciones estan en

el camino, desde Coahuila á los Texas, como se van siguiendo en la for

ma que se refiere, y junto á los Texas hay otras muchas Naciones;

representó dicho Religioso eran necesarios 14  religiosos sacerdotes, p[ar]a

ir reduciendo tanto numero de gentiles, y que los Texas y Caodachos e-

ran los mas politicos, y de aplicación al trabajo, inclinados á los espa-

ñoles, y que deseaban doctrineros que los enseñasen, que el citio mejor

para formar una mision era en las cercanias del Rio de Guadalupe

por lo fertil de las tierras y facilidad de sacar el agua para benefi-

ciar los sembrados que podian hacerse en sus orillas. Que en la Pro-

vincia de los Texas no convenia hubiese soldados y que seria mui

importante se enviasen oficiales de carpinteros, albañiles, y otros

para que enseñasen a aquellos yndios, y que se diese ordena los solda-

 

{f. 05v}

 

dos que fuesen para guarda de los religiosos no entrasen en las ca-

sas de los Texas por las maldades que se experimentó hicieron en la

otra entrada. Que convendrá embiar algunos muchachos para q[u]e

se criasen entre los Texas, y con la educacion de los religiosos p[ar]a

q[u]e tomasen amor a aquella Tierra, y los Texas les adquiriesen

mayor cariño pues se habia visto que á dos francesitos que teni-

an, los querian y cuidaban mas que si fueran sus hijos.

         En Junta General que se celebró en 6 de octubre de 1690 se deter

mino fuesen los 14 religiosos, y que se formase una mision en

las orillas del Rio de Guadalupe, y las demas en otros parages, y

que los soldados que fuesen, se procurase supiesen oficio.

         En Junta G[ene]ral de Hazienda de 28 de Noviembre de 1690

se señaló 2500 pesos de sueldo al cabo q[u]e habia de ir mandando

los soldados para dicha entrada.

         Por Decreto de 11 de Septiembre del mismo año, mandó el

Ex[celentísi]mo S[eñ]or Conde de Galvez se aprontase una fragata que fuese

comandada por D[o]n Francisco de Ramos, á fin de descubrir y son-

dear nuevamente la Bahia del Espiritu Santo para que se reco-

nociese si en ella podia fortificarse, y por este medio socorrer con

facilidad á los religiosos y soldados que estuviesen en la Provincia

de los Texas: se aprontó la embarcación, y salio á 12 de Octubre

de dicho año del Puerto de la Veracruz y navegando á diversos

rumbos, llegaron á dicha Bahia el dia 24 de dicho mes: sondea

ron la entrada y hallaron que en baxa mar tenia 18 palmos

y en plena mar 24 dentro de la barra hay tres brazas, y en par

tes quatro y en otras, siete; y dentro junto á la Ysleta de Arena

es el mejor surgidero y mas abrigado y tiene brazas, y en di-

cha ysleta se puede hacer fortificacion, aunque esta, no cubrirá

la entrada de otra barra que está hacia el Norte; la qual tie-

 

{f. 06r}                                                                                                     6

 

ne en su entrada 8 palmos de fondo y reconocieron que el citio mexor

para poblacion es en el que la tuvieron los franceses.

         El dia 10 de Abril de 1691 se mandó cumplir y guardar una

Cedula de S[u] M[erced] su fecha en Madrid á 20 de Septiembre de 690 en que

Manda se fomente y solicite la conversion de los yndios Texas, y Naciones circunvecinas embiando los religiosos necesarios, y dando las provi-

dencias convenientes, y el dia 16 de d[ic]ho mes de Abril se dio cumplimiento

a otra cedula de S[u] M[ajestad] su fecha en Madrid á 27 de Mayo de 690 en que mando S[u] M[ajestad] lo mismo.

         No consta en el Superior Gobierno el éxito que tubo la costosa

jornada que executó D[o]n Domingo Teran en compañía de los religio

sos misioneros que se embiaren á los Texas, y solo constan los exesivos

gastos que se hicieron: y que por considerarse padecian los religiosos

graves necesidades se determinó pasase con 20 soldados D[o]n Gregorio de

Salinas Governador de Coahuila á llebar bastimento y lo demas nece-

sario á dichos religiosos y á los 10 soldados que quedaron para su res-

guardo.

          En 3 de Julio de 693 se dio cumplimiento á una Cedula de S[u] M[ajestad]

su fecha en Madrid á 30 de Diciembre de 692 en la qual da a S[u] M[ajestad] gra-

cias al Ex[celentísi]mo S[eñ]or Conde de Galvez de lo que se habia aplicado á fin de

que se reduxesen los Texas y Caodachos á nuestra Santa fee: y man-

da S[u] M[ajestad] que con toda eficacia, y sin perder tiempo alguno se deen todas

las providencias conducentes para la conservacion y aumento de dichas

misiones para la grande importancia y utilidades que incluye dicha

expedicion.

         El dia 3 de Mayo de 693 dio principio á su viaje D[o]n Gregorio

de Salinas desde el Presidio de Coahuila; y llegó á la mision de S[a]n

Francisco de los Texas el dia 8 de Junio habiendo caminado por dis

tintos rumbos 225 leguas y salió de los Texas para Coahuila el dia

 

{f. 06v}

 

14 de dicho mes y entró en Coahuila el dia 17 de Julio, habiendo

caminado en su tornaviaje 213 leguas, y las naciones que encontró son

las siguientes. Cacastles, Ocan, Piedras Blancas, Pachuaches, Sachuaches

y Tepachuaches, Jumanes, Suanes, Cantunes, Saquitas, Morbanas, Paya

yes, Mescales, Apes, Cacafes, Toricas; y entre el Rio de San Marcos, y el de

Guadalupe una rancheria de yndios Texas.

         Por carta del Padre Fray Damian Masanet Comisario de los Te-

xas la qual remitió con una consulta, y es la fecha de una y otra de

14 de Junio de 693 consta lo siguiente. Que el año de 92 padecieron

aquellos naturales, los religiosos y soldados muchas ambres, por que hu-

vo epidemia general desde el mes de Mayo al de Noviembre en la qual

murio un religioso, y que de las bacas que tenian las misiones, se le-

vantaron las mas, y se metieron en las montañas por haberlas flecha-

do los yndios de la costa, y que la cavallada se haogo la mas de ella en

una abenida. Que sembraron los religiosos dos cosechas de maiz y trigo, y que

la una se perdió por mucho agua, y la otra por seca: y que el trigo llegó a espi-

gar pero le dio la misma enfermedad que ocasionó la falta de cosecha en

la Nueba España. Que parte de los misioneros los embiabacon D[o]n Grego-

rio de Salinas y que los 10 soldados se quedan forzados por decir era corto

el sueldo, y que estaban con mudho riesgo entre tantos yndios gentiles, y asi q[u]e

S[u] Ex[celenci]a tomase la providencia mas conveniente.

         Por la consulta de d[ich]o Religioso consta los siguiente. Que no habian

querido los Texas juntarse ni asistir á la Doctrina Cristiana ni á rezar.

         Que tienen unos yndios llamados Cona, los quales son sus curande-

ros, y estos les dicen no se bautizen por que les mata el agua que les echan

los religiosos, y aunque algunos moribundos hizo Dios el prodigio de que sa-

nasen luego que se bautizaron no por esto dexan de creer el expresado her

ror.

         Que algunos que murieron y se habian bautizado, no permitieron

 

{f. 07r}                                                                                                     7

 

los otros que se enterraran en sagrado, sino es que ellos los enterraron á

su modo metiendoles en la sepultura, comida, y otras cosas que ellos usan,

porque dicen que va á otra tierra, asi el cuerpo como el alma.

         Que juzgan los Texas tienen los españoles un Dios que les daa cuchillos

ropa y lo demas que ven á los españoles, y que si Dios es otro, y que este no

les daa á ellos mas que frijoles, y los demas frutos que cogen, y que por donde

sale el sol, es el camino que ellos tiene para subir al cielo, y que el cielo

lo hicieron sus antepasados, y para hacerlo pusieron un cerro mui alto que

está más alla de los Caodachos, y que desde dicho cerro fueron poniendo la

mitad de la tierra en lo alto, y que esto es el cielo, y que alla siembran ma-

iz y todo los demas.

         Que habiendole dicho los misioneros al Governador de los Texas, los lla-

mase para que aprehendiesen la Doctrina Cristiana, no lo executó si no es

que se ausentó por mucho tiempo y dixo á los yndios que los españoles los

engañaban.

         Que habiendo cerca de quatro años que estaban los religiosos misione

ros dentro de los Texas, estos, además de no reducirse a nuestra Santa Fee,

habian hecho diferentes juntas para quitar la vida a los religiosos

y a los soldados, y el año de 692 ayudaron á los yndios de la costa, p[ar]a

que urtasen y matasen para de la cavallada.

         Que no se podrán costear los exesivos gastos de mantener dichas misio-

nes habiendo de embiarse los socorros por tierra, y que la de los Texas

es buena para sementeras, ni los pastos son buenos para los ganados.

Que solo fueran utiles las misiones y mesos costosas, si los Texas quisie

ran reducirse á nuestra Santa fee, y se buscaran otros parages donde fun-

dar las misiones, pero que esto no lo executarian los Texas, asi por no de-

jar su tierra, como porque no los han podido reducir á que vivan jun

tos en pueblos aun en su misma tierra, y por aborrecer á los misio-

neros.

 

{f. 07v}

 

Que aunque los religiosos pudieran esperar algun fruto, este le impi-

den los soldados los que le dan mal exemplo á los yndios y cada dia

los yeren, y maltratan por quitarles á sus mujeres.

         Finalmente propone el Padre Fray Damian que son necesarias tres

cosas para conseguir el fruto de las misiones, la primera que hai-

ga numero bastante de soldados para que los respeten, la segunda bus

car parajes donde fundar las misiones que sean proporcionados para

sembrar de regadio, la tercera que vivan los Texas en pueblos.

La carta y consulta con la respuesta del Fiscal de 19 de Agosto de dicho

año, se vio en Junta General el dia 21 de dicho mes, y se determinó se

volviesen dichos religiosos, y soldados; y que cerca de Coahuila reconocie-

sen, si habia algun paraje donde fundar mision, y que se quedasen

en ella procurando conservar correspondencia con los Texas para si en

adelante Dios los moviese, é abrazar nuestra Santa Religion.

Por carta escrita desde Coahuila su fecha 17 de febrero de 692 da cu

enta al Ex[celentísi]mo S[eñ]or Conde de Galbez , el Padre Fray Damian Masanet

de que tubo noticia por un yndio mexicano que se habia criado en-

tre los Texas de que estos tenian avisados á otras Naciones de yndios lla

mados Neasonit, Natcau, Yatas, Caodaches, Nachetoos natsoos, y á los

franceses que estaban poblados cerca de dichas Naciones, para que

viniesen e acompañarlos y quitar la vida á los religiosos, y que el

mismo yndios le dixo que de los mismos soldados habia complices en

el delito. Estas noticias las confirmó el Governador de los Texas que

llamó al cabo de los soldados y le dixo que ya los yndios estaban enfa

dados de los españoles, y asi que se fuesen á sus tierras, y al mismo ti-

empo los yndios Texas flechaban los cavallos de los españoles, y dicien

doles los religiosos que para que los herian? Respondian, que para que

vieran los españoles no los temian; y viendo esto los religiosos, y que

 

{f. 08r}                                                                                                    8

 

se iban juntando muchos yndios llamó el Padre Fray Damian al go-

vernador de los Texas y le preguntó que si era cierto estaban cansados de los

españoles? y le respondió con gran desembarazo que todos los Texas estaban

enfadados de los españoles y que muchas veces le habian dicho los echase de

su tierra; con esto determinaron los religiosos salir de entre los Texas,

la noche del dia 25 de octubre de 693 sacando solo son ornamentos, y dexan

do enterrados los pedreros, campanas, y otras cosas de hierro. Aquella noche de los dies soldados se volvieron dos á vivir entre los Texas, y supieron los

re-

ligiosos que dichos soldados, luego que llegaron á los Texas, desenterraron los

pedreros y campanas y demas alajas y los repartieron entre los yndios, y des-

de el Rio de San Marcos se volvieron otros dos soldados, y se fueron á vivir

entre los Texas, porque como gente sin obligaciones, y entregada al vicio

de las yndias, querian mas vivir con ellas que entre catolicos.

El año pasado de 715 llegaron á esta corte D[o]n Luis de San-Dionis, y D[o]n Medar

Yalot, de nacion franceses, los quales hicieron su viage desde la Mobila ó

Luziana al Nachitoch, y desde los Nachitoches á los Texas y desde estos al

Presidio del Rio Grande que está al cargo del Capitán Ramón, y por tierras

de S[u] M[ajestad] Catolica llegaron á esta corte, según parece por el mes de junio,

y en declaracion que hicieron, la qual traduxo D[o]n Gerardo Moro, expre-

saron que dicho D[o]n Luis se hallaba Capitán por el Cristianismo en un

presidio llamado Pormosieus de la Mota, Cadillac Governador de la Mobilé

le dio comisión para que pasase al Rio Roxo á donde le pareciese, con 24 sol

dados canadinos, y los yndios salvages que eligiese, y buscase la mision del

Padre Fray Francisco Ydalgo Religioso de la Cruz de Cretano, á fin de que

por este medio comprase bueyes, cavallos, y otros ganados para la Provin-

cia de la Luziana; y que dichos franceses salieron de la Mobila, al Pre-

sidio de San Juan, y caminaron quarenta leguas por el Rio Misisipi,

al oueste, (sic) y desde dicho Presidio caminaron por dicho Rio otras quarenta le-

guas al norte y llegaron al Rio Roxo, desde el qual caminaron por él,

 

{f. 08v}

 

80 leguas al oueste hasta Nachitoch, y despues caminaron por tier

ra 40 leguas al suroeste, y llegaron á los Texas y continuando su via

ge caminaron por tierra desde los Texas siempre al Oueste, y Suru-

oeste 120 leguas al Presidio del Capitan Ramon, y que la Nación Na-

chitich tiene comercio con los franceses de 14 años á esta parte, que

es gente politica, y que los Texas son 11 pueblos, que el principal se lla

ma Asinay, y sus agregados, Navenacho, Nacao, Namidy, Nacocodoch

Aenay, Nacadoco, Nazori, Nacitos, Anacoto, Codosadocho, en los quales

hay algunos naturales que se conservan en nuestra Santa Fee, y Re

ligion, como lo es su governador Bernardino. Que la tierra es mui

fertil, y por la comunicación que tubieron con los españoles, la tie-

nen bien cultivada. Que hay muchos generos de frutos, mucha a-

bundancia de ubas, y los rasimos de 28 y 30 libras cada uno, los cam

pos bestidos de admirable cañamo, y que sus morados les encargaron

solicitaran en los dominios de S[u] M[ajestad] Catolica fuese el Padre Fray Francisco Ydalgo, y otros misioneros, y el capitan Urrutia (a quien estiman

mucho los Texas) que se extiende dicha Nacion quarenta leguas al

Norueste, y que vieron minas de plomo, y que á la parte del Sur

Hay muchas Naciones, amigas de los Texas. Que desde dicha Nacion

se volvieron 21 de los soldados. Que de los ganados que dexaron los es-

pañoles se han aumentado á millares, asi las bacas, como los cavallos

de los quales estaban llenas las Campana(sic), y que dicho San Dionis ha-

bia hecho otro viage diez años ante en la forma siguiente: desde la

Mobila p[o]r tierra, a los Chacta (que son 32 Pueblos compuestos de

180 hombres al rumbo del oueste noruest) cincuenta leguas, y

desde estos a la Nacion que llaman Nache compuesta de once pue

blos al rumbo del oueste quarta norueste treinta leguas, y estas

dos Naciones estan debaxo del patrocinio de S[u] M[ajestad] Cristianisima como

 

 

 

{f. 09r}                                                                                                     9

 

lo estan otras Naciones, lo qual se entiende en quanto al comercio; des-

de Nache camino al rumbo del surueste, quarenta leguas, y llegó á Na

chitoch, pasó por los Texas, y llegó al Presidio del Capitan Ramon, y

el último viage de trecientas veinte leguas, la mitad por agua, y la

otra mitad por tierra. Esta declaracion pasó al S[eñ]or Fiscal, en 22 de

junio del año pasao quien expresó en su respuesta de 15 de agosto de

dicho año, que era de notable perjuicio reconociesen las entradas a los do

minios de S[u] M[ajestad] dichos franceses, que esto seria con el animo de introdu

cir sus generos. Que era necesario dar providencias para evitar seme-

jantes introduciones, por ser tan contrarias á las leyes de este Reyno y

repetidas cedulas de S[u] M[ajestad] Que parecia conveniente para obiar semejantes

entradas, que se diese providencia, á fin de que el Padre Olivares, el Padre

Fray Francisco Ydalgo, y otro religioso pasasen a los Texas resguardados

de veinte ó veinte y cinco soldados; con lo qual respecto del añor que tie-

nen los Texas a los españoles, y lo que desean vivir en nuestra Santa Re-

ligion, se lograba este fruto, se cumplia la voluntad de S[u] M[ajestad] manifestada

en las cedulas del año de 1690 y 692 y que respecto de lo que aman a los

españoles, y de las Naciones que tienen en su amistad, se podrian impedir

las entradas de los franceses, y reconocer sus poblaciones: se remitio en Jun

ta General, y en 22 de agosto de dicho año se determinó en ella; fuesen los

veinte y cinco soldados con un cabo, y que se fundasen quatro misiones, que

inquiriesen las poblaciones de  los franceses, y que se diese cuenta á S[u] M[ajestad] pro

hiviendo por orden que se despachase á los governadores del Parral, Nuevo

Reyno de Leon de Galicia, y de Coahuila, las introduciones de generos, y

que á los franceses se les diese ganados.

Se pagó un año adelantado a los soldados, y se les dio á los misioneros para

cada una de las misiones, seis rexas, seis azadones, seis hachas, dos azuelas

dos sierras, quatro escoptos, dos martillos, ocho yuntas de bueyes, seis cargas

de frijol, cincuenta fanegas de maiz y costales para llevarlos, y se pa-

 

{f. 09v}

 

go el flete, y el dia 30 de septiembre nombró el Ex[celentísi]mo S[eñ]or Duque de Lina

res por cabo principal al Alferez Domingo Ramon, señalandole qui-

nientos pesos de sueldo, y a D[o]n Luiz de San Dionis otros quinientos, con

el titulo de conductor, y á los soldados á quatrocientos pesos.

Se advierte que la patente dada por M. de la Mota a D[o]n Luiz de San

Dionis fue en 11 de septiembre de 713 y por carta que escribio D[o]n Gre

gorio de Salinas Governador de Panzacola su fecha 29 de agosto de

713 participo al Ex[celentísi]mo S[eñ]or Duque de Linares que habian salido de la

Mobila 22 franceses, y 50 yndios con seis piraguas cargadas de mer-

cancia, para introducirla en la N[ueva] E[spaña] y que esto era de gravisimo per

juicio á la Corona de S[u] M[ajestad] asi por que podian apoderarse del Nuevo

Reyno de Leon, y Provincia de Coahuila; y por carta, su fecha 20 de oc-

tubre de 715 daa noticia dicho D[o]n Gregorio de que los franceses fue

ron publicando á la Mobila, que habian llegado á la Provincia de

Coahuila, y que llebaron gran cantidad de ganados, y juntamente

avisa que el cabo comandante de dichos franceses se llamaba S[a]n

Dionis, esta advertencia es para lo que despues se dirá.

Por carta que escribió Domingo Ramón su fecha 17 de marzo de este

año avisa que salio habiendo formado su Compañía el dia 17 de fe

brero desde la Villa del Saltillo, y que dexo en ella seis soldados p[ar]a

que comboyasen á los religiosos hasta el Rio Grande; y que lleba-

ba quatro soldados con sus mujeres, y que de los solteros se le huye-

ron dos el dia 15 de marzo: se estubo dicho Domingo Ramón, y la

demas gente en el Presidio del Rio Grande, hasta que llegaron los

misioneros, y se juntaren con dichos soldados, y M. de San Dionis

y otros dos franceses, y salieron empezando su viage para las Texas

el dia 25 de abril de este año y habiendo tenido algunas detencio-

nes en el camino llegaron a los Texas despues de haber camina

do 183 leguas el dia 23 de junio: salieron á recibir á los religio.

 

{f. 10r}                                                                                                     10

 

sos, y españoles muchos de los yndios Texas camboyados y capitaneados p[o]r

D[o]n Luiz de San Dionis, hicieron varias demostraciones de alegria, y ofrecie

ron la buena correspondencia que operaban los españoles; y uno de los Te-

xas hizo un razonamiento en que manifesto quanto habian deseado que

fueran los misioneros y españoles, y el gusto con que los recibian. El capi-

tan Diego Ramon los regaló en nombre de S[u] M[ajestad] y les dixo nombrasen Go

vernador, como lo hicieron, a el qual dio un Baston en nombre de S[u] M[ajestad]

y despues se buscaron citios para fomentar las misiones quedando al car

go del Padre Margil pasar á poner la suya en las cercanias de Nachi-

toch. Ynforman los religiosos ser amena y fertil la tierra, y que hay

abundancia de ubas, nueses, castañas y otras frutas. Que siembran

maiz, frijoles, melones, y zandias, cultivando la tierra con las quija-

das de los venados, y que se habrian juntado el numero de personas

de los Texas, y que ofrecian juntarse en pueblos luego que cogiesen su

cosecha: que es Nacion habil, que tienen sus casas de madera, duermen

en camas altas, y que tienen las casas con mucha limpieza. Que guardan

en chiquihuites las nueses y maiz para que no les falte:que tienen

grande hermandad y concordia, que trabajan en comun, y á los que

estan enfermos los cuidan sus milpas, y al que se le acaba su provision

le socorre el mandón yendo pidiendo á los demas que tienen; y que lo-

que se le dio al Governador lo repartio todo sin quedarse con cosa alguna.

Que en dicho paiz hay abundancia de cañamo. Que á los religiosos y

soldados les dan del maiz y frutas que tienen, y les muestran mucho

agasajo. Que andan bestidos de pieles de cíbola de las quales hacen

mui buenas gamuzas. Que las mugeres aunque sean de mui corta e-

dad, andan con decensia, cubiertas de dichas gamuzas. Que tienen algu

nos cavallos, y que en los montes hay alguna porcion de ganado bacu-

no alzado. Que tienen algunas escopetas francesas, y abalorios, y algu-

 

{f. 10v}

 

nos pedazos de paño azul de buena calidad. Que 60 leguas de

los Texas dicen que tienen los franceses una casa donde hay qua

tro ó seis. Todo esto contextan conformes los religiosos y el Capitan

Ramon, quien avisa, lo bien que habia procedido D[o]n Luiz de San

Dionis, y que dicho Capitan Ramon, quien saldria con brevedad á

reconocer aquellas fronteras; y el Padre Fray Felix de Espinosa

dice, que dichos Texas tienen de barro todo lo necesario, y asientos

mui curiosos de madera, y que lo que habian notado los religiosos,

es, que costaria gran solicitud y trabajo, desarraigarle las abucio-

nes que tienen, pues apenas dan paso que no sea dirigido de par

ticular, y todos los misioneros claman, se les socorra con lo necesario

para su manutension, por hallarse tan distantes, y teniendo

padecer graves necesidades, y el Capitan Diego Ramon, manifies

ta esto mismo diciendo, es preciso para que se mantengan las mi

siones, que se añadan otros veinte y cinco hombres, y que unos y

otros tengan quatrocientos cincuenta pesos de sueldo, por la su-

ma distancia, y hallarse cercados por la parte del Norte, de

enemigos de los Texas, como son los Apaches,. Yojuanes, Cubipanes,

y Canas. Y que se asignen 6000 pesos en cada un año, para regalar

á los yndios, y atraher á otros. Y que á los religiosos se les asigne lo

necesario: y que de los 64 bueyes para las misiones, solo llegaron

34 por que los demas se murieron y otros se cansaron. Y por carta

avisa dicho Domingo Ramon que los Texas tienen algunos pedazos

de paño azul y colorado, algunas casacas hechas, y abalorios de colo-

res que les han dado los franceses en trueque de caballos; y que unos

yndios Nachitoches le dixeron, que en su tierra era donde tenian

los franceses la casa, que distaba de alli, 60 leguas, y dice pasará á

reconocerla, y finalmente, asi el Capitan Ramon como los religiosos

manifiestan grandes esperanzas de que se logre mucho fruto, asi p[ar]a

 

{f. 11r}                                                                                                     11

 

el servicio de Dios como para el de S[u] M[ajedstad] Catolica.

El Padre Fray Antonio de San Buenabentura Olivarres en el informe que hace

por escrito á V[uestra] E[xcelencia] en esta Corte, afirma q[u]e la Tierra desde el Rio Grande á los

Texas, es mui fertil y amena. Que en ella se hallan abundancia de parras

Nogales, algunos castaños, selbas, y abundancia de moredas (sic) de admirable

calidad para  criar seda y mucho cañamo; muchos venados, y civolas, galli-

nas de la tierra, perdices como las de España; mucha pesca en los rios. Que

encontró en el viage que hizo á los Texas, hasta cincuenta naciones de yn

dios, todos de genios dociles, inclinados á los españoles, y a nuestra S[an]ta Fee: que

en las costumbres se diferencian poco, y que no les observó tubiesen el pecado

de la ydolatria formal, sino es que solo tienen algunas abuciones, y que hay

entre ellos, algunos echiseros. Que asi los Texas como los demas, no usan del

pulque, ni de otras vevidas, sino es una que llaman peyote, de la qual u-

san en sus bailes, y esta vevida les hacer ver algunas viciones ó fantasmas

y que por ser dichos yndios de natural docil y agradable se puede conse-

guir mucho fruto, y que por tener conocido dicho religioso á diferentes yn

dios, y que estos se reducirán á poblacion luego que le vean, y por tener re

conocido un citio admirable p[ar]a fundar una mision de 4000 yndios

en las orillas del Rio de San Antonio y Guadalupe que está entre la Ba

hia del Espiritu S[an]to, y la Provincia de los Texas; y que no duda juntará

con brevedad mas de los 4000 yndios por hacer el servicio á Dios, y á S[u] M[ajestad]

Catolica en medio de su mucha edad se ofrece, para que considerandose

Por conveniente si fuese del agrado de V[uestra] E[xcelencia] se le encargue al Prelado

del Colegio Apostolico de la Cruz de Cretano, le permita ir á tan impor-

tante fundacion.

Las noticias que he adquirido, asi por cartas que han escrito los religiosos

á sus prelados y amigos como de personas fidedignas unas que trataron de

confianza a D[o]n Luiz de San Dionis, y otras que han pulsado las proprie

dades (sic) de los yndios Texas, y tienen ciencia de lo fertil de su tierra, y en

 

{f. 11v}

 

especial habiendo examinado con todo cuidado al correo que embio el

Capitan Domingo Ramon, como persona que se halló en el recibimien

to de los Texas, y experimentó, y vio lo que hay en dicha Provincia

son las siguientes.

Que la Provincia de los Texas está en 33 grados y algunos minutos, q[u]e

el paiz es ameno y fertil, con mucha abundancia de madera, los ar

boles mui altos, muchos encinos que lleban el fruto de la vellota, mui

dulze. Que los Texas usan de los tamales, y demas cosas de maiz q[u]e

los yndios de este Reyno; que son mui limpios, y en sus casas de made

ra tienen quarto destinado para cosina, otro para dormir en camas

altas de madera, otro para guardar sus probisiones de maiz, frijol,

nueses y vellotas, y otro donde reciben á los que les van á veer.

Que preguntandoles quien les trahia el paño, escopetas, y abalorios

señalaron hacia los Nachitoches y dixeron, que en unas caxas por el

agua, trahian muchas cosas los franceses, y que se las daban p[o]r cava

llos, y por gamuzas. Que los Texas agasajaron mucho á los españoles

y religiosos, y les daban de todo quanto tenian, aunque sus cosechas

eran cortas, por que solo siembran lo que necesitan para mantenerse.

         Que cada uno de los Capitanes de los Texas, tiene quatro á

cinco cavallos mui cuidados y gordos, y que los demas tienen, algunos

a dos o tres.

Que cada uno tiene su casa mui apartada de las otras, pero que di-

xeron que fabricarian casas donde se ponian las misiones, y que vi-

virian en ellas luego que cogiesen la cosecha, pero que irian á sem-

brar á los parages que ellos acostumbraban.

Que D[o]n Luiz de San Dionis es á quien respetan mas los Texas, y que

sabe su lengua porque ha vivido entre ellos, una temporada, quatro

meses y otras temporadas menos tiempo.

Que los religiosos misioneros no les dió el Capitan Ramon las

 

{f. 12r}                                                                                           12

 

cincuenta fanegas de maiz para cada  mision y seis cargas de frijol que se le

entregaron pagado el flete, y que solo les dio para cada religioso un tercio de

arina; las herramientas que se embiaron para las misiones, no hay razon

de que se les entregara á los religiosos; para los soldados tambien parece que

daron pocos bastimentos, por haber llevado cortas probiciones, de que puede co-

legirse hubiese algun defecto en llebar todo el regalo para los yndios, que se

costeo de los caudales de S[u] M[ajestad].

Que D[o]n Luiz de San Dionis se fue a la Mobila diciendo, que iba por 18000

p[eso]s que tenia en diversos generos, y que volveria con brevedad, á vivir con

los españoles, entre los Texas; aunque esto se dificultaba, por haber visto q[u]e

llegaron dos yndios de la Mobila con cartas, en que le avisaban á dicho

D[o]n Luiz estaba mui enfermo el Governador de la Mobila, y que le que

rian nombrar por Governador.

Que con D[o]n Luiz de San Dionis se pasaron a la Mobila el Alferez Ra

Mon, y otros dos españoles.

Que D[o]n Medar Jalot, ó D[on]n Luiz de San Dionis, se casó en el Presidio del

Rio Grande, con una nieta del Capitan del Presidio de Rio Grande Diego

Ramon, la qual es sobrina del cabo de dichos 25 hombres, tambien

llamado Diego Ramon, aunque no tengo duda de que uno de d[ic]hos dos

franceses fue el que se casó con la nieta del Capitan Ramon, no he

podido averigurar con certidumbre qual fue de los dos.

Que en los Texas se podrian comprar á precios mas varatos los generos

de q[u]e necesitan los religiosos y soldados, que no en esta corte.

Que han afirmado los Texas distar solo cincuenta leguas con poca diferen

cia, de dicha Provincia la Bahia del Espiritu Santo.

Que el Rio de los Caudachos está cercano á dicha Provincia de los Texas, y q[u]e

hay muchos castores en las tierras de dichos Caodachos.

Que la piedra y vetas que se reconocen en la Provincia de los Texas y an

tes de llegar á ellos, manifiestan haber minerales de plata, y que tambien

 

{f. 12v}

 

los hay de azogue.

Que D[o]n Luiz de San Dionis aviso desde esta corte por carta que escribio al

Governador de la Mobila que dispusiese embarcaciones para poblar la

Bahia del Espiritu Santo, San Luiz, ó San Bernardo, con dos fines; el

uno poderse apoderar de todas las Naciones y Provincias que hay, desde

la Mobila, á dicha Bahia. La segunda, para asegurar asi por mar co-

mo por tierra tener en parte segura sus mercaderias, y cercanas á

Coahuila, y Nuevo Reyno de Leon, pues de uno y otro dista la Bahia

del Espiritu Santo 100 leguas, y aun menos; y del Presidio del Rio Grande

dista 55 leguas, con lo qual lograrán los franceses tener esperanza de

vender mas de dos millones de ropa, y otros generos que tienen en la Mo

bila; y estar á la mira, para que habiendo guerras con la Corona de

España, con facilidad pudiesen los franceses apoderarse de los minerales

de Boca de Leones, y de otros, y de las Provincias de Coahuila, Nuevo Re

yno de Leon y el Parral.

De este hecho, y noticias arregladas á los Autos que están en el Superior

Gobierno, y se hicieron en tiempo de los Ex[celentísi]mos S[eño]res Conde de la Moncloa,

Conde de Galvez, y Duque de Linares, y á las que ultimamente partici-

po Domingo Ramon en sus cartas de 22 de julio de este año, y por los

derroteros que embio dicho Diego Ramón y el Padre Fray Ysidro Felix

de Espinosa, y las que ademas de esto he podido adquirir, se infiere; lo

primero que S[u] M[ajestad] Catolica tiene recomendada la conquista de la Pro

vincia, y que conservacion de sus moradores, y de las demas naciones de yn dios que puedan atraherse al gremio de n[ues]tra Santa Religion.

Lo segundo, que en prosecucion de esto, se han gastado crecidos caudales des

de el año de 688 hasta el de 693 y desde el año pasado, á este presente.

Lo tercero que el fin unico para mandar S[u] M[ajestad] Catolica se embiasen misi

oneros y soldados que los escoltasen, es por la conversion de las almas

 

 

 

 

{f. 13r}                                                                                                     13

 

y reduccion á vida politica, y racional de dichas naciones.

Lo quarto, que el motivo de no haberse logrado fruto desde el año de 89 hasta

el de 93 que estubieron los misioneros entre los Texas, fue por tres razo-

nes; la primera, porque no habiendolos podido reducir á pueblos, falta

la ocasión de la enseñanza y terminos capaces, para que los religiosos

pudiesen desarraigarles sus abusiones, y manifestarle la verdad de nues-

tra Santa Religion. La segunda por las malas costumbres de los diez sol-

dados que quedaron con dichos religiosos, el mal tratamiento que hicie

ron á los yndios, hiriendolos por quitarles á  sus mugeres, y haciendo con

estas exhortaciones abominables la Nacion Española, e increible á a-

quellos naturales fuese buena la Religion que profesaban los Españo-

les viendo en ellos tan deprabadas costumbres. La tercera, porque no te-

nian poder para sujetarlos, y reducirlos á Pueblos pues solo eran 10 los

soldados, y el numero de yndios mui crecido, y asi prorumpieron en ma-

nifestar con desaogo, no querian viviesen entre ellos los españoles.

Lo quinto, q[u]e hoy no solo infuye para fomentar la conversion de aquello

Naturales el principal motivo de solicitar su bien, y enseñanza, sino

es el secundario, y mui importante en lo temporal, de solicitar que aque

lla Provincia esté baxo el dominio de S[u] M[ajestad] para que puedan recono

cerse las poblaciones de los franceses; contener sus conquistas, extender

las de  S[u] M[ajestad] Catolica, y formar por aquellas partes un presidio que sirva

de defensa para impedir los movimientos de los franceses de la Mobila,

y Canada, observar sus intentos, y contener sus conquistas, las que sin

duda no tomandose posesion de las dilatadas provincias que hay desde

la de Nachitoch, á Coahuila, se extenderán y poblarán los franceses, en ellas, y aun en los dominios de S[u] M[ajestad] Catolica, u á lo menos intentarán

introducir sus generos por el Nachitoch, y provincia de los Texas desde

donde tienen reconocida la tierra los franceses de la Mobila, y sin em

barazo llegan hasta el Rio Grande del Norte, al Presidio del Capitan

 

{f. 13v}

 

Ramon, y desde este al Parral, Provincia de Coahuila, Nuevo Rey

no de Leon; y patrocinados de algunos soldados de estos presidios, podran

introducir muchos generos en esta N[ueva] E[spaña] sin que pueda dudarse q[u]e

los franceses solicitan esto; aunque algunos lo dificultan, persuadido

de que los fletes les serian mui costosos desde la Mobila; lo que no tie-

ne eficacia, pues debe entenderse que los generos que se hallan en la

Mobila, los han conducido los ynteresados sin pagar derechos, en con

formidad del asiento que hicieron, y obligacion de adelantar aque

llas poblaciones; con lo qual han traido cantidad de generos, y quan.

do salio de la Mobila, D[o]n Luiz de San Dionis quedaban en ella mas de

dos millones de ropa, y otros generos ademas que la distancia por ti

erra llana desde la Mobila al Presidio del Capitan Ramón, solo es

de 280 leguas por tierra y queriendo hacer el viage parte pira

gua, es 160 leguas por tierra, y 160 por agua; y la tierra abundan

te de pabos, cibolas, y frutas, con que se hace poco exitoso el camino

y mui verisimil el intento de introducir dichos generos, pues el con

sumo de ellos es mui corto en la Mobila, y la cantidad que tienen es

mucha, y esto mismo lo persuade la noticia que dio el Governa-

dor de Santa Maria de Galve avisando al tiempo que salio D[o]n

Luiz de San Dionis de la Mobila, y que fue con el animo de introdu

cir las mercancias que conducian seis piraguas, y por carta, su fecha

20 de octubre de 715 avisó el mismo Governador que los franceses

volvieron á la Mobila, publicando habian llegado al Nuevo Reyno

de Leon, y Provincia de Coahuila, y que habian comprado mucho

numero de cavallada, y otros ganados. Esta noticia que consta en

los Autos del Presidio de Santa Maria de Galve, en el quaderno 13

folio 12 conviene con lo que dixo D[o]n Luiz de San Dionis, pues aunq[u]e

expresó que se bino sin detenerse, y que desde los Texas se volvieron

sus compañeros, esto se convence de falzo, y solo confirma la expre

 

{f. 14r}                                                                                                     14

 

sada noticia haber mostrado la orden q[u]e le dio el Governador de la Mobila

su fecha 12 de septiembre de 713 para que viniese á comprar ganados á

la Mision del Padre Ydalgo la qual está cercana al Presidio del Capitan

Ramon, y la noticia primera que dio el Governador de Santa Maria de

Galve, conviene respecto de dicha fecha, pues avisó el dicho Governador que

por el año de 713 salió de la Mobila San Dionis con seis piraguas cargadas de

generos, y lo demas que va expresado; y lo mismo se persuade de que para ca

minar las 160 leguas por agua, y otras 160 por tierra, no pudo gastar cerca

de dos años que tardó en llegar al Presidio del Capitan Ramón, según la

noticia que este dio, y declaracion de dicho San Dionis, y asi debe presu-

mirse, llegó y embio los ganados, y aun tubo tiempo para introducir los

generos, y volver á los Texas, y después hacer su viage al Presidio de d[ic]ho

Ramon aunque solo hubiese caminado cada dia dos leguas, sin que pueda

escrupulisarse en no creer á D[o]n Luiz de San Dionis y sus compañero, en

quanto á q[u]e los 20 franceses se habian vuelto desde los Texas, pues tam

bien faltó a la verdad en decir, que pasó sin detenerse en los Texas, siendo

asi que se ha justificado vivio entre ellos y aprendió su lengua; y faltaron

á la verdad en la abundancia que pintaron habia en la Provincia de

los Texas de ganado cavallar y bacuno, en decir que era el Governador un yndio llamado Bernardino, y en asegurar vivian en pueblos quando es con

stante lo contrario, y que cada familia tiene avitacion mui distan

te de los demas.

Lo sexto que la solicitud de los franceses para que fueran misioneros puede

ver con el animo de extrecharse en amistad y parentesco con los soldados

que hayan para resguardo, y por este medio lograr con mas facili

dad sus introduciones de ropas; esto lo persuaden las razones siguientes.

La primera haberse casado el uno de ellos con sobrina del que fue por

Cabo de los soldados, y la segunda haber dicho Dan Dionis, pasaba á la

Mobila por 18000 pesos que tenia en generos, para traherlos á los Texas.

 

{f. 14v}

 

Lo septimo, que mantener presidio en Nachitich, y en los Codaches no po-

blando la Bahia del Espiritu Santo, no puede ser impedimento para

las introduciones que se temen, y puede ser de grave perjuicio la pue

blen los franceses, por que si se les agregasen los yndios de la costa, y

en especial los Apaches, pudieran con facilidad impedir la comuni-

cacion desde el Rio Grande, á la Provincia de los Texas, alterar y

destruir las misiones que se fundasen en el camino, y conseguir se

pierda lo que se gastare en la Provincia de los Texas; y aunque esta,

habiendo paces entre las dos Coronas paresca dificultoso; no obstante, los

franceses ocuparon primero dicha Bahía, la consideran propia, y

solo la  nueva ocupacion y poblacion de los españoles podrá impedir

les la entrada, ademas de que en el tiempo de Paz es necesario preca

utelarse para el de guerra.

Lo octavo, que mantener S[u] M[ajestad] la Provincia de los Texas, le puede ser

vir de lograr con el tiempo, mucho numero de yndios contribuyen-

tes ademas de los provechos que ofrece la tierra, asi por los minera-

les como por la abundancia de cañamo p[ar]a jarcias de navios, y por q[u]e

teniendo á los Texas se logrará á los Caodachos que son sus amigos y

podrá ser de mucha utilidad el comercio en los castores.

Lo noveno, que atendiendo á las noticias que daa D[o]n Gregorio de Salinas

por carta de 18 de septiembre del año pasado participada á este Su-

perior Gobierno como habia celebrado alianza con el yndio, Rey /.../

cabeta quien tiene 58 naciones debaxo de su dominio las quales

nombra, y se convence que algunas de ellas son las mismas que confi-

nan por la paarte del norte con los yndios Texas, y que otras estan

á corta distancia por lo qual será de notable importancia poblar

en dichos Texas, y solicitar la conversion de las Naciones sugetas á

d[ic]ho Rey en especial las que sirvan para poderse comunicar por tier

ra con dicho Presidio de Santa Maria de Galve, pues con este medio

 

{f. 15r}                                                                                                     15

 

pudieran asegurarse la manutencion de uno y otro, la conserbacion

de la amistad con los yndios del norte, que son los mas guerreros, y q[u]e

pueda socorrerse de bastimentos el Presidio de Santa Maria de Galve

en los casos, que por mar no pueda executarse, no dudandose que en los ci-

tios que se poblaren en los Texas se cogerán frutos con abundancia, pu-

es aunque en la Mision que se fundó el año de 82 no se lograron las

cosechas, fue por que en dicho tiempo sobrevino el eclipse, con que se per

dieron las que no eran de regadio, y en dicha mision solo sembraron

temporada.

Lo decimo, que no solo será util para impedir las introduciones que de

sean los franceses, poblar la Bahia del Espiritu Santo, y para asegu

rar la permanencia de la Provincia de los Texas, sino es también

para evitar costos en las remisiones que se hagan de esta corte á los

soldados que hayan de permanecer en dicha Provincia, pues desde

el Puerto de la Veracruz puede llegarse á dicha Bahia por mar, en

tres ó quatro dias, y desde dicha Bahia convienen las noticias por los

derroteros, y relacion de los yndios; q[u]e hay solo hasta los Texas, cincuen

ta ó cincuenta y cinco leguas, y siendo tan corta la distancia, y tan

poco costosa la conducion, podra ser mucho menor el sueldo de los sol-

dados, y podra socorrerseles á estos en tiempo de guerra con mayor bre

vedad, á menos costa, y con artilleria, lo que es mui dificultoso, y mui cos

toso poderlo executar por tierra, pues dista dicha provincia de esta

corte 500 leguas.

Lo undecimo, que en todo caso es mui conveniente poner la mision q[u]e ha

insignuado el Padre Olibares en las cercanias del Rio de San Antonio

por que dicho citio está entre la Bahía del Espiritu Santo, y la Pro-

vincia de los Texas; es el citio mui proporcionado y los yndios de aquel

parage muchos de ellos mui afectos á dicho religioso, por haberlos trata

do, saber su lengua, y por el cariño que les ha manifestado quando los

 

{f. 15v}

 

ha visto, y comunicado; y dicha fundacion es precisa en caso de poblar

se la Bahía del Espiritu Santo, para la comunicación con la Pro-

vincia de los Texas, y aunque no se pueble será util para observar

si quieren executarlo los franceses ó quieren hacer algun desembar

co de generos, ó par que haciendo una poblacion grande como asegu

ra conseguirlo dicho Religioso, pueda tenerse seguro el desembarque,

si de la Veracruz se embiase artilleria ú otras cosas para los Texas

pues dicho Rio dista solo de la Bahia 10 ó 25 leguas, y con facili-

dad podran comunicarse con la gente de mar, en especial dando avi

so á los soldados de dicha mision del tiempo en que saliesen las

embarcaciones del Puerto de la Veracruz.

Lo duodecimo, que es necesario fundar una mision en las cercanias

del Rio de los Caodachos, asi por que S[u] M[ajestad] Catolica, en las mismas ce-

dulas que encarga la conversion de los yndios Texas, lo executa

de los Caodachos como por que en la tierra de estos es donde se crian

los castores que pueden ser de utilidad para la Real Hazienda

y comercio de España.

Lo decimo tercero, que para que tenga subsistencia la conquista de

los Texas y otras Naciones. Y se impidan los perjuicios que se temen

es necesario, lo primero embiar por cabo, á una persona de repre-

sentacion, de zelo asi en el Real Servicio como en la conversion

de las almas, y que sea experimentado en el buen trato en los yn

dios, liberalidad con ellos, y agasajo, y especial cuidado de que no los

molesten. Lo segundo que vayan soldados casados por que se evite

el perjuicio que se experimento el año de 80, y siguientes, y porq[u]e

con este medio, cada soldado es una familia, e insensiblemente se

iran connaturalizando, y poblaran en aquella provincia. Lo ter

cero que se lleben algunos yndios diestros en el cultivo de las tier

ras, y todo lo necesario para poder sembrar en ellas, lo quarto que

 

 

{f. 16r}                                                                                                     16

 

bayan algunos carpinteros, herreros, y albañiles, y á lo menos un

maestro de cada uno de estos oficios, y otro de texedor para que ense-

ñando á los yndios á beneficiar el cañamo, puedan texer de el con q[u]e

bestirse, y beneficiar la lana de los ganados que se les embiase á las mi

siones. Lo quinto que se forme un lugar q[u]e sea cavezera de las misiones

con casas de piedra fuertes que sirvan de quartel a los soldados que han

de estar para resguardo de aquella provincia en el interin que se de

termina hacer algun fortin, y poner en el alguna arilleria (sic) lo qu-

al parece será preciso solicitando que S[u] M[ajestad] dee orden para ello, pues

en provincia tan distante, á vista de tanto numero de naciones, y

con la cercania á la Mobila, ó es necesario desamparar dicha pro-

vincia, ó no se podra mantener sin evidente riesgo, no habiendo en ella

alguna fortaleza con aratilleria. Lo sexto q[u]e no sea menos el numero de

soldados que 60 para que ademas de los que quedasen en cada mision ha

ya 25 en el lugar que sirva de cabezera, para que con este medio, el

agasajo, y buen tratamiento que experimenten los yndios puedan redu

cirse á pueblos, y temer el faltar á observarlo, y los mismos soldados ten

gan alguna seguridad, y puedan salir algunos a reconocer las fronte

ras, y lograr q[u]e el agasajo que hacen los Texas á los españoles, no se con-

vierta en desaogo á vista de ser mui corto el numero como lo executa

ron ael año de 1692 y 693. Lo septimo que pudiendo ser, fueran todos

los 60 soldados españoles, y no mestisos, coyotes, o mulatos para que no suceda lo mismo que el año de 95 y en todo caso que los soldados sean de

satisfaccion, y por eleccion del cabo que fuere con el mismo titulo y

sueldo que se le señaló á D[o]n Domingo Teran.

El medio que parece mas proporcionado para que sin costo de la Real

Hazienda se execute esta conquista es, que del Nuevo Mexico donde

hay 100 soldados, se borren 10 plazas. Del presidio de Pasoque hay 50 bor

ren otras 10 del presidio de Casas Grandes que hay 50 se borren otras 10

 

{f. 16v}

 

de el de Conchos que hay 50 se borren otras 20 de la Compañía volante

que tiene el Governador del Parral donde hay 50 se borren otras 10

del presidio del Gallo que hay 50 se borren 10 dexando entero el

numero de soldados de los presidios del Pasage y Cerrogordo, p[o]r

que estos soldados son los que traginan y guardan los caros en que

se hacen las conduciones desde el Parral: se pueden borrar otras 10

plazas á la Compañía de Sonora, otras 10 al presidio de Sinaloa, y

en los Tepeguanes que siempre han estado quietos, y no sirven los

soldados: se pueden borrar 10 plazas en el presidio de Santa Catalina,

y otras 10 en el de San Sevastian.

Estos soldados no hacen falta en los parages donde se borran sus plazas

y estan avecindados en dichos citios, y aunque se les borren las plazas

serviran como vecinos, y acaso continuarán en el mismo exercicio de labradores ó arrieros de que por la mayor parte sirben los sol-

dados en dichos parages, y á lo menos no es dudable que el presidio de

Coahuila sea mantenido con 25 soldados, y que está internado en

tre yndios enemigos, y asi como los governadores y capitanes, tengan

el numero completo de los soldados que les queda borrando las 10

plazas podran defender sus jurisdicciones.

Para la mision que ha de fundar el Padre Olivares, pueden sacarse

ocho soldados del presidio del Capitan Ramon, que está en el Rio

Grande el qual tiene 30 y dos del Presidio de Coahuila; pues según

Expresa el Padre Olivares todos los mas de los yndios que inquietan

las misiones de d[ic]ho Rio Grande se agregarán á la Mision de San

Antonio por ser amigos de dicho religioso con lo qual haran poca

falta los ocho soldados, y mas quedandole á dicho presidio 22.

En conseqüencia de todo lo expresado parece lo mas arreglado al servi

cio de Dios y de S[u] M[ajestad] Catolica y comercio de los españoles que V[uestra] E[xcelencia] como

tiene determinado nombre por cabo principal con titulo de Teniente

 

{f. 17r}                                                                                                     17

 

General de la Provincia de los Texas, y Nuevas Filipinas por intentarse

esta conquista en tiempo de nuestro Felipe Quinto á D[o]n Martin de

Alarcón con el mismo sueldo que por la Junta General en 28 de noviem

bre de 690 se señaló al Cabo que fue á dichos Texas con Título de Teniente General, pues siendo este sujeto de tan conocida sangre, y de genio

tan proporcionado para conquistar yndios por su liberalidad, y agasajo

y siendo tan zeloso del servicio de Dios, y conversion á las almas (q[u]e ase

guran los Religiosos de Cretano catequisa mas con sus expreciones, q[u]e

los religiosos mas fervorosos) y del servicio del Rey, como lo acreditan

sus operaciones y serbicios en los Reynos de España, y en este Reyno,

y pudiendo representar con toda decencia el cargo de Governador, y

con este medio lograrse hagan los yndios el concepto mas favorable del

Rey, á quien sirve pueda esperarse con el favor de Dios, se logre con-

quista mas permanente, y a menos costa q[u]e la q[u]e se intentó y se prosi-

gio (sic) desde el año de 688 hasta el de 693 y para que asi suceda, y se

pongan los medios proporcionados á su consecucion, convendrá se funde

una mision en las orillas del Rio de San Antonio, y que en ella p[ar]a

su establecimiento y quietud permanescan 10 soldados del presidio

del Capitan Ramon, y de Coahuila, y que uno de ellos tenga el titulo

de Alferez, y sea cabo, y que D[o]n Martin de Alaracon llebe 50 soldados de

su satisfaccion, dandole el sueldo adelantado de un año para q[u]e los avie

de armas, vestidos, y cavallos, dandole algunos de cuenta de S[u] M[ajestad] en caso

de que vayan los doldados con sus mugeres y familias para que pueda

transportarlas, y q[u]e llebe orden q[u]e se vuelva el Capitan Ramon con sus

soldados, si no quisiesen quedarse como pobladores; que los que fuesen de

buen proceder, y en especial los quatro q[u]e fueron casados, quedará al cui-

dado de D[o]n Martin ofrecerles alguna ayuda de costa, y aviarlos para

que se quedan avesindados en aquella provincia, entendiendose que es

to no se ha de practicar con el Alferez Ramon, y los demas que se pasa-

 

{f. 17v}

 

acompañando a D[o]n Luiz de San Dionis, sin orden de este Superior Gobierno

y faltando al cumplimiento de su obligacion, y sin dar aviso de haberlo exe

cutado, lo que arguye malicia conocida.

Que llebe D[o]n Martin un maestro de carpintero, otro de arbañil (sic)un herre

ro y otro texedor á los quales se les dee p[o]r una vez el sueldo de soldados y

en adelante se mantengan de su trabajo, y si este no bastase, ó se ocupa

sen en obras de yglesias, almacenes, ó quarteles, se continuará el sueldo.

Quedará al cuidado de D[o]n Matin formar una poblacion que sirva de

cavezera, y observar las instrucciones que se dieren, y llebar algunos yn-

dios diestros en el cultivo de las tierras para hacer que desde luego se si-

embre lo necesario, para los religiosos, soldados, y sus falimilas, y para q[u]e

enseñen á aquellos yndios Texas.

Sera necesario q[u]e para la Mision del Rio de San Antonio, vaya el Padre

Olivares y otros dos religiosos, por que manifiesta ser mui crecido el nume-

ro de yndios que juntará, y q[u]e bayan con D[o]n Martin de Alarcon otros

quatro ó seis religiosos, dos para fundar una mision en los Caodachos

y los demas para la Nacion de los Nachitoches, y los demas q[u]e se agrega

ren.

En quanto a poblar la Bahia del Espiritu Santo, y formar algun fortin

en la Provincia de los Texas ó en Nachitich parece hay tiempo para

q[u]e se dee cuenta á S[u] M[ajestad] pues en lo tocante á la Bahia, p[o]r ahora podra

impedirse la poblacion de los franceses con la mision del Rio de San

Antonio embiando á reconocerla todos los meses para impedir si acaso

Lo intentasen ó introducir por ella generos, y la fortaleza en la Pro-

vincia de los Texas en los principios de la conquista y agasajando á

los yndios, y estando amigos por ahora los yndios del norte, y previniedo

se al Governador de Santa Maria de Galve, avise al yndio Rey de Cabe

ta no hagan sus subditos guerra á los Caodachos, y Texas, parece no es

por ahora precisa, y que habrá tiempo para que determine S[u] M[ajestad]

 

{f. 18r}                                                                                                     18

 

lo que sea mas de su Real agrado, pues aunque será preciso en adelante for-

tificar la Bahia del Espiritu Santo si se logra poblar dichas provincias pa

ra mantenerlas, y aunque esto no suceda convendrá fortifucarla por la cer

cania que tienen con las minas de Boca de los Leones, y con las provincias de Coahuila y Nuevo Reyno de Leon: con todo esto por ahora como no sea ur-

gente el riesgo, y los q[u]e paresen proximos, pueden evitarse con la fundacion

de la mision en las cercanias del Rio de San Antonio, y por otra parte no

sea compensable el exesivo gasto e fortificar y poner presidio en dicha Ba

hia con el aorro q[u]e podria haber en la conducion por mar, de los socorros

q[u]e hayan de embiarse á la Provincia de los Texas parece no hay motivo q[u]e

justifique los exesivos gastos de dichas fortificaciones, hasta dar cuenta á S[u] M[ajestad]

         En la forma q[u]e va propuesta esta expedicion, no solo se excusa nue

bo gasto á S[u] M[ajestad] sino es que se evita el de mas de 10,500 pesos al año, pues con

las 100 plazas q[u]e se borran hay para pagar á los 50 soldados con su cabo, y

sobra para pagar á los maestros que han de hir, y á los misioneros, y se ex

cusa el sueldo q[u]e estaba señalado á Diego Ramon, y á los 25 soldados que

fueron á los Texas, y aunque el sueldo de estos soldados importa solo 10000

pesos, y el de Diego Ramon 500 ya representaba que era necesario a-

ñadir 50 pesos de sueldo á cada uno, y asi todo este aorro se consigue p[ar]a

la Real Hazienda, y se podra esperar mayores aumentos en la conquis

ta, y favorables efectos en mayor servicio de ambas magestades.

Tambien se sigue el ahorro de 30 plazas de soldados, pues siendo las q[u]e

se hande borrar (y no hacen falta) 100 y pudiendose con las 60 costear

los  50 soldados, y demas q[u]e ha de llebar D[o]n Martin de Alarcon, se ex

cusa el sueldo de los 40 soldados q[u]e á 350 pesos importa 14,000 pesos con

q[u]e conseguirá V[uestra] E[xcelencia] a favor de la Real Hazienda el aorro de 24.500 p[esos]s

cada un año, y se aumentará á S[u] M[ajestad] Catolica un Nuevo Reyno.

         Este medio para conseguir el menor gasto de la Real Hacienda se

ha discurrido en otras ocacioness en barias Juntas Generales, y en espe-

 

{f. 18v}

 

cial quando se pusieron los 30 soldados en el Presidio del Rio Gran

de que esta á cargo del Capitan Ramon, y no se determinó, por no sa

car los 10 hombres de cada uno de dichos presidios, y solo se hizo un

prorrateo rebajando del sueldo de los soldados de dichos presidios la

cantidad necesaria para mantener los 30 soldados que estan en

el presidio del Rio Grande.

         Este reparo no lo ha habido para sacar en diversas ocasiones

ocho ó dies soldados de dichos presidios para executar algunas en

tradas ó expediciones, en las quales no se necesitaba gastar mas ti-

empo que el de un año con corta diferencia, porque en este tiem-

po teniendo los Capitanes y Governadores el cuidado que deben, se

discurria, que con el, y tener completo el numero restante de

soldados que les quedaba, podian tener defendidas sus jurisdiccio-

nes, asi se determinó en Junta General en 18 de noviembre

de 1699 mandando se sacasen 10 soldados al Presidio del Cuenca-

me, y el Gallo, y q[u]e con estos 20 soldados y otros hiciese su entrada

Alonzo de Leon.

Esto supuesto parece que no puede haber reparo en que p[o]r un año se

manden borrar las 10 plazas de soldados, en cada uno de dichos presidios,

lo primero por q[u]e de borrar las plazas, no se sigue el inconveniente

de sacar gente ni armas de dichos presidios, pues en ellos los mas de los soldados ó todos, estan con sus familias avecindados, tienen sus cosechas, y á lo menos suelen servir á los Capitanes y Governadores, ó de pastores

de sus ganados, ó de labradores, ó arrieros y en raro ó ninguno de los

presidios suele estar completo el numero de armas, y asi encargando

á los Governadores y Capitanes borren las plazas á los que se hallen

mas arraigados en dichos presidios, y manifestandoles, que es solo p[o]r

un año, y que permaneciendo en dichos parages, y asistiendo como

 

 

{f. 19r}                                                                                                      19

 

vecino á la defensa en los casos que se ofreciere serán preferidos para vol

ver á ocupar sus plazas; se conseguirá el ahorro á la R[ea]l Hazienda sin

que se experimente notable falta en dichos presidios. Lo segundo, porq[u]e

no habiendose considerado perjudicial en otras ocasiones sacar desta

camentos de soldados de dichos presidios, (lo segundo por que no habien

dose conciderado perjudicial en otras ocasiones) mucho menos podrá con-

ciderarse inconveniente en el medio propuesto. Lo tercero por que

con borrar dichas plazas p[o]r un año se consigue mantener la gente

q[u]e ha de ir á los Texas un año sin costo alguno, y queda para otro el

aorro q[u]e se consigue de 24500 p[eso]s ademas del expresado se logra fomen

tar dicha conquista dos años con bastante numero de gente, y sin

nuevo gasto de S[u] M[ajestad] de esto se siguen las utilidades de q[u]e en el año q[u]e

han de estar borradas dichas plazas se hará la visita de dichos presi-

dios y con esto tendran los capitanes y governadores completo el nu-

mero restante de soldados, y se averiguará si necesitan, ó no de

las 10 plazas q[u]e se les borraren, la segunda q[u]e en el tiempo de dos a-

ños se experimentará, si puede tener ó no permanencia la conquista

de los Texas, y con lo que resultare, y dando cuenta á S[u] M[ajestad] de esta

determinacion, ó señalará S[u] M[ajestad] caudales para q[u]e se forme presi-

dio, en la Provincia de los Texas, ó determinará queden borradas

 las 10 plazas si se conociese no ser precisas, y en el interin de esta

determinacion se hará el R[ea]l Servicio sin aumentar gastos del

Real Herario. Mexico y Noviembre 30 de 1716.- D[oct]or Velasco.

 

{A la izquiera sello Collection E. Eug. Goupil á Paris. Ancienne Collection J. M. A. Aubin}

 

{f. 19v}

 

{Al centro sello Bibliotheque Nationale R. F. Manuscrits}]